Aphrodi - Flores

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Era un día soleado con algunas nubes, que hacían notar su presencia con la gran sombra que dejaban por donde pasaban. Con un día tan excelente, el joven de cabello rubio había decidido salir a un parque nacional, quería relajarse de todo el pesado entrenamiento por el que se sometía la mayor parte de la semana.

Una vez llego, duro un rato explorando, caminaba por el piso de cemento volteando a sus alrededores, intentaba admirar toda la planta que se le cruzara, hasta que poso sus ojos rojizos en unas flores de colores claros, con pétalos poco numerosos con algo de rocío, lo que las hacía ver delicadas. Al ver lo bonitas que eran, quiso ir a una de las partes del parque en las que las flores eran más abundantes.

Mientras más avanzaba tenía que ir más lento, el verde de las plantas comenzaba a llenarse de colores, con flores de diferentes tamaños. Sin embargo, al estarlas viendo notó que había unas de color azul, al inclinarse para apreciarlas mejor se dio cuenta de que no eran reales, más específicamente estaban dibujadas en tela. Acerco su mano tocándola con la punta de los dedos, pero al hacerlo unos mechones de cabello acariciaron su muñeca, topándose con unos ojos color chocolate.
—Lo siento —dijo luego de unos segundos, con sus mejillas rojas—. No me di cuenta que las flores formaban parte de tu vestido.
—No te preocupes —sonreíste levantando tus manos e igual de roja, te parecía muy guapo—. Es mi culpa por estar sentada en el suelo.
—Es muy bonito por cierto —extendió su mano ayudándote a pararte.
—Gracias —sonreíste—. Mi nombre es (tn).
—Yo me llamo Afuro Terumi, aunque normalmente me dicen Aphrodi, ¿te gustan las flores eh? —sostuvo una en su mano.
—Sí, me encantan, aunque ya casi es hora de que me valla —volteaste hacia donde estaba el camino de regreso.
—¿Puedo acompañarte? —dijo levantando las cejas con los parpados relajados.
—Por supuesto —respondiste disfrutando de lo bien que se veía en ese momento.

Doblo su brazo extendiéndolo hacia ti, lo miraste y sonreíste con ternura, pasando tu brazo izquierdo por debajo del suyo y juntando tus manos. Platicaron durante todo el recorrido de vuelta, deseando que el final no llegara ya que lo estaban disfrutando mucho.
—Bueno, parece que aquí es la salida —te dijo intentando ocultar su desánimo, volteando de frente a ti.
—Sí, gracias por acompañarme, la pase muy bien.
—Yo igual, espero que podamos volver a vernos.
—Seguro, si quieres podría darte mi numero —al decir esto su rostro se ilumino.
—Eso sería estupendo —sonrió más relajado.

Cuando volvio a casa, Aphrodi pensaba en lo magnifica que había sido la idea de ir al parque en su día libre, al mismo tiempo se preguntaba cuando sería bueno llamarte.

Al día siguiente se levantó temprano y se dirigió al instituto Zeus, se colocó el uniforme de su equipo y fue hacia el lugar de entrenamiento.
—Hola, ¿porque hay tanto alboroto? —preguntó al ver que todos hablaban entre si ligeramente agitados.
—Hola capitán, lo que sucede es que hoy vendrá el nuevo miembro del equipo —respondió Deméter sonriendo emocionado.
—Ah si —colocó su dedo índice en su labio inferior y miró hacia arriba—. Recuerdo haber oído algo al respecto.

En eso entró Kageyama, Aphrodi inclinó su cabeza a un costado, con la intención de mirar mejor a la persona tan mencionada que venía detrás de su entrenador. Abrió los ojos al igual que tú cuando ambos se vieron, no esperaban verse tan rápido, ni en un lugar como ese.
—Chicos quiero presentarles a (tn), de ahora en adelante formara parte de este equipo, espero que se lleven bien —volteó a verte y tocó tu hombro—. ¿Verdad (tn)?
—Es un placer conocerlos —hiciste la debida reverencia.
—Hmph, confió en que la trataran bien —se dio la vuelta—. Yo tengo que atender unos asuntos del agua sagrada, pero ya saben cuál es el itinerario, Aphrodi —llamó la atención del rubio—. Encárgate de enseñarle a (tn) todo lo que tiene que saber.
—Si entrenador.

Inazuma Eleven x Reader (One shots)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora