Capitulo tres

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Allí estaba el sentado a lado de mi y mis amigas claramente me molestaban con la mirada, como siempre lo hacían.

-Un gusto en conocerlas, quisiera estar mas tiempo platicando con ustedes, pero lamentablemente me tengo que ir- el se despidió con una sonrisa, se dio vuelta y caminó hasta llegar a su lugar. Yo estaba completamente incomoda y creo saber por que...

El me hacia sentir incomoda porque la única y simple razón de que sentía una extraña conexión con el de la cual no me fiaba. No las pasamos platicando y escuchando música como siempre solo que tenía una pequeña sensación de voltear cada minuto no ser por que pero yo trataba de no hacerlo, cosa que no pude y lo miraba discretamente.

Las horas pasaron rápidas que ni las sentí ya me dirigía a la salida de el colegio con Alice y Lu, ellas iban platicando y yo en mis pensamientos con mi teléfono en el bolso de mi suéter. Enseguida mi teléfono empezó a sonar y claramente conteste.

- Elizabeth hoy los papás de Juan Carlos no los podrán ir a recoger- dios solo eso me faltaba- Se tendrán que venir en taxi- continuó ella, diciéndome que con lo que me sobro de dinero pagaría yo el taxi.

- Ok mamá nos vemos- colgué y por suerte allí venia Juan Carlos, le tendré que explicar que nos iremos en taxi.

- Elizabeth hey, me han hablado por teléfono y esta dicho que nos iremos en taxi- que bien que le dijeron antes que yo ya que no me gustaba explicar nada. Le hice una seña de que allí venia un taxi el lo paro y abrió la puerta para que yo entrara al taxi, se porto caballeroso eso me dejo confundida por que el nunca lo hace en público por su estupida reputación.

Llegamos hasta mi casa, él decidió quedarse asta tarde, nos bajamos del taxi yo estaba buscando mi dinero en la mochila- No te preocupes lo pago yo- dijo él pagándole al taxista.

-Gracias-le dije dandole un gran abrazo. Entramos a la casa por alguna razón olía rico, - Que bueno que ya llegaron, ya esta lista la comida- dijo mi madre saliendo de la cocina, llevando dos platos en las manos, Juan Carlos se acercó a ella-Que rico huele señora Jessica -comentó el agarrando uno de los platos que llevaba mi madre. Comí rápido para ir a mi habitación cuando llegue a ella tire mi mochila en la cama y fui directo a mi ropero para sacar un atuendo para ponerme después de bañarme, agarre un pantalón oscuro, una blusa azul de converse, me metí al baño me di una ducha rápida...

Salí de bañarme y me puse dicha ropa escogida hace rato, me desenrede el cabello y me puse mis tenis converse me senté en mi cama y agarre mi teléfono
-Toc Toc ¿se puede?- preguntó Juan Carlos, haciendo que yo volteara a verlo y dejara de escribir un texto.

- Claro pasa y siéntate- el hizo caso a mi comentario y se sentó alado de mi mirando me a la cara- ¿!Que pasa!?- pregunte yo un poco confusa ya que el nunca hacia eso.

-Nada solo que...no se que hacer hay una chica en el colegio que tal vez me gusta se llama Dayana- wow me quede en shock por un momento hasta que me vio con una cara extraña, tal vez por mi reacción, la verdad estaba muy desconcertada al escuchar que le gusta una chica menor que el- Ok y ¿cual es el problema? - dije después de estar en shock. El me contó todo lo que había pasado y la tarde se fue muy rápida, ya eran las once y media de la noche y yo pensando en el momento incómodo que me paso el día de hoy, me quede dormida y ni yo misma me di cuenta en que momento.

Me desperté temprano ya que me di cuenta que eran las seis en punto de la mañana así que me aliste con tranquilidad, termine de alistarme y me recosté
en mi cama esperando que las horas pasen, mi teléfono sonó tenía una notificación de una compañera..me entretuve en el teléfono y me di cuenta que ya eran las seis treinta y cinco, fue cuando baje a ver si ya venia Juan a buscarme, baje las escaleras y llegue a la sala ya que nuestra casa era pequeña, la puerta estaba abierta en eso me di cuenta que Mi madre estaba hablando con la mamá de Juan Carlos, a el lo vi en el carro con gafas, parecía enojado, camine hacia el carro- Hola señora Martínez - salude amablemente a la mamá de Juan Carlos.

Subí al carro- Hola Juan, buenos días- igual lo salude a el, pero no me contesto y yo creo que será mejor no tocar el tema de lo que estaba pasando. Hoy el camino hacia la escuela fue muy callado e incomodo.
Llegamos a la escuela vi a Alice y me acerque a ella -Hola Elizabeth- me saludo con una enorme sonrisa.- Hola Alice, ¿por qué la enorme sonrisa?- le pregunte siendo honesta.

-La sonrisa se debe a que Ethan no te deja de ver- le sonreí pensando que era una broma, voltee sobre mi hombro discretamente para verificar si era cierto, así es era verdad, al parecer el se dio cuenta que voltee y se rió en voz baja, guiño su ojo izquierdo haciendo que me ruborizara.

La vida de una adolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora