αѕí тє ρє∂í ‧₊˚✧

Todo tiene un tiempo

Miraba las fotos del álbum de recuerdo.

Me llenaba de felicidad que todavía seguía siendo amiga de Audrey.

Era como mi alma gemela, pero en versión amiga.

-Hola, te traje un café-se oyó una voz a lo lejos que a la vez se oía más cercana.

Era Audrey, quien me dirigió un vaso de cartón con café y un panecillo.

-Gracias-agradecí mientras me dirigía el frasco hacia mi boca.

-Le agregué un shot de canela, como te gusta.

-¿Me gusta el café?-pregunte ladeando mi cabeza.

-Si...una de las cosas que te empezaron a gustar, claro, desde el ultimo año de preparatoria y ahora en la universidad.

-Creo que ese ensayo fue más que perfecto ¿huh?-dije mientras tomaba un sorbo de café.

-La verdad, diste uno de los mejores ensayos, sorprendiste a la directora-menciono tal como una madre orgullosa.

-Nunca creí que algo le pudiera impresionar a esa señora cascarrabias.

-Yo tampoco, pero supongo que siempre has tenido un encanto en cuanto la literatura.

En ese punto ella tenía razón, yo tenía una calificación sobresaliente en la asignación de literatura, y siempre que se tratara de escribir algún tipo de ensayo o escrito, siempre los profesores se sorprendían (por que nunca esperaban nada de mi)

-¿Cómo esta Marcus, tu madre y tu padre?-pregunte con interés.

-Ah...¿qué te puedo decir?-se recargo en el respaldo de la silla.

Sabía que había algo malo desde que oí el tono de su voz cambiar.

-Mamá y papá se divorciaron-escupió de golpe.

-¿Qué?-mencione con algo de sorpresa, y de la impresión me ahogue con el café.

-Si...la verdad que ya lo veía venir-movió la cara con gesto de tranquilidad.-Marcus entro a una universidad en Canadá con ayuda de una beca deportiva, el cual casi no habla y manda un mensaje 2 veces al mes para preguntar como estoy yo, mamá y Chris, a veces nos visita una vez en las vacaciones.

-Vaya.

-Mhm, papá y yo nos vemos cada mes, pero nunca pregunta por Chris-dijo con una cara que reflejaba tristeza.-Al igual que mamá, piensan que Chris fue un error ocasionado por el divorcio y constantemente se culpan mutuamente eso, ellos dicen que si ellos no se hubieran separado, probablemente ahora estuviera en la universidad.

No sabía que decir, lo único que pude hacer en ese momento fue abrazarla.

El abrazo fue corto, pero sentí algún alivio de parte de ella.

-No quiero ser entrometida ¿pero el padre del bebé se hace cargo de el?

-Claro que si, la verdad, desde que el se entero que sería padre y que me iba a quedar con el, el asumió su necesidad como padre y lo ha cuidado como no tienes una idea-sonrió como si todas esas cosas que me había dicho antes ni siquiera las hubiera mencionado.

Siempre fue así, una chica muy drástica. Solía sacarle provecho a la situación y veía lo bueno de ella, al contrario de mi, una supe pesimista.

-Mamá esta bien, trata de ser feliz, y la verdad que lo ha conseguido, abrió un negocio de flores, dijo que es una de las mejores sensaciones que ha sentido desde que tuvo a mi y a mis hermanos, aunque en secreto, Marcus y yo sabemos que ama más a esa maldita florería que a nosotros-rodo los ojos divertida.