"Destino" suena cliche decir eso hasta que nos damos cuenta de que realmente existe y cuando menos te lo esperas tu media mitad de naranja se sienta a tu lado, haciendo la mejor sonrisa y trayendo una sensación que creías saber pero a la misma vez t...
-Durante la pelea, mientras le estabas partiendo la cara le dijiste que yo era tu mujer.
-Durante todo lo que dije en la pelea fue eso lo que mas te llamo la atención?
-Uhum- afirmo con la cabeza.
-Pues para que te quede claro tu eres mi mujer-cuando escuche esas palabras mi corazón se derritió mas de amor hacia ella-pero aparte de eso tu eres mi vida, tu y yo somos una.
-Y cuando pienso que no puedo amarte mas siempre me sorprendes- tome su rostro y bese sus labios, luego me aparte con una sonrisa.
-Ay amor...-jadeo con la boca en la mano y veo que hace un gesto como de dolor.
-Perdoname mi amor- me aparte un poco de ella- disculpame.
-Te perdono si le das un besito para curarlo- me responde con un gesto de lo mas gracioso.
-Cuantos besitos quieres que te de?- empece a cubrir todo su rostro de besos.
Nos quedamos en la sala hablando y riendo, Maca me contaba como le fue el viaje y no se en que momento al final nos quedamos dormidas abrazadas en el sofá.
Al amanecer desperté sobre las 11:17 de la mañana. Maca dormía profundamente apoyada en mi pecho, tenía una expresión de calma y completa serenidad, es tan hermoso verla así, ella odia la violencia y me imagino cuanto debe de estar arrepentida por lo que sucedió aunque haya sido para defenderme.Aproveche que ella estaba dormida y volví a dormirme de nuevo.
Me desperté sobresaltada por el timbre del intercomunicador, Maca ya no estaba dormida en mis brazos, agarre el celular de la mesita de centro y vi que el reloj marcaba la 13:30, fue entonces cuando escuche como atendía al intercomunicador.
-Si puede dejarlo subir-Maca le decía al portero.Colgó el intercomunicador y fue hacia la cocina para coger su cartera.Ella vestía unos pantalones cortos, una blusa de manga larga blanca con un top del mismo color que se transparentaba por debajo de la blusa.
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No paso mucho tiempo y el timbre de la puerta sonó, atendió a quien subió y cerro la puerta mientras yo estaba sentada observando todo.
-Quien era?-pregunte con la voz un poco mas ronca de lo normal.
-Amor!- para mi su voz me sonaba como un canto angelical- perdona te he despertado?- se arrodillo en frente de mi.
-No tranquila, ademas que ya es tarde- le digo acariciando el lindo rostro de mi novia- quien era?- le pregunto de nuevo.
-Nuestro almuerzo- ella sonríe-tienes hambre?
-Mucha- le digo riendo- y dolor de cabeza también- lleve una de mis manos hacia mi frente.
