La Enterradora Remake (Little Witch Academia)

Contrató: Madre

Mientras en BlackWater...

Las cosas en aquel bar ya se habían calmado un poco más, solo quedaban uno que otro borracho los cuales serían perfectamente manejados por Bubba y su hija Violeta. También la mayoría de las mesas yacían bastante limpias junto con poco o nada de basura en el suelo.

Erick dio un suspiró ya que debía de volver a su hogar antes de que algo más pasará. Por lo que dejó el trapo en la barra antes de darle un saludo respetuoso a Bubba.

Er—Fue un placer ayudarles, pero he de irme, la señorita Enterradora llegará dentro de poco.

B—De acuerdo, gracias hijo.—le dijo con tranquilidad posando una mano encima de él antes de ver a Imani con algo más de seriedad.—¿Tienes algo para el chico?.

I—¿Eh?, oh, cierto,lo olvidaba.—recordó aquello sacando de su bolsillo un pequeño objeto, una caja de color marrón.— Ten esto, cuidara de ti.—le informó dándole la cajita y tomando más de su botella.

Er—Gracias pero...¿Qué es?.— preguntó tomando con delicadeza aquella caja de madera aunque esta se movió levemente dejando en claro algo, había algo vivo dentro de esta.

I— Tú quieres un estúpido cabellerito inútil, pero también tienes magía, eso lo demuestran tus estúpidas plataformas, así que hice un pequeño... intercambio con las brujas mexicanas, les di algo que ellas querían por un bicho que te ayudará, te gustará, tiene la misma cara de bobo que tú.—dijo burlona revelandole aquello.

F—Te va a ayudar niño, solo un concejo, mejora tu comunicación con el animal y con tu lado mágico, créeme, lo vas a necesitar, mantenla hidratada también.— añadió Francisco tomando un poco de tequila.

Er—¿De acuerdo?...

I—¿Qué?,¿Quieres un instructivo o algo así?, vamos, largate.—le ordenó alzando su mano y mandándole que se fuera de allí de una vez. El peli negro solamente dio un saludo de respeto antes de retirarse de allí con la cajita en sus manos la cual se movía un poco.

Viendo esto dio un suspiró aquel cantinero mientras que Imani y Francisco solamente tomaban algo de Alcohol con suma tranquilidad pero con seriedad, esto mientras el dueño limpiaba con su trapo la barra de madera para posteriormente ver a su hija quien le ayudaba. Su pequeña tesoro no mayor a quince años, el único motivo de aquel cantinero el cual yacía perdido en sus pensamientos divagando en el pasado.

F—El futuro es tan incierto,¿No lo crees..."Bubba"?.—le preguntó Francisco llamándole la atención y sacándolo de sus pensamientos.

B—si...así es...¿Crees que él...lo...lo log...?.—preguntó con preocupación pero fue interrumpido por un simplemente movimiento de mano del charro significando que parará.

F—Puede que sí, puede que no, hay tantas cosas que cambian atraves del tiempo.—dijo sin más aunque se escucharía un pequeño golpe en la madera provocando que Imani y Violeta le vieran de inmediato con extrañeza.

B—necesito saberlo...por favor.—le insistió otra vez causando que el charro acomodara su sombrero dejando ver que diría realmente lo que sabía.

F—Viejo Cantinero, viejo amigo, no deberías preocuparte por el chamaco, es entendible, pero en el hay cinco historias las cuales desean ser contadas, aunque dos de ellas darán inicio el día que salga de la realidad para enfrentar un antiguo mal ligado al apellido de la Enterradora. Es todo lo que diré.—dijo con suma seriedad informándole y mirándole a los ojos directamente, cosa que puso tensa la situación por unos segundos.

V—¿papá?.—le preguntó preocupada posando su mano encima de él.  Cosa que hizo le hizo sonreír un poco más sacándolo de aquel silenció.

B— Estoy bien mi niña...papá sólo recordó a mamá...ve a dormir, me quedaré a cerrar.