"Solo Contigo" fanfic Fred Weasley (+18)

Travesura realizada

Hice contacto visual con los perfectos ojos avellana de Fred. Podría quedarme horas observando su perfecto rostro. Su mandíbula marcada, su nariz recta y sus labios... sus labios que parecían ser tan suaves.
Fred debió de darse cuenta que miraba sus labios ya que una pequeña sonrisa traviesa se asomó. Al darme cuenta que estuve contemplándolo más tiempo de lo esperado mis mejillas se sonrojaron. Su mano ligeramente fría seguía sosteniendo mis labios. Aparté rápido su mano de mi boca y fruncí mi ceño.

–Estás loco, ¿qué haces aquí?– susurro para no despertar a Pansy, sus ronquidos seguían intactos.

–Venía a traerte esto– coge del suelo mi maletín– se te cayó cuando George...– alza su mano para mover su pelo con nerviosismo– ya sabes, nos empujó– aparta su mirada de la mía, al parecer igual hago el mismo efecto en él como lo hace en mi.

–¿No podías dármelo mañana?– digo con una pequeña sonrisa.

–¿Y qué tendría de divertido dártelo mañana?– contesta volviendo a mirarme.

–Tienes razón, ¿pero como lograste entrar?

–Privilegios de ser un alumno de último año– contesta Fred con una sonrisa un tanto egocéntrica.

–Okey– digo incorporándome en la cama, para luego levantarme.

–¿Qué estás haciendo?– dice Fred con cara de incredulidad mientras se para frente a mi.

–Enséñame algún otro privilegio de ser un alumno de último año.

A Fred se le ilumina un poco más su mirada. Me pongo un calzado cómodo y de mi maletín saco mi varita. Es más bonita de lo que podría llegar a imaginar, una madera muy oscura casi negra y por el mango la rodeaba una serpiente tallada a la perfección, de un color verde muy oscuro.

–¿Lista?– pregunta Fred extendiendo su mano y de seguido la envuelvo con la mía.

Salimos sigilosamente de la habitación escuchando los ronquidos de Pansy cada vez más lejos. Bajamos las escaleras de piedra hasta llegar a la sala común completamente a oscuras.

–Lumos– dice Fred con apenas un susurro. La punta de su varita se comienza a iluminar. No puedo explicar lo genial que se ve la magia desde tan cerca.– Venga Abby enciende la tuya.

No había hecho ningún hechizo en mi vida.

–Lumos– digo, pero mi varita no se encendió.

–¿No sabes hacer este hechizo? Se aprende en el primer año.– la mirada de Fred se ve algo sorprendida.

–Yo... es que nunca hice un hechizo antes– le aclaro a Fred.

–No entiendo, ¿no eres una Malfoy?– se nota mucha intriga en su voz y la verdad no sabría que responderle. Al verme callada y un poco incómoda siguió hablando– No pasa nada, yo te enseño

La mirada de Fred se suavizó y de le salió una pequeña sonrisa.
De seguido agarró mi mano que sostenía mi varita, rodeándola. Sus manos se ven tan grandes al lado de las mías.

–Tienes que hacer un movimiento como si fuera un triángulo sin terminar– me explica mientras mueve su mano junto a la mía– inténtalo ahora.

–Lumos.–Digo mientras hago el movimiento que él me enseñó. De seguido una pequeña luz comenzó a salir de la punta de mi varita iluminando parte de la habitación –¡Lo logré!– digo demasiado entusiasmada. Podría decir que la mirada de Fred tenía el mismo entusiasmo que yo.

–¿Ves? Muy sencillo, si quie...

–¡¿Quien anda ahí?!– la voz de Severus Snape hizo que nos callásemos de inmediato. Por suerte no estaba en la misma sala que nosotros.