Umbridge se enamora de Fudge.

Capítulo único

Dolores Umbriedge estaba sentada en su oficina. Como era la secretaria del ministro tenía muchas cosas que hacer. Y, sin embargo, no podía concentrarse. Cada día su concentración disminuía y temía ser despedida.

Lo que le pasaba era que estaba enamorada de Fudge, su antiguo jefe. Le daba rabia de solo pensar en que había sido destituido. Pero ella siempre lo apoyaría, al igual que cuando no le creyó a Albus Dumbledore y aquella vez en que lo defendió en un intento fallido de que permaneciera como ministro de magia, o cuando sobornó a unas cuantas personas para que le dieran el cargo de ministro. Pero a pesar de todo eso, Cornelius seguía sin darse cuenta que lo amaba ¿acaso estaba ciego o qué? ¿por qué no se daba cuenta de algo tan obvio?

Cuando decidió que era inútil seguir fingiendo que redactaba una carta para el ministro búlgaro, decidió ir y declararle su amor en ese mismo momento.

Cuando llegó a su despacho, tocó la puerta tres veces con los nudillos y oyó que la voz de su enamorado le decía "Adelante".

Pero cuando pasó, se dio cuenta de que haber ido hasta allí había cometido un grave error. El ex ministro estaba en el suelo, atado y junto a este, estaba Draco Malfoy.

— Jamás me cayeron bien ni usted ni el ministro, profesora Sapo — Dijo Draco, apuntándole con la varita al corazón — ¡Avada Kedavra!