¿Aún me recuerdas? [Harco/Drarry]

Una batalla de dos

~Hermione~

Estaba en la cocina de la pequeña casa, cuando escuché un pequeño grito proveniente del piso de arriba, era débil casi como si quien lo hubiera hecho no hubiera querido que se dieran cuenta. Subí las escaleras de par en par tratando de contener mis ganas de gritar si había alguien.

Busque a simple vista por el pasillo pero no pude divisar nada, así que me dispuse a revisar las habitaciones sin encontrar nada. Pasé de largo aquella puerta en medio del pasillo hasta que escuche otro sonido proveniente de ahí. Me asome tomando todo mi valor y observe el interior de la pequeña habitación y ahí estaba.

-¿Ron?-Pregunté abriendo más la puerta mientras lo observaba sentado con las rodillas en el pecho con los brazos alrededor de un pequeño bulto-¿Estas bien, cielo?

-¿Por qué?-Me pregunto mirándome con los ojos llenos de lágrimas sin soltar lo que tenía en brazos-¿como pudiste hacerme esto, Hermione?

-¿De qué hablas, amor?-Le pregunté acercándome un poco a él mirando la habitación, había una cuna en el medio de esta con muchos juguetes y ropa esparcidos por el suelo. Lo mire asustada, jamás lo había visto así

-¡¿Como pudiste quitarme a mi hija?!-Pregunto gritándome mientras las lágrimas caían por sus mejillas, lo mire horrorizada sin embargo no me detuve y me seguí acercando

-Amor, yo...-Le dije arrodillándome frente a él con lágrimas en los ojos-no quería hacerlo, lo siento,de verdad...

Él me miró por unos momentos con dolor en los ojos, le puse mi mano sobre su mejilla mientras mi corazón se partía en pedazos, observe el piso por unos segundos.
Cuando subí la mirada hasta su rostro un grito de terror salió de mi boca, sus labios formaban una sonrisa maniática y lo que antes eran lágrimas comunes se habían convertido en lágrimas de sangre.

-Te perdonó, porque ella está aquí-Me dijo sin dejar de sonreír de la misma forma, yo lo seguí mirando asustada hasta que me tendió el bulto que tenía en brazos-¿Quieres cargarla?

-¿De qué...de qué hablas, Ron?-Le pregunté tratando de ponerme de pie, sin embargo el me detuvo tomándome por el brazo

-¡Cárgala!-Me dijo fuera de sí, lo mire aún más asustada y temblando tome el bulto en mis brazos.-mírala,Mione. Es hermosa

Sin dejar de temblar moví la cobija destapando lo que sea que tuviera en brazos. Otro grito de horror salió de mis labios logrando que mi garganta se irritara un poco, mientras lágrimas empezaron a brotar de mis ojos y sin poder evitarlo caí de rodillas mientras abrazaba el bulto.

Era una bebé llena de sangre, no respiraba, no se movía, no hacía nada. Grite otro poco hasta que una mano se puso en mi barbilla y alzaba la cara de forma brusca.

-¡Cárgala, como cargaras con la culpa toda tu vida!-Gritaba Ron para después reírse de forma enferma.

-Yo, lo siento...-Dije bajando mi vista y llorando aun más.

-Jamás te perdonaré-Me decía mirándome desde arriba-jamás...

Y entonces desperté, me levante rápidamente de la cama con el cuerpo sudado. Mire el reloj que se encontraba a un lado de la cama para ver que era de madrugada. Mire a Ron quien se encontraba durmiendo junto a mi, se removió un poco en la cama pero no se despertó. Me puse de pie y me dirigí al baño, en cuanto estuve dentro me mire en el espejo observándome el rostro el cual se veía en pocas palabras verdaderamente mal, tenia ojeras de tantas veces seguidas sin poder dormir mi rostro se veía pálido e incluso más delgado de lo normal.

Intente lavarme varias veces el rostro para que se viera mejor, sin embargo parecía que no servia de mucho y despues de intentarlo varias veces sin lograr nada no pude evitar romper en llanto, cerré la puerta con un hechizo pero antes de que pudiera poner un muffliato para que Ron no me escuchara unos golpes en la puerta me dieron a entender que si me había escuchado.