❥ Fatal Love. ¹°

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Minho.

El día de la reunión por fin llegó, Jisung dijo que se encargará de arreglar a Beomgyu, mi pequeño estará presente en una reunión familiar de la organización por primera vez, a decir verdad, la familia quería que lo presentará en una reunión hace dos años, pero me negué, Beomgyu aún es un pequeño inocente, risueño y juguetón, me aseguraré de que tenga una infancia tranquila, no como la mía o peor, la de Hyunjin.

Jisung comentó que a Beomgyu le gustan mucho los caballos, ayer que Hyunjin lo llevó a las caballerías del territorio Hwang regresó hablando maravillas de un caballo blanco, mi pequeño me dio la excusa perfecta para invitar a Jisung a una cita en el hipódromo, así Beomgyu se divierte viendo la carrera y yo puedo acercarme más a Jisung.

Jisung ha mantenido su distancia, ayer tuve que arreglar un par de pendientes en el casino, así que regresé tarde a casa, lo bueno de eso fue que Jisung se quedó una noche más, aún no hemos hablado sobre su regresó a su casa y pienso retrasar esa conversación un par de días más, solo hasta que tenga suficientes razones para hacer que se quede.

Apenas son las seis, el casino está bastante tranquilo, no hay muchos ricos jugadores perdiendo dinero, pero es sábado por lo que más tarde estará bastante lleno, no me preocupa dejaré uno de mis mejores hombres a cargo, Kim Sunwoo, es algo joven, pero experimentado, su familia no tiene renombre en nuestra alianza, pero son una familia fiel, confió en él tanto como en Mark.

—Señor Lee, el aviso de auditoria ha llegado esta mañana, —dice Yiren, mi secretaria, solo de escuchar sobre una auditoria a mi principal casino, mi pecho se oprimió, soy bastante cuidadoso con la contabilidad de mis locales, pero los casinos solo son la fachada de mi principal negocio, y el tráfico de armas va de la mano con la droga que Hyunjin mueve en el territorio y el idiota no es tan cuidadoso con sus clubes, solo suelta un par de sobornos y adiós a las auditorias.

—¿Para cuándo está marcada la auditoría? —pregunté con interés.

—Miércoles de la semana que viene, señor.

Asentí a su respuesta, hay tiempo suficiente, —gracias, ¿Algo más?

Ella miró su tableta electrónica y asintió, —El joven Han llamó para recordarle que debe estar presente en el territorio Hwang antes de las ocho, por lo que debe estar en casa a más tardar las siete y media, señor.

No evité sonreír, Yiren sonrió también, ella sabe bien cuánto me agrada que Jisung se llame al trabajo, esta es aproximadamente la tercera vez que lo hace y siempre para recordarme algo.

—Gracia Yiren, avisa a Mark que regresamos a la mansión en media hora, —dije para despedirla, ella asintió de nuevo y salió de la oficina.

Me serví un trago, una botella especial de mi vino favorito, el olor es lo mejor, puedo sentir la fuerza del alcohol reposado, exquisito su sabor. Me recargo contra el respaldo de mi silla y trato de relajarme, debo trabajar con Sunwoo para evitar el mínimo error, no quiero agentes del gobierno metiendo sus narices en mis casinos, el agente de la división antidrogas que quedó a cargo después de que Bang Christopher Chan se fuera con Felix, es bastante astuto, estoy seguro de que ya está enterado de la auditoría. Él no está precisamente interesado en mí, pero sabe que si acaba conmigo arrastra a Hyunjin.

Cuando mi padre murió prometí no meterme en nada relacionado a las drogas, mi padre era un hombre completo, fuerte, audaz y ambicioso, dedicado a la familia, justo como me enseñó, pero también era bastante torpe con las cosas más sencillas, el padre de Hyunjin y él manejaban armas y drogas juntos, mientras que el padre de Hyunjin era un bastardo asesino, mi padre amaba los narcóticos.