PACTO♧hyunlix

FINAL

- ¿Seguirás huyendo de mi?

Dijo felix entrando a la terraza de uno de los edificios de la institución y viendo a Hyunjin de pie, observando la parte baja del edificio del frente. 

El rubio se acercó prudentemente y se posicionó al lado del más alto. 

- Cuando te conocí, solía venir aquí en las tardes porque sabia que tu irías a ese jardín

Dijo señalando el hermoso jardín que felix se encargaba de cuidar antes de que todo pasara. 
Sabía de las miradas taladrantes de hyunjin cada tarde después de su llegada al instituto, pero fingía no verlo para no alterarse a si mismo.

- Siempre has sido tan hermoso, tu sola presencia deslumbra a quienes te observan, tu rostro aunque serio, tiene rasgos tan dulces, tu pequeña nariz y tus hermosos labios son dignos de admirar. 
Pero yo quería más que solo mirarte o admirarte, quería tocarlos, quería saber que se sentía besarte, abrazarte. 
Y a medida que fue pasando el tiempo y me adentré más en tu mundo, renuncié a todo sin darme cuenta. 
Cuando mi razón quiso adueñarse de mi actuar, ya era muy tarde, me tenías en cuerpo y alma felix. Rogaba por tu toque, por una mirada tuya, por sentir que tenía tu atención.

El nombrado miró el rostro de quien había estado hablando y se sorprendió al ver un rastro de lagrimas inundando su mirada. 
El pánico se apodero de él y de inmediato tomó el rostro de hyunjin con sus dos manos tratando de que el más alto fijara su mirada en él.

- Te amé inclusive antes de que supieras de mi existencia, pero a veces siento que solo yo te amo felix... y me duele. 

Las lágrimas caían por su rostro y felix se apresuró a secarlas  suavemente con sus manos, entendía que hyunjin aún pudiera estar confundido, porque a pesar de todo lo que habían vivido y todo lo que felix había luchado... ¿Cómo podía dudar de su amor por él?

- La primera vez que me viste en aquel pasillo, no fue la primera vez que te vi hyunjin. 

El vampiro más alto miró con sorpresa y duda a quien ahora acariciaba su rostro mientras lo veía a los ojos. 

- El día que llegaste a este lugar, yo me encontraba en la entrada dando la bienvenida a algunos estudiantes nuevos, pero al verte mi cuerpo no respondió como lo habría hecho con cualquiera. 
Mis ojos se clavaron en ti y no pude dejar de mirarte, mi cuerpo pedía que te siguiera y así lo hice. 
Te seguí hasta la oficina del rector, jamás me había perdido tanto en la presencia de un humano y eso me aterró.
Me obligué a abandonar el lugar y alejarme de ti. 
Hasta que te vi en ese pasillo acompañado de chan y entonces entendí, que serías un problema del cual no me liberaría, del cual no me quería liberar aunque lo negara. 

Hyunjin lo miraba como si aún no le creyera del todo y felix al ver su rostro sonrió cálidamente pasando sus brazos al rededor del cuello del más alto.

- Si aún no me crees puedes preguntarle a seungmin, él te puede contar como los seguíamos en las noches para asegurarnos de que estabas bien y como los observábamos desde el techo de otras casas hasta que la luz de tu habitación se apagaba. 

- Eso da miedo..

Felix rio mientras se soltó del cuello de hyunjin para tomar su mano. 

- Te amé desde el inicio y te quería mío desde aquel entonces.
¿Crees que no quiero estar contigo?
¿Crees que no me muero por besar cada parte de cuerpo?
Desde aquel día en ese callejón en donde te salvé de esos malditos ebrios... Acepté que no podía luchar contra lo que eres para mi hyunjin. 
Y eso no ha cambiado en lo absoluto, te amo, tanto que duele. Pero por ti soportaría todo el dolor que sea necesario, te lo prometo.