Capitulo 19

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TW MENCIÓN DE ATAQUES DE ANSIEDAD, PÁNICO Y TRASTORNOS DE LA CONDUCTA ALIMENTICIA.

Narrador omnisciente
T/N yacía distraídamente en un árbol viendo hacia el lago negro, leyendo un libro que había tomado de la biblioteca "quidditch a través de los tiempos" todo estaba muy silencio, solo se sentía el suave susurro de la brisa fresca tan característica de las tierras altas de Escocía y el crujir de las páginas siendo pasadas por las frías manos de la joven Abbot, los días eran repetitivos, más estudiantes petrificados, clases, clases y más clases, tareas, ser consumida por la agotante rutina era su día a día.

Justo ahora no tenía clases, estaba es sus horas libres, t/n solo quería detener el tiempo y quedarse así para siempre, que mejor que, un libro, ambiente calmado, vista preciosa y la mejor compañía, ella misma, no es secreto que la linda Slytherin había crecido con todo el amor del mundo y jamás le había faltado nada, pero no todo en su vida había sido color de rosa.

Constates ataques de ansiedad y pánico, pesadillas nocturnas y una constante disconformidad con su apariencia, sus padres siempre le habían dado todo pero hay algo que ni todo el dinero del mundo lo compensa, compañía, había crecido sola sus padres al ser aurores no pasaban tiempo en casa, así que t/n aprendió a vivir estando sola, esto a la larga le traería consecuencias, cuando estaba pequeña su mente podría pasar horas y horas ocupada jugando ajedrez mágico con su elfo doméstico Venny un regalo que t/n recibió al cumplir 1 año de edad, claro está que ella no lo recuerda y en sus recuerdos siempre a estado con Venny.

Pero a la medida qué pasa el tiempo, tu cabeza piensa más, ser educada en casa le daba mucho tiempo libre, tiempo que su cerebro utilizaba para pensar tonterías, como ella lo solía llamar.

A la edad de 12 años sufrió su primer ataque de pánico, fue mientras su pequeño elfo doméstico iba de compras hacia la tienda de comida más cercana y no le aviso a t/n, ella despertó y gritó el nombre de Venny por toda la casa sin respuesta alguna, se sintió tan sola, tan triste, como una pequeña muñeca en su caja de cristal, los segundos se sentían como horas, su caja torácica apretaba y no podía soltar el llanto, su respiración estaba atascada y las lágrimas comenzaron a caer, quemando sus rosadas y pecosas mejillas, cayó de rodillas llorando, preguntándose porque todos la dejaban sola, soledad, se sentía tan sola, tan indefensa, tan insegura eso fue hasta que su pequeño elfo la encontró llorando en el suelo de la sala de estar, este corrió a abrazarla, minutos después ella estaba más tranquila bebiendo una taza de té de bellotas que Venny le había preparado. Tal vez piensen que porque se alteraría tanto con algo tan minúsculo, ella siempre sintió que todo el mundo la abandonaba y no esta bien minimizar los sentimientos de los demás.

Insuficiencia y disconformidad, la familia de t/n la amaban o al menos eso decían, Shanon la prima mayor de t/n, una persona egoísta, egocéntrica y una excelente maga, la familia de la madre de t/n no dudaban en compararlas en cualquier oportunidad que tuvieran, siempre emitían comentarios como "Shanon ya hacia eso a tu edad ¿porque tú no lo haces?" "Tu prima no comería eso" "hazlo como Shanon" "Shanon lo logro al primer intento" "lo hiciste muy bien, pero..." "Eres buena, pero..." ¿porque no simplemente podían reconocer y decirle lo increíblemente buena que era en lo que hacía sin sumarle algún defecto, muchas veces comparaban su cuerpo con el Shanon.

Narra t/n

Edad 14 años, estaba en un almuerzo familiar en el sur de Paris en la casa de mis tíos, se había reunido la familia casi completa de mamá, el día era perfecto él sol acariciando suavemente mi cara, la brisa que me protegía que el antes mencionado no quemara mi piel, el olor de pan recién horneado en el ambiente ¿que podría arruinarlo?

Inconscientemente se dibujó una sonrisa en mi rostro, me sentía amada, después de tanto tiempo no me sentía sola, ese abrasante calor hogareño, pero no todo iba a seguir así.

Podrías borrar esa sonrisa molesta tuya-espetó mi abuelo-no puedes sonreír de la nada, es estupido y molesto-soltó este, esas palabras llenas de odio y desagrado que llegaron a mi rota alma, dispuestas a romperla aun más.

Decidí no decir nada, siempre fui educada con "respeta a tus mayores" pero ¿porque ellos no lo hacían conmigo? ¿Acaso no merezco ser respetada?

Mi ánimo bajó y como si el cielo me entendiera y sufriera conmigo, los rayos del señor sol fueron apacados por una nube.

Los elfos domésticos de la casa sirvieron el almuerzo, la gastronomía francesa me encantaba y eso me alegró un poco el instante, porque eso somos, somos instantes, tratando de ser felices aunque todo lo demás lo quiera impedir.

Comencé a comer era delicioso, tenía mucha hambre, no había comido mi desayuno, aveces sentía que no merecía comida o que tenía que compensar lo que comería en el siguiente tiempo de comida.

Pero amaba la comida francesa y estaba dispuesta a comer otro platillo, aunque mi cabeza dijera que no.

Disculpa pequeño, me podrías traer otro plato por favor-le pedí a un elfo doméstico que rondaba cerca de la mesa-

¿Otro?-escupió Shanon, sin el menor tacto-

Deberías controlar un poco más lo que comes t/n, Shanon nunca come dos veces-apoyó mi tía-por eso luces así- susurró lo suficientemente fuerte para que yo lo escuchara-

Asentí

Dolor, eso sentía, mi alma romperse aun más, mis ojos comenzaron a picar, la respiración me empezó a fallar, no ahora no me podía quebrar frente a ellos, no les daría más motivos para juzgarme.

Me levanté de la mesa sin decir nada más y me fui directo al baño y ahí estaba otra vez, sola, insuficiente, rota.

Me arrodillé a la altura del inodoro e introduje mi dedo índice en mi boca, provocando así arcadas.

Como algo que disfrutaba tanto se había convertido en el motivo de mi llanto momentos después, seguía ahí, arrodilla, con la vista nublada por las lagrimas que se acumulaban en mis ojos, mi cuerpo exhausto y una garganta quemada por el vomito, me levanté, jalé de la cadena, cepille mis dientes y lavé mis manos, me vi en el espejo, tenía ojeras, pequeñas arrugas se formaban cerca de mi boca y de mis ojos, después de ser una hija del sol y del cielo había pasado a ser alguien tan extraño y triste.

Duele ¿porque si dicen amarme, tiene que doler?

Me senté en suelo del baño y me abracé, ese nivel de soledad en el que solo quieres que alguien te abrace y te diga que todo estará bien, que te diga lo buena que eres y lo mucho que te quiere y que jamás te dejará sola porque vales la pena, me abracé a mí misma, dejando suaves besos en mis brazos  y frotando mis hombros que poco a poco se le sentían más los huesos y ahí aprendí, me tengo solo a mi, estoy sola en esto, quizá no valgo la pena...

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Holaaaa, perdón por tardar, no me sentido bien últimamente, saben que no están solxs, les quiero mucho y valen mucho la pena, si se sienten mal no duden en escribirme, espero les haya gustado el capítulo de ahora es un poco más extenso pero siento que lo ameritaba. Por cierto cambie el nombre y la portada de la obra jeje

No olviden votar y comentar, sería un placer hablar con ustedes :p

Atte: Narse, con amor <3

Soulmates(Cedric Diggory × Tu) EN EDICIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora