Aquel sonido de tacones resonando en la parte de arriba, solo indicaba una cosa, aquella chica estaba por bajar a ver que había generado aquel estruendo, proveniente del primer piso.
— Ya ves lo que hiciste Sook, nos despediran por tu culpa, sabes que a la señorita le aterran los pedazos de cristal roto. —decía la empleada doméstica llamada Hoo.
— Bueno pero de todas formas no es como si se fuera a dar cuenta de que son pedazos de cristal, sabes su situación y además créeme que se lo que le molesta Hoo, esto fue una accidente, por supuesto que no lo haría a propósito, pero de igual forma no te preocupes, me haré responsable de lo que hice y diré que tu no tienes nada que ver, yo iba distraída y por eso choque contigo. —
— Da igual Sook, sabes que ella no tolera ni un solo error. —
— Efectivamente señorita Hoo, que bueno que lo sepa, yo no tolero ni un solo error, así que están despedidas. —
— Pe-ro. — habló Hoo.
— Pero nada, he dado una orden y la respetan, váyanse de mi casa ahora mismo. —
— E-e-sta bien señorita, solo recogemos los cristales rotos y nos retiramos. — Hoo recibió un codazo de parte de su compañera de trabajo o más bien ex-compañera de trabajo por lo que había dicho.
— ¿¡CRISTALES?!. — De repente un recuerdo llegó a la mente de Sun Hee, el recuerdo de ese día tan espantoso para ella, el día del accidente, el día en que ella perdió la vista.
Flashback
— ¿Estas lista para salir Sun Hee?. — preguntaba su profesor de danza.
— Si estoy lista, estoy muy nerviosa, solo espero hacerlo bien. —
— Claro que lo harás bien, eres la mejor bailarina de todo Seúl, que digo de Seúl de todo Corea, Sun Hee, ahora anda y ve a hacer brillar ese escenario con tu talento. —
Sun Hee simplemente sonrió y corrió al escenario para interpretar la danza de el baile de el Lago de los Cisnes, danza donde ella se luciria, danza donde ella sería la protagonista, danza donde ella sería únicamente feliz, o eso creyó.
Sun Hee verdaderamente se estaba luciendo en el escenario, todo el público le aplaudida sorprendidos por el talento de aquella chica.
Ya estaba casi al final de la danza, solo falta dar el paso más difícil, ella debería de hacer el Jeté, Petit y listo.
Cómo era de esperarse lo hizo excelente, terminó la música y ella hizo una reverencia como gesto de agradecimiento, estaba tan contenta y agradecida por todo.
Todo era tan estupendo que ella no se lo creía, así que miró hacia arriba y cerró sus ojos esperando que todo se tratara de un sueño, pero no, cuando los abrió se percató de que todo era real y justo en ese momento lleno de felicidad, una lámpara se rompió en la parte de arriba del escenario, haciendo que pedazos de cristal cayeran hacia el suelo, ella quedó en shock, por lo tanto no pudo moverse, haciendo que dos cristales cayeran en sus ojos.
Todo el mundo corrió a auxiliarla, incluyendo sus compañeros de baile. La llevaron al hospital, pero lamentablemente fue demasiado tardé, ella había perdido ya completamente la vista y era muy difícil que volviera a recuperarla, ya que necesitaban una donación de córneas y por supuesto que lo intentaron, pero lamentablemente no eran compatibles con ella.
Así que todos se dieron por vencidos, incluyendo a la joven Sun Hee, que cayó en una profunda depresión y por obvias razones no pudo volver a ser bailarina. Esto la afecto mucho, esto la cambió completamente, ella ya no era la chica feliz que era antes, ahora era solo una chica amargada que odiaba a todos y se odiaba a sí misma.
Tiempo después, como si la vida la odiara, una accidente de auto hizo que perdiera a sus padres.
Y con obvias razones ella se odiaba más y odiaba más a las personas.
Afortunadamente ella no estaba sola, ella tenía al señor Choi, que era un trabajador de sus padres, pero también un gran amigo de la familia, el se había pasado cuidando a Sun Hee cuando era pequeña y no dudaría en seguirlo haciendo, más en esos momentos tan difíciles que estaba pasando.
Fin del flashback
— ¡ALEJENLOS DE MI ALEJENLOS!. — gritaba Sun Hee.
— Tranquila Hee. — Corrió el señor Choi a abrazarla después de haber escuchado sus gritos.
— Todo estará bien Hee, todo estará bien. — trato de consolarla. — Limpien eso ahora por favor. — Ven Hee, subamos a tu habitación para que descanses.
Holaaaa, espero que estén bien, esta es mi primer historia de este tipo que subo aquí, por eso espero que les guste mucho, primero que nada quiero decirles que esta historia está inspirada en el drama The ángel:last mission, bueno en realidad sólo serán dos capítulos inspirados en ese drama, así que si ya lo vieron pues pueden imaginarse un poquito lo que pasará en el siguiente capítulo y si no pues es sorpresa JAJAJAJA.
Bueno y a los que se preguntaran ¿ Y Jimin? Bueno, no tarda en salir, en el siguiente capítulo saldrá el.
Y bueno sin más, espero que sea de su agrado esto, cuidense mucho.
Y bueno, si nadie te lo ha dicho, lo hiciste muy bien hoy, gracias por tu esfuerzo en todo.
Ahora si, chao, nos leemos en otro capítulo.💗
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➳ Last Mission || PJM
FanfictionJimin estaba listo para ser rey de los silfides, solo faltaba cumplir una misión que el gran señor le había otorgado. El estaba seguro que cumpliría cualquier cosa que se le otorgara, pero nunca imagino que se cruzaría en el camino con aquella chica...