Prólogo:

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Padawan:

Anakin estaba teniendo un día horrible.

Se encontraba en el planeta Christophsis junto a su antiguo maestro Obi-Wan Kenobi intentando acabar con la ocupación separatista.

Después de un éxito inicial las hordas de droides se habían reagrupado, y habían lanzado un contraataque devastador que casi no habían podido rechazar.

Pero volverían.

Sin embargo no era la pésima situación estratégica lo que le causaba quebraderos de cabeza al joven caballero Jedi.

Era su recién asignada (sin su conocimiento) padawan, Ahsoka Tano, una joven togruta (dos años más joven que la edad habitual de los padawan) descarada, impulsiva y temeraria.

Demasiado parecida a él mismo.

La chica acababa de llegar al planeta para sumarse al esfuerzo bélico, y a pesar de que había tenido una buena idea para conseguir comunicarse con el consejo, había mostrado una chulería muy impropia de una aspirante a Caballero Jedi.

Sí, se parecía demasiado a su maestro.

Perdido en sus pensamientos, el caballero Jedi se sorprendió al ver como descendía otra fragata de la República galáctica al planeta.

"¿Más suministros?" Le preguntó Skywalker a Kenobi.

"No, los últimos ya han sido descargados." Dijo con extrañeza el maestro Jedi.

Ambos Jedi y la padawan se acercaron con curiosidad hacia la nave para ver descender de ella aún solo hombre.

El hombre en cuestión media en torno al 1'80 y vestia una armadura mandaloriana completa de color negro con detalles dorados.

Una capa negra completaba su atuendo.

"¿Un mandaloriano?" Pensó con extrañeza Obi-Wan, extrañeza que a juzgar por la cara de su antiguo aprendiz ambos compartían.

Pero Ahsoka Tano solo tenía una mueca desagrado.

"Él..." Dijo con desagrado.

Sin embargo y antes de que ambos caballeros pudieran preguntarle qué sucedía, el hombre estaba frente a ellos.

Más de cerca, pudieron ver que la armadura negra era de beskar genuino, los detalles dorados consistían y unas finas líneas que bordeaban las placas protectoras de pecho vientre y hombros.

Los protectores de brazos eran enteramente negros y tenían una especie de cuchillas en forma de gancho en la parte superior.
(Los protectores de antebrazo de Batman)

Nada más llegar frente a ellos, el hombre se quitó el casco, dejando ver a un joven de unos 15 años con el pelo y los ojos de color negro azabache.

"Maestro Kenobi, Caballero Skywalker, Padawan Tano, mi nombre es Tarre Vizsla, aprendiz de el Maestro Windu." Se presentó.

Ambos caballeros abrieron los ojos consorpresa por un instante, pero se recompusieron.

Sabían quién era.

Tarre Vizsla, hijo menor de Tarik Vizsla y Elvie Eren.

Fue nombrado cómo el legendario caballero Jedi mandaloriano Tarre Vizsla, cuyo poder era tal que llego a unificar todas las casas de Mandalore bajo su control.

Su padre se había opuesto a los intentos de su madre de restaurar el militarismo mandaloriano, alineándose con la Duquesa Satine Kryze, pero él quedó bajo custodia de su madre.

Desde que tuvo edad para ponerse en pie fue adiestrado en todos los tipos de combate mandaloriano, con el objetivo de convertirle en el futuro gran líder de su pueblo.

Hijo de Mandalore; Caballero JediDonde viven las historias. Descúbrelo ahora