(Para quien no se acuerde, Kiryu es tu mejor amiga, la de tu dimensión natal y este capítulo comienza desde antes de que T/N se va a la dimensión del anime)
Estábamos tranquilamente paseando de camino a casa, hablando de cómo se obsesionó tanto con Katsuki, como todos los días. Pero algo pasó que cambió toda mi vida y me dejó destrozada
-SOCORRO- gritó T/N desesperada
-¡T/N chaaaaan!- fue lo último que le dije.
Una extraña sustancia que era como pintura flotante, de color azul oscuro con brillantes destellos, esa sustancia, absorbió a T/N, y no la volví a ver. Me quedé de piedra, ¿qué había pasado? No entendía nada, alguien de alguna extraña manera se la había llevado, o eso creía, parecía todo demasiado irreal.
-Esto tiene que ser un sueño, esto tiene que ser un sueño- decía para mí misma.
Empecé a buscarla por toda la ciudad, por si esto había sido una ilusión mía o algo así. Estuve buscándola durante horas, en la escuela, su casa, el parque, incluso por el centro de la ciudad y nada no hubo manera, le intenté enviar mensajes y la llamé mil veces, pero no le llegaban los mensajes y siempre saltaba el contestador. Después de bastantes horas la madre de T/N, Kozume Kyoto, me llamó
-¿Kiryu, T/N está contigo? Es que no me contesta y lleva mucho tiempo fuera- en ese momento supe que no iba a ver más a T/N
-No-
-¿Qué quieres decir con que no está contigo? ¿Está bien?-
-No lo sé- mi voz sonaba débil y estaba a punto de llorar
-¡¿Sabes que le ha pasado?!-
-Si se lo cuento no me creería, voy a su casa y hablamos allí- después de decir eso colgué, no había pensado como le iba a contar a la señora Kozume lo que había pasado, seguro que no me creía.
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Llegué a casa de T/N, el sol se estaba escondiendo, hacía cinco horas que había salido de la escuela. Con miedo, llamé al timbre "ding, dong" la señora Kozume abrió la puerta
-Kiryu, has llegado- era una mujer baja y regordeta, tenía el pelo corto, a la altura de las orejas y marrón avellana, se parecía bastante a T/N -Ven pasa, toma asiento y cuéntame lo que ha pasado-
-Seguramente no me crea, pero, que sepa que todo lo que voy a decir es verdad- le conté todo. No me creyó.
-¡Estoy preocupada por mi hija! ¡¿Cómo se te ocurre inventarte algo así?! ¡¿Sabes lo preocupada que estoy!?- me temía que iba a ocurrir esto, la señora Kozume siempre pierde los nervios con facilidad y aún más si se trata de T/N
-P-pero, ya le he dicho que no me he inventado nada, por favor, créeme- ya no aguantaba más me puse a llorar, la madre de T/N me abrazó
-No sé porque te inventas estas cosas, pero encontraremos a T/N-
