Capítulo 2-5: Un paso con determinación

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En otras palabras, ella había dicho, "Te dejaré hacer lo que quieras, pero, te convertirás en mi arma", al final terminaría siendo el arma de cualquiera de los dos, sin embargo, no es eso lo que quería, todos los soldados son armas controladas por otras personas, lo único que me diferenciaría de ellos seria la potencia y la intención con la que es disparada, si los demás soldados eran pistolas que disparan a matar por poder, yo me convertiría en un cañón de plasma que dispararía a matar para proteger a otros.

De cualquier forma, sus palabras me molestaron, aun así, no la confronte, solo suspire y le pregunte.

-¿Con que empezamos?-

Lo observe de reojo y tenia una pequeña sonrisa llena dolor, aparte la mirada enseguida y Liryan volvió a hablar llena de energía.

-Primero hay que inscribirte para el examen de admisión de la Academia Solari, para ello tengo que tramitar los documentos de adopción ya que eres menor de edad, mañana temprano nos ocuparemos de eso, después a la Academia-

Liryan al terminar de hablar hizo una señal a Sora para que quitara la barrera, se levantó y tendió su mano hacia mi mientras de su boca salían las palabras "Vamos a casa".

Subimos a la taxisfera y de camino me dormí, no por cansancio, si no por las horas del día, el Arca tenía 24 horas mientras que Orwell tenia 16 horas. El cambio de horario me había pasado factura, lo ultimo que recordaba de ese momento eran las luces blanquecinas de la ciudadela.

A la mañana siguiente desperté en otra habitación totalmente desconocida, salvo que en esa ocasión la cama era más cómoda que la del hospital. Evidentemente estaba en la casa de Liryan, solo que la sensación de cerrar los ojos en un lugar y despertar en otro era muy extraña. Observé la habitación, era bastante amplia, aunque algo oscura debido a la hora que me había levantado, debió ser alrededor de las 7 de la mañana, todo estaba muy tranquilo, hasta que una voz a mi lado dijo.

-Buenos días, señorita-

Grité, grité tan fuerte que Liryan y Sora llegaron a la habitación, ambas llevaban ropa de dormir, no obstante Sora llevaba un rifle en manos, estaba lista para dispararle a lo que fuera que me hizo gritar, por lo que señalé la silueta a mi costado gritando "Fantasma", pero, prendieron la luces y me di cuenta de que el supuesto fantasma en realidad era una Noctem.

Durante un pequeño momento la recamara fue rodeada de un vergonzoso silencio, poco después Liryan comenzó a reír, mi grito no se comparaba con su fastidiosa risa, ella misma podría despertar una pequeña colonia durmiente. Entretanto, la Noctem se disculpaba muy apenada por el susto que me había causado, la miré detenidamente mientras le decía que era un malentendido mío. En ese instante entendí a que se refería mi madre cuando hablaba sobre la rivalidad que existía entre mujeres Sythius y Noctem, ambas tan diferentes y a su vez tan hermosas o eso hubiera pensado si Liryan fuera más majestuosa o callada, por el contrario de su irritante risa.

Tras la dura mañana que había pasado desayunamos en el comedor, Liryan me contó quien era la Noctem comenzando con su nombre "Risa I Lar", aún desconocía como funcionaban los nombres en otras razas, así que decidí llamarla Risa simplemente. En mi platica con Liryan mencionó que Risa sería mi nueva tutora legal, ya que si mis papeles se entregaban en la academia y su nombre aparecía como la persona a mi cuidado podrían llegar a darme un trato especial, como seria entrar sin hacer ningún examen de admisión, algo que ninguna de las dos queríamos. Por otra parte, fuera de la academia ella actuaria como mi asistente, inevitablemente la idea me fascino, una niña con asistente, solo con imaginar las posibilidades.

Al finalizar el desayuno, nos dirigimos a tramitar mi adopción, abordamos la taxiesfera y emprendimos nuestro viaje, fue una hora de camino aproximadamente. Entramos al edificio y un joven Niktan nos atendió, dijo que llenáramos unos registros, seguidamente Risa y yo fuimos llevados a una oficina, mientras Liryan y Sora esperaban en la sala de espera.

Un señor de tercera edad nos recibió, tomamos asiento y comenzamos el papeleo, seria más correcto decir que Risa lo hizo, ya que la única acción que lleve a cabo tuvo que ver con mi nombre, pedí que no lo cambiaran debido a que era lo ultimo que me quedaba de mi familia. Ambos me observaron aceptando mi petición, el resto de los papeles fueron llenados más rápido de lo esperado y cuando menos atención puse estábamos en la taxiesfera.

Ahí estaba, parada frente a un gran edificio blanco, únicamente con Risa a mi lado, sin percatarme las otras dos no estaba con nosotras, pero estaba claro cual era mi siguiente gran paso, "Entrar en la academia".


Pdt: Debido a falta de tiempo y principalmente estancamientos narrativos, pasaré a subir capítulos cada 2 o 3 semanas. Una disculpa y gracias por entender.

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⏰ Última actualización: Mar 29, 2021 ⏰

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