28: Un Buen Medico

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"¡Bien!, por fin se que lo provoca" El medico había localizado la fuente de los gritos del paciente y estaba satisfecho por ello, parecía ser una herida profunda en su cara. Tenia un trozo de carne dentro, no sabia como había llegado hasta allí, tenia que cerrarlo de inmediato, porque parecía estar sufriendo. Primero lo desinfecto, era complicado el paciente no dejaba de moverse y seguía gritando cada vez con mas dificultad, pero finalmente pudo desinfectar toda la zona y coser la herida. Los gritos de dolor del paciente pasaron hacer quejidos silenciosos. Estaba muy contento por ello, sin embargo el paciente parecía muy asustado, se movía descontroladamente, quizá necesitaba caminar después de una sesión tan larga así que le dejo levantarse. Se chocaba torpemente con todas las cosas de la habitación, inatento salir, pero no podía ver la salida, intento pedir ayuda, pero no podía abrir la boca... se la acaba de coser.

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