Capítulo 40

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Mentiría si dijera que no estoy ni un poco nervioso.

Todo esto es tan confuso, empezando por el hecho de que Jungkook se ofreciera a llevarme todos los días a la academia.

Hace muchos años que Jungkook no tenía ningún detalle hacia mí. Y tal vez estoy exagerando, pero ¿Por qué lo hace precisamente justo ahora? Es como si supiera que intento alejarme de él y viene a hacerme las cosas más difíciles a propósito.

Tampoco quiero dejar pasar la manera en cómo me habló minutos antes. Tan frio y directo, normalmente era yo quien me comportaba así en ocasiones. Él siempre tenía ese lado burlón en todas las situaciones, por muy seria que fuera.

Pero ahora no hubo nada de eso.

Y es tan extraño...

Es extraño y eso me aterra. Empezando, de que no se la razón por la cual quiere hablar conmigo, aunque ya me hago una idea de ello.

También porque no sé si él me seguirá tratando así, como si le importara más de lo que me demostraba antes. No sé qué pasara apenas el timbre suene anunciando que ya vino por mí.

Porque me encontraba en mi casa, sentado en uno de los muebles de la sala, con el bolso que llevo a las practicas entre mis piernas, mientras pienso en eso. En él.

El timbre suena y todo rastro de pensamientos desaparecen en un santiamén. Mis manos tiemblan y mi corazón no deja de latir apresuradamente.

Estoy pensando seriamente en tomar mi celular y mandarle un mensaje diciendo que no puedo ir porque enfermé.

Pero desecho la idea. Él ya está aquí y no quiero faltar a los ensayos.

El timbre vuelve a sonar, me levanto del sillón colgándome el bolso en el hombro mientras camino hacia la puerta principal.

Me detengo unos segundos antes de abrir, aferrando mi mano a la correa de la mochila.

Suspiro y abro la puerta.

-¿Por qué tardaste tanto? -Cuando abro, choco accidentalmente con el pecho de Jungkook haciéndome retroceder unos pasos.

Levanto lentamente la mirada y me topo con sus oscuros orbes. Me estaba mirando tan atentamente desde arriba que me es imposible articular alguna respuesta. Haciéndome sentir tan chiquito junto a él.

Sin responder me giro para cerrar la puerta, paso a un lado de él esquivando su cuerpo, sin mirarlo.

-Jimin.

Ignoro su llamado y sigo caminando.

Escucho sus pasos detrás de mí, pero sigo sin detenerme.

-Tenemos que hablar.

Me paro al instante en el que siento la mano de Jungkook tomar mi brazo girándome, para quedar frente a él.

-Por favor. -Rogó

Suspiro aceptando. Total, ya estamos aquí. Uno frente al otro.

-Bien. -Aclaro mi garganta. -¿De qué quieres hablar? -Pregunto soltándome de su agarre.

-Estás evitándome.

-¿Pero qué pregunta es esa?

-No era pregunta.

Unos segundos de extraño silencio incomodo se instaló entre los dos.

-No te evito, Jungkook.

-Lo haces. Jodidamente sabes que lo haces.

Sabía que estaba acabando con su paciencia. Y es por eso que dejo de hacerme el desentendido.

-Y si así fuera. ¿Qué? ¿A ti en que te afecta? -Me acerco hasta quedar a solo centímetros de él, cruzándome de brazos.

-Me evades en la escuela. -Empieza a enumerar mientras acerca su rostro al mío, pero yo sigo sin moverme. Decido no retroceder porque sería una desventaja para mí, quiere intimidarme. Lo sé.

-Cuando intento acercarme a ti, huyes con una estúpida excusa. Rechazaste todas las invitaciones que te hice. Los mensajes ni siquiera los ves, las llamadas no las contestas. ¿Por qué?

Termina de hablar y aleja su rostro del mío. Pero nuestros cuerpos siguen cerca, rosándose levemente.

-¿Hice algo mal? Dime y lo remediare.

Sonrío sarcásticamente y entonces retrocedo, pero solo porque estar cerca de él me sofoca hasta el punto de no saber que responder.

-Te evado en la escuela. Si.

-¿Por qué? -Me interrumpe

No quiero decirle la razón, así que solo le confirmo sin decir el porqué.

Ignorando su pregunta. Respondo; -Si rechazo tus invitaciones es porque ya tengo planes o simplemente porque no quiero salir.

-¿Por qué? ¿Con quienes sales? -Vuelve a preguntar acercándose a mí y yo retrocedo. Se nota la desesperación por una respuesta en su voz.

-No es de tu incumbencia, Jungkook. -Recalco con seguridad.

-Además, siempre era yo quien te buscaba para hacer planes y tú me dejabas plantado o siempre llevabas a alguien a nuestras salidas. Y no es para nada agradable ser el que sobra cuando eres quien invita ¿Sabes?

Jungkook parece pensar por unos segundos lo que acabo de decir, se mantiene callado mirándome desconcertado. Como si lo que le dije fuera una broma.

-¿Entonces es por eso?

Me pregunta sorprendido, como si hubiera conectado puntos y ahora sepa el porqué de todo. Sigo sin responder y el vuelve hablar.

-¿Esto es una clase de venganza?

Su pregunta me ofende. Me ofende el hecho de que piense que soy alguien tan infantil como para hacer algo así.

-¿Te estas escuchando si quiera Jungkook? -Respondo a la defensiva. Sabe que me estoy enojando, porque su rostro se relaja e intenta tomarme de los hombros y yo me dejo hacer.

-Está bien, olvidemos esto. -Aprieta sus manos en mis hombros levemente.

-Pero no me ignores, Jimin. Habla conmigo, no te permito que te alejes y me evites como si fuéramos extraños.

Estoy empezando a dudar. Su mirada dolida y su pequeño temblor me hace dudar de mi respuesta...

-No tengo porque obedecerte. -Respondo con un poco de trabajo, pero me sorprende el hecho de que no estoy cediendo ante él tan fácilmente.

- ¿Me vas a decir por qué te alejas de mí?

-No.

-Entonces ya no lo harás más, no me evitarás. A menos que me digas la razón, dejaré de insistir.

-Pero...

-Dije que ya no me evitarás, Jimin.

Su mirada sigue puesta en mí tan profundamente, como si tratara de convencerme a través de ella. Sé que si me niego seguirá insistiendo y yo no quiero eso, y me jode porque él lo sabe muy bien.

-Está bien.

Respondo y él sonríe ampliamente, sabe que ganó en la discusión. Pero no ganó conmigo. Aún no.

Casi aliviado, suelta mis hombros y remplaza su agarre por un abrazo que dudo en corresponder.

-¿Me estas oliendo el cabello? -Pregunto divertido cuando lo siento suspirar repetidamente sobre mi cabeza.

-El rosa te queda bien. -Susurra en mi oído.

Intento apartarme para mirarlo, pero no me deja y afianza su agarre en mi cuerpo.

-Jungkook se me hará tarde para ir a mis clases.

-Ah, sí. Lo siento. -Me da un apretón más y se separa de mí sonriendo.

-Vámonos. -Me quita la mochila y se la cuelga en el hombro, caminando hacia el auto.

Aún parado en mi lugar sonrió negando con la cabeza y después lo sigo.



































Electric Boy -au km 益Donde viven las historias. Descúbrelo ahora