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"Dime verdades" susurré al viento matutino con la sazón desesperada de mi propia subsistencia. Allá, en la morada sin techo, muros o ventanas, junto al árbol del parque del olvido. Atrapado en pensamientos enfermizos que heredé de la claustrofobia de las llanas de mi calabozo sin rejas, vasto, extenso como atiborrado de vacíos peligrosos. En las claras y ofuscas. En las esperas muertas a manos de la desesperanza o en el silencio que nunca calla, y adorna lo nefasto con destellos fantasía cuando cualquier sonrisa me es concedida en la desolada acera limosnera, sin moneda recompensa. Solo mueca y espalda.

Sí, tanta frustración despierta temor que se torna ira. Al ver el irrefutable hecho de mi invisibilidad en el refulgir prepotente de ciegos que ven, de almas temerosas. De moneda tirada en la caja de la única opción que me guarda encadenado a la celda del fuego, corrosión, laceración espiritual y locura.

Y cuando nada resta por las nulas expectantes. Y cuando el sol me evita buscando otros amaneceres en distintos más afortunados. Y cuando la luna me invita, el frío abraza y el miedo impera. Salgo de la invisibilidad forzosa para sembrar justicia errónea. ¿Sabes por qué?

Porque puedo, quiero y me reinvindico en la sala de los infiernos...Mi última parada.

"...Dulce queda en el paladar juerguista de joven esbelta, mientras transcurre hacia el lecho de noche consuma, sola.

Gira las esquinas inerme, ritmando con sus tacones aguja la gesta oscura de mis funestos anhelos, secuestrada por la falsa esencia de la seguridad incierta que ofrece el credo político aceptado en lo social, mentiroso en su fondo, superficie o lejanía. Y en el segundo efímero que todo lo cambia, entre penumbras hogar del descampado escenario, avanzo con sus miedos en mis manos y rapto inocencias a mordiscos.

Ni sus alaridos, ni sus súplicas. Ni su cartera o la fe ciega recién aflorada gracias al imprevisto delirante de una muerte agónica, inesperada...Paran lo injusto del imperceptible y su festín cena.

Otro segundo congelado en mi cabeza es recompensa, imagen tétrica de filo jugando con carne, discutiendo con hueso al son gutural de la mortecina expuesta, música para mi demencia...sí, del gran gozo para el invisible limosnero de la calle esperanza con esquina navajas, silencios, soledades, locura y caza nocturna... El no visto que aguarda, salta, muestra y venga. Por culpa de vuestro ninguneo impuesto."

Ese soy. El que no adviertes y te espera...

CALLE.

XX:-"Llegamos aquí esta los otro que me pidió, la esperare aquí a esta hora es cambio de turno se tardarán aproximadamente 45 minutos en que la otra patrulla llegue, este es el punto ciego entre por la puerta tracera esa cámara está en mantencion por 1 hora procure no somarse a la ventana delantera ya que hay una cámara" - dijo pasándome unos guantes,un silenciador, un maletin negro con contraseña y un sobre con el ácido prúsico. (un veneno muy eficaz, potente y rápido. La víctima muere en medio de un ataque epiléptico).

D:-"Espera atento. " - dije antes de bajarme del auto.

Me puse mi sombrero negro para evitar que vean mi rostro y mis guantes de cuero negro para no dejar huellas en la casa ni en el cuerpo.

Puse unas de mis manos en el bolsillo y camine hasta la entrada de la casa vesina, salte el muro que separaba las dos casas, quedando en el patio tracero de la casa, camine al rededor de la casa hasta encontrar una ventana abierta, y me metí silenciosamente si hacer ningún tipo de ruido, al entrar super que era la ventana de su piesa, así que camine despacio hasta escuchar un ruido, camine lentamente hasta la puerta y vi que había un largo pasillo, camine hasta el final del pasillo revisando cada una de la habitaciónes de la casa hasta llegar a la sala de estar pero no había nadie, y hay estaba nuevamente aquel ruido de otro lugar camine esta vez haciendo sonar mis lentos y seguros pasos de pronto aquel sonido se dejó de escuchar, al entrar a la cosina estaba ella Empuñado un cuchillo para cosinar de carne, mirándole fijamente, ahogada en su miedo.

Déjame ser yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora