Capitulo 43

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Entramos a la cafetería y el ambiente era tranquilo, me gustaba el lugar. Ordenamos sándwiches de pollo y capuchino.

Jean: Oye... - dijo serio mientras alzaba la ceja, su expresión en realidad era divertida. - Un chico con cara de idiota te está viendo. - entre cerró los ojos.

T/n: ¿Quieres que te haga un lista de todas las chicas que te miran? - pregunté divertida.

Jean: No. – río - déjalo así.

Las ordenes llegaron y comenzamos a comer tranquilamente.

T/n: ¿Dónde dejaste lo gruñón y malhumorado? - pregunté.

El suspiro y me vio directo a los ojos.

Jean: Tú me cambiaste. - dijo sonriendo de lado

Sentí arder mis mejillas y decidí bajar la mirada.

Jean: Te ves hermosa cuando te ruborizas.

Reí y le di un leve golpe en el brazo

El teléfono de Jean comenzó a sonar y el frunció el ceño molesto.

Jean: Disculpa tengo que atender - sentí levemente.

NARRA JEAN

Jean: ¿Hola? – dije cuando finalmente entré al cuarto de baño

Ralf: Je...Jean – dijo agitadamente

Fruncí el ceño, algo andaba mal.

Jean: ¿Qué ocurre? – pregunté preocupado

Ralf: La policía atrapo a Libardo. En este puto momento están rodeando la casa de Naim. Nos están buscando a Orson, a mi y a ti, tienes que largarte ahora mismo de donde quiera que estés.

Mi corazón se aceleró ¿Qué se supone que iba a hacer?

Jean: Mierda – golpeé el lavamos molesto - ¿Cómo los encontraron?

Ralf: No lo sé, no tengo la más mínima idea, solo lárgate, huye si no quieres que te metan preso y arranquen a la niña bonita de tu lado – dicho eso colgó

Jean: Veo que ya acabaste – dije tomando un poco de capuchino

Ella asintió sonriendo

T/n: ¿A dónde iremos luego? – preguntó inocente

Jean: Iremos a casa – sentí mis ojos arder, pero tenía que ser fuerte.

T/n: Esta bien – sonrío – pasaremos una tarde linda, veremos películas y comeremos palomitas

Asentí. Cuando acabé de comer salimos del lugar, nos dirigimos al coche y subimos.

NARRA TN

Íbamos de camino a casa, pero Jean estaba muy serio. El camino fue silencio. Él estaba conduciendo más rápido de lo normal

T/n: ¿Ocurre algo? – pregunté preocupada

Jean: ¿Qué?

T/n: Qué si ¿Estas bien? – fruncí el ceño

Jean: Ah, sí, si estoy bien – dijo de manera rápida

Estaba ocultándome algo y eso no me gustaba. Al llegar a casa bajamos el auto y entramos.

Vi que Jean subió corriendo las escaleras y decidí subir detrás de él. Cuando entré al cuarto vi que él tomo una maleta, empezó a sacar ropa y la metió desesperado.

T/n: ¿Qué pasa? – pregunté asustada

Jean: No pasa nada – sonrió forzadamente

T/n: No, dime que es lo que está pasando – dije alterada

Enamorada de mi secuestrador. | Jashlem |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora