Abrazame!

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Me envió un mensjae, él ya había llegado al pueblo, estaba esperando en la parada del tren, así que mande a mi padre a buscarlo.

Mientras ellos estaban de camino me empecé a sentir mal, mis demonios volvian a atorrmentarme, querían hundirme más de lo qu eya estaba, y eso practicamente era impossible, ya no me podían hundir mas, la osucridad empezo a tomar control de mi cuerpo.

Por fin una de las infermeras tubo un descuido, salio y se dejo un boligrafo encima de la mesa, lo cogí al instante, me fuí corriendo al lavabo y me encerré, cogí el boligrafo lo mire y sin pensarlo dos veces, lo parti por el medio, pase mi dedo por encima y vi que eataba lo suficiente afilado como para conseguir hacerme daño, de repente unos golpes en la puerta me interrumpieron, mi padre y Ashton ya habían llegado, sin pensarmelo dos veces cogí el boligrafo e intente rajarme la muñeca, quería desangrarme y morirme, me odiava demasiado, no quería seguir viviendo, por que no lo entendían de una maldita vez!?

Salía sangre de mi muñeca pero no la suficiente. Yo no quería seguir respirando, ya no sabía que hacer, Mierda!

Así que decidí rajarme el cuello con ese maldiro boligrafo que no serbía para nada, cuando lo pusé encima de mi cullo, alguien intento tirar la puerta, le dio un primer golpe, la consiguio mover un poco,  pero no consiguio tirarla, cuando le dió un par de veces mas, consiguio tirarla, no paraban de caer lagrimas por mis mejillas, me dolía la cabeza, estaba mareada, me sentía debil, la sangre seguía salide de mi muñeca, tenía toda la ropa manchada...

Subí la cabeza y vi la sobra de dos hombres, una de ellas  se acercó a mi, yo no podía distinguir de quien se trataba, las lagrimas me impedian ver, me limpie los ojos con la mano que tenía libre, y allí estaba él, Ashton me miro, y yo me quede paralizada, sus ojos me hechizaron no podía mover ni un solo musculo, él aprovecho ese momento para arrebatar el boligrafo de mi mano y yo me puse a llorar como una maldita niña pequeña y me estire en el suelo, y con mis manos me cogí las piernas, parecía una maldita loca, él me siguió mirando, él no sabía como reaccionar ante esa situación, dió un paso hacía mi.

Le pedí que porfavor me abrazara, que necesitaba un abrazo, y el sin pensarselo dos veces se estiro a mi lado en el suelo, me abrazo,  se mancho de sangre, pero no le importo. Su abrazo me hizo sentir tan bien, cuando él estaba a mi lado me sentía fuerte, él hacía que mis demonios se fuesen, aunque solo fuera por unos malditos segundos, él era el único que conseguia calmarme. 

De repente entro el Doctor y una infermera y nos separaron, me inyectaron algo, y sentí que mis parpados me pesaban, y poco a poco me quede dormida....

*Ashton:

Estaba nervioso por verla, estaba en la parada del tren esperando a que su padre me vinese a buscar, cada segundo que pasaba me ponía mas y mas nervioso, y me puse a pensar, y me vino a la mente eso que me dijo por telefóno, me dijo que no quería que nadie la viese en las condiciones en las que estaba, eso me asusto, me empezaron a venir un muchas cosas en la mente, y realmente esperaba que no le pasara nada de lo que estaba imaginando...

Quería verla, me había impresionado el otro día, ella era tan distinta a las demas, ella no trataba de gustarle a nadie, ella solo quería ser ella misma, solo quería ser feliz, peo no podía y eso me rompía el alma.

De repente llego un hombre, y por lo que se vio, él me reconoció al instante, me pregunto si yo era Ashton y le dije que si, así que me pidió que lo acompañase, y lo acompañe a su coche, estubimos como 15 minutos en el coche, y aparco.

Me sorprendí mucho al ver en el sitió en el que aparco, así que le pregunte que hacíamos allí, le pregunte que si Clara estaba allí, el simplemente se limito a decirme que lo acompañase que ella me lo explicaría todo.

Entramos al hospital, subimos unas cuantas escaleras, ibamos andando en silencio, ninguno de nosotros dijo una palabra, lleguemos a una habitación, el dió dos golpes antes de abrilr la puertia y entrar, mi corazón latia cada vez más fuerte, yo lo seguí, pero tenía miedo.

Pero al entrar en la habitación no había nadie, vi en la cara de su padre mucha preocupación así que salio corriendo a buscar a una infermera, yo estando allí de pie, escuché un ruidito en un cuarto que me pareció el baño  y supe al instante que ella estaba allí, llame en la puerta pero no hubo ninguna respuesta, me invadio una terrible preocupación y sin pensarlo intente tirar la puerta a golpes, llego su padre y me ayudo, conseguimos tirar la puerta y, y allí estaba ella, tan indefensa tan triste tan mal, esa imagen me rompio en dos sentía tanta pena por aquella chica...

Vi sangre, pero no mucha, lo que me preocupo fue verla con un boligrafo en la mano puesto en su cuello y estaba llorando, tenía los ojos rojos de tanto llorar, no sabía que hacer, dí un paso hacía delante y le arrebate el boligrafo,  la mire, estaba tan rota, de repente se estiro en el suelo y puso sus manos en sus piernas, estaba en el suelo, estirada, toda manchada de sangre, sus preciosos ojos no parecían ser los mismos, tenían un color distinto, era como si la oscuridad la hubiese poseído.

De repento hablo y me pidio que la abrazase, me estiré a su lado, la abraze, la abraze lo mas fuerte que pude, quería hacer que su dolor desapareciese, su dolor era mi dolor, si ella estaba mal, yo estaba mal, odiaba verla así...

En ese momento fue cuando me di cuenta de que sentía algo por esa chica, se que casi no la conocía, pero sentía algo por ella, necesitaba estar a su lado, necesitaba verla sonreir, necesitaba cuidarla, necesitaba que fuese mia.

Ashton Irwin,  Por qué me quieres a mí?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora