Xiao Zhan ~
Era martes, día de semana y trabajaba, pero tenía libre ya que me mudaría a la casa del niño engreído, el señor Wang se fue de viaje de negocios por un mes y el señor Lee lo acompaña ¿Qué cosas no? Para mi mala suerte la señora Jenny también pidió descanso ¡¡¿Qué le pasa a todo el mundo?!! Los demás empleados también salieron. Bueno, él muy pendejo del niño les corrió a todos para quedarse a solas ¡Conmigo!
«Ya estoy empezando a odiarlo. Robo mi primer beso, me toco sin permiso, por poco pierdo mi dignidad»
Después de tomar mi desayuno me dispuse a lavar los trastes. Mientras los platos se secaban me fui a empacar, una vez listo volví a la cocina y guardé todo en una caja. Al fin había terminado, con pena deseche las cosas que ya no me servirían, solo las cosas útiles llevaré a la casa del niño Wang, eso hasta que acabe mi contrato...después ya veré como me las arreglo.
Ya era medio día y aún no había cocinado el almuerzo, hoy tenía que hacer algunos postres para llevárselo a mi madre, rápido me dirijo a la cocina cuándo recordé que ya había guardado todo, con mi mano golpeé mi frente por lo distraído que era. No me queda de otra que comprarla en la calle.
Antes de ir al hospital ingrese a la pequeña oficina del dueño del edificio para informarle que pagaría la renta de este mes y lo dejaría libre.
En el camino al hospital compré un poco de comida y unos cuantos, de golosinas para consentir a mi hermosa madre, otra vez estaba dando brincos mientras cantaba, las personas me miraban con una sonrisa y yo les respondía con otra más encantadora, siempre fui una persona alegre así esté en mis peores momentos tengo que sonreírle a la vida, mi madre me enseñó eso y la verdad que me ayudó mucho.
—¡Mamá! — corrí a sus brazos — te extrañe mucho – me hundo en su cuello
—Mi niño, ahora ¿qué bicho te picó? – me responde dejando salir una risita mientras me da palmaditas en la espalda — ¿Qué paso amor? ¿me dirás que te pasa? – «por eso te amo mamá, me conoces muy bien»
—Conseguí empleo – digo alegre aun sin soltarla – ayer inicie – me separo un poco para ver la expresión que puso – estoy trabajando en la empresa Wang como un secretario – trate de hablar lo más seguro y confiado posible para que mi madre se lo creyera, me dio una mirada sospechosa, pero se le borró al instante que di una sonrisa de confianza.
—Mi niño – vuelve abrazarme – estoy muy feliz por ti amor, me alegra que al fin puedas ejercer tu carrera. Nunca dude de ti – se separa un poco y me planta un beso en la frente, dejo que me mimara así por unos minutos para luego separarme y darle la comida junto a las golosinas que compre.
«¡¡Mátenme!!»
Sé que le estoy mintiendo a mi madre, ¡pero no me juzguen! Tengo mis motivos. Si se entera de que estoy trabajando como el "niñero" de mi acosador le da un catapum, mejor no decirle nada.
ESTÁS LEYENDO
¡No soy un niño! ✓
De TodoWang Yibo es un joven de 19 años, su padre es un empresario muy conocido y como todo padre quiere lo mejor para su hijo. Su madre lo abandonó cuando tenía 10 años, el señor Wang nunca le dijo o explico del ¿por qué? A su hijo, simplemente se divorci...