10 | ' hasta luego, amigos '

144 32 18
                                    

— Se fue...

— Así es. —sonreí y me miraste cómo si estuviera haciendo algo malo— ¿Qué?

— ¿Por qué no me lo dijiste?

— ¿Y que me tires uno de los jarrones de mi casa en mi cara? No, KeonHee. Al menos quiero mantener mi cara, ya que no pude mantener mi cabello.

Traté de bromear, mas sólo te enojaste más y me golpeaste el hombro. Tus ojos nuevamente se aguaron y diste signos de querer llorar. Paré tus movimientos y te acerqué a mi pecho, acaricié tu cabello y cerré mis ojos con fuerza; no quería olvidarme del dulce aroma que brotaba en ti.

— GeonHak... —tu voz salía entrecortada— Me duele, ¿sabes? Me duele saber q-que... Te voy a perder. Imaginarlo... —negaste y me miraste— No puedo hacerlo. Te amo, tienes que saberlo. Te amo con todo mi corazón, aunque ya hemos terminado, aunque ya no te tendré más a mi lado... Te amo.

— KeonHee... No hay que hacerlo más difícil.

— ¡Sí hay que hacerlo difícil, idiota!

No sabía si botar la bomba que haría que tu cerebro vuelva a ti y te haga pensar de una buena vez. Claro que me dolía perderte, mi pequeño sol, pero sé que serás feliz con SeoHo, lo sé. Eres tan transparente, amor, que con sólo una mirada, sé lo que piensas de él. Además...

— Recuerda la razón por la que hemos comenzado a salir, KeonHee.

Cómo si mis palabras fueran una dagas filosas, éstas se clavaron en ti, inmovilizando tu cuerpo y haciendo que me mires con la misma sorpresa que cuándo te dije que comenzaba a sentir cosas por ti.

Nuestros comienzos cómo pareja no fueron nada común. Nosotros éramos amigos, mejores amigos, con la diferencia de que tú estabas enamorado de SeoHo y yo de ti. Me rompiste el corazón cuándo, sin ninguna pizca de vergüenza, me gritaste a la cara que te morías por SeoHo; que era el chico de tus sueños y suspiros, que era quién se había ganado tu corazón por completo. En esa noche de verano hiciste mi corazón añicos, pero no podía reclamarte nada... Tú no sabías lo que yo sentia por ti.

Acepté ayudarte. La vieja confiable siempre son los celos.

Ahí fue dónde comenzamos nuestra juvenil historia de amor. Mientras que tú hacías todo lo posible para que nuestro amigo te notara, yo me aprovechaba de todo lo que dabas por él. Nuestros roces de mano se volvieron algo común para nosotros con el tiempo; aquellos besos que decidimos hacerlo sólo frente a SeoHo, te los robaba a cada momento; nuestros toques indecentes subían cada vez más de grado; los apodos tiernos que sólo lo decíamos para que nuestra relación se vea más convincente, se volvieron más continuas, sin la necesidad de un público; y nuestros "te amo" se volvieron nuestro lema oficial.

Así es cómo en verdad comenzamos a salir. Nos acostumbramos a la compañía del otro, nos acostumbramos a los besos del otro, a los toques, a todo. Aún así, tú seguías teniendo en la mente el nombre de Lee SeoHo, no hay problema, después de todo... Yo sabía que era el que sobraba.

— Lo siento... —fue lo único que pudiste formular sin que tu voz se apague.

— No hay porqué disculparse, son cosas de la vida...

— Te amo. Sí lo llegué a sentir.

— Yo también, Keon. Yo también sentí amor por ti, pero...

— ¿Pero? —tu cara de conejito perdido era una de mis grandes debilidades.

— Pero yo no soy Lee SeoHo, ¿o sí?

Negaste y suspiraste. Me gusta verte confundido, algo raro si lo piensa alguien normal, pero así era. Tomaste mi mano y la entrelazaste con la tuya. Nos miramos un buen tiempo y llevaste las yemas de tus dedos hacia mi mejilla, quitando el rastro de lágrimas que había formado inconscientemente. Traté de retenerlo, pero no pude.

— No. Sé que no eres Lee SeoHo... —tu nariz se volvió roja, tus ojos nuevamente se cristalizaron, y tu labio inferior temblaba— Tú eres Kim GeonHak, el chico del quién me enamoré casualmente. El chico que me ayudó a celar a un simpático idiota, el chico que amo con todo mi corazón, el chico que me ocultó algo importante por tener una estúpida idea en su cabeza. Sí. No cabe duda. Tú eres Kim GeonHak.

Nos abrazamos. Susurraste cosas dulces en mi oído mientras yo lloraba. Tú me pedías perdón. No hay nada que perdonar, no puedo odiarte porque me has hecho el chico más feliz de todo el maldito mundo.

— ¿Sabes?... —las caricias en mi mejilla no cesaron— Sólo tengo dos semanas.

— No me lo recuerdes... Aún duele.

— SeoHo no lo sabe.

— ¿Ahora a él le vas a ocultar las cosas?

— Al parecer, sí. —reí.

Nos quedamos mirando a los ojos del otro, pensando en qué debíamos decir. Tu abriste la boca para decir algo, pero la cerraste cuándo lance una de mis últimas preguntas.

— ¿Te sigue gustando? —tus ojos se abrieron cómo platos— Debes ser sincero...

— Y-Yo... N-...

— La verdad, KeonHee. —bajaste la mirada y asentiste— Bueno...

— Los sentimientos volvieron cuándo comenzó a salir conmigo... Necesitaba un apoyo y tú no estabas, no sabía el porqué SeoHo se apegaba tanto a mí y me molestaba a veces... —suspiraste— Sin embargo... A los dos meses ya me hallaba nuevamente enamorado de él.

— Eso es cool.

— No, no lo es. Todavía no terminábamos.

— O sea... ¿Me quisiste engañar con nuestro mejor amigo? —sonreí— Consígueme a una buena competencia, Keon.

Comencé a toser, tan fuerte que te asustaste. Ya no estoy hecho para la bromas.

— Mejor descansa, Hak-ki...

Asentí.

La puerta fue abierta de golpe. Eras tú, SeoHo. KeonHee se acercó a ti, te tomó del brazo, y te acercó a mí. Te colocaste a mi lado y sólo hablé.

— SeoHo-hyung, ámalo. Ámalo; no cómo yo lo amo, ámalo cómo tú solamente puedes amarlo.

Me quisiste contradecir, yo lancé una pequeña broma. Te pedí que seas feliz. Eso es lo que más quiero en la poca vida me queda.

Luego de un buen rato, se fueron. Ambos me dieron un beso en la frente y se iban alejando de mi cuarto. Cuándo la puerta fue cerrada, la soledad y el miedo nuevamente se apoderaron de mí.

Luego de media hora, tuve complicaciones para respirar, tuve problemas para moverme. Sentí que era mi fin. No sé si es suerte, pero una enfermera que pasaba por ahí les avisó a los demás. Ya no podían hacer nada conmigo, me restaron los días.

Sólo pensé en ustedes.

Sean felices, amigos míos.

Yo acabo de terminar mi trabajo.

Los ama, Kim GeonHak. El ser más hermoso que ha podido pisar la Tierra.

Hasta luego, amigos.

—————————————

→ Estás leyendo los capítulos finales de "hyung... un favor".

→ Now Playing:    𝗹𝗶𝘀𝘁𝗲𝗻 𝗯𝗲𝗳𝗼𝗿𝗲 𝗶 𝗴𝗼 ,  by Billie Eilish 彡

→ ¡Hola, personitas! Espero que hayan disfrutado el capítulo de hoy. ♡︎ Otro desde el punto de vista de GeonHak y el que hizo añicos mi corazón cuándo lo leí en la historia original. (◞‸◟)

→ Sólo falta el capítulo final, y tengo una pregunta para ustedes... ¿Les gustaría que lo publique este sábado o el martes? '・ᴗ・'

→ ¡Cuídense mucho! Lxs quiero. ฅ^•ﻌ•^ฅ

hyung... un favor. ㅡ seohee Donde viven las historias. Descúbrelo ahora