Capitulo 12

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Al sentir aquella mano ahora acariciando su intimidad y apretando sus senos.

—Sasuke-kun—susurro entre suave jadeos.

—Shh...—el hombre giro a la joven mientras besaba sus labios con intensidad.—Tanto me deseabas —mordio su labio— aquí me tienes.

Sasuke besaba a la pequeña joven mientras la cargaba y aquella rodeaba las caderas el imponente hombre de ojos negros. Podía sentir aquel miembro muy cerca de su entrada vaginal.

El hombre no dejaba de morder y acariciar el cuerpo de la chica.

—te deseo dentro Sasuke Kun—con voz agitada Hinata abrazaba a Sasuke con su mano en el cuello.

—¡Hinata he vuelto! — hablo la mujer detrás de la puerta mientras la ojiperla volvía de sus pensamientos.
Había soñado despierta con el ojinegro

—Si Sakura, salgo en un minuto—contesto.

Hinata miro a su alrededor encontrándose completamente sola. Todo había sido producto de su imaginación

Al salir solo con la bata que le había entregado la oji-jade la noche anterior salió de la habitación del matrimonio para encaminarse rápidamente hasta su habitación.
Al llegar a su habitación empezó a colocar su ropa interior color lila un bra con encaje y un cachetero a juego del bra. Por qué si ahora empezaría su misión, necesitaba al Uchiha dentro de ella llenando todo su ser.
Termino de vestirse normal solo unos jeans sueltos y una blusa de tirantes color azul cielo

Al terminar de alistarse bajo a la sala principal del lugar donde estaba ya el hombre de ojos oscuros

—Buen día Sasuke-kun—sonrio tímidamente mientras el hombre la miraba con seriedad

—Buenos días Hinata —respondio con un tono aún más frío que de costumbre—¿Cómo pasaste tu noche?—sonrio de lado mirando fijamente.

«Sasuke Kun se entero» llevo ambas manos a la altura de su pecho intentando relajarse así misma

—B-bien Sasuke...—

—¿Cómo está tu novio el vago?

—¿¡He!?—exclamo alarmada mirando al hombre

—Estuve a punto de mandar a un policía para que lo arrestaran por estar molestando a tales horas de la madrugada.

—Y-yo lo-lo siento señor Uchiha—bajo la mirada mientras jugaba con sus dedos incómoda.

—Espero no vuelva a pasar. Si no ahora tomare la decisión de que lo arresten. Te hace falta un castigó.—acaso lo último había sido con voz coqueta o era su imaginación.

—¿C-castigo?

—Aja...—el hombre se acercó a la pequeña joven mientras le tomaba fuerte de la cintura. —siempre estás jugando con fuego Hinata...—Sasuke mordió ligeramente el oído de la ojiperla — déjame decirte que si juegas con fuego terminarás quemando te.. ¿Tanto me deseas Hime?— aquella voz ronca mezclada con deseo empezaba a volverle loca, aquel olor  a la loción del pelinegro le llenaba sus fosas nasales.

—¿Y si así fuera?¿ Acaso usted no me desea?— no supo de dónde había agarrado el valor la peliazulada para contestarle de aquella manera, sabía que Sasuke estaba pensando incomodarle pero no sería así. —Yo también se jugar señor Uchiha. —sin dejar hablar al pelinegro lo tomo de su cuello para besar los labios mientras el comenzaba a besar los de ella, aquella pedía entrada a su lengua mientras Sasuke la dejaba, el beso empezaba a subir de nivel mientras Sasuke tomaba a la chica de su cintura para colocarla en la pared. Ella rodeaba la cintura del pelinegro con sus piernas.

Las manos del  ojinegro se perdían bajo la blusa de aquella peliazulada. Cuando escucharon un sonido de unos finos tacones acercándose. Ambos se separaron con rudeza mientras Hinata se sentaba en el sofá con su celular en manos y Sasuke del otro lado con su portátil en las piernas.

—¡volví!he traído la comida conmigo —also ambas manos con dos bolsas de comida.

—Es muy amable señora Uchiha

—Nada de eso Hinata, ven vamos a poner la mesa. ¿Comerás también cariño?—miro al ojinegro y aquel levantó la vista.

—Si cambié de opinión, me tomaré el día hoy para pasarlo con ustedes. Al final tenemos invitada y hay que atenderla como debe de ser —sonrio con una mueca llena de sarcasmos mirando a la pequeña joven.

Hinata al sentir la penetrante mirada oscura en ella parpadeo un par de veces. Ahora sería aún más incómodo. ¿Que acababa de pasar? ¿Tanta emoción y adrenalina le excitaban?

La Hyūga camino con la pelirosa a su lado mientras charlaban de temas triviales, dejando completamente solo al hombre.

El tiro su cabeza atrás mientras se tocaba el puente de su nariz para luego sacar los lentes y botarlos a su lado.

Aquella joven le perturbaba, le embriagaba, lo cegaba. Quería a la Hyūga con él pero de todas formas y poses. —sonrio con malicia y volvió a mirar su celular.

Busco entre sus contactos el número de Hinata para dejar un mensaje.

espero que no pienses en volver a salir por las noches con aquel tipo, deja tu puerta abierta, iré a desearte buenas noches.

Al enviar el mensaje una amplia sonrisa se asomo en sus labios dejando aún lado su celular.
Ella pensaba que podía jugar con él a su antojo pero lo que no sabía que él tenía bastante experiencia en el tema.

. .

Hinata al escuchar el sonido de una notificación nueva , tomo su celular entre sus manos. Al leer aquel mensaje sus manos se congelaron mientras leía y reeleía el mensaje que estaba justo ahí frente a ella detrás de la pantalla.

¿Realmente el Uchiha jugaría con ella? Conocía ese juego y ella no se mostraría débil, alcontrario jugaría sus mejores cartas. Sonrió y comenzó a teclear.

—Lo estaré esperando con gusto señor Uchiha pero primero duerma a su linda esposa. Besos.

    Por qué ella era Hinata Hyūga, con ella nadie podía jugar, ella ponía las reglas, ella sabía lo que quería y lo que hacía.
Al enviar el mensaje guardo su celular en su bolsillo de sus pantalones para volver acomodar los cubiertos sobre la mesa.
En su mente no dejaba de rondar aquél beso, las caricias que no habían sido esta vez producto de su imaginación. Había sido real y aquel mensaje lo comprobaba.

Aún que no creía capas que aquel respetado hombre terminará enredado en las sábanas de una joven de apenas 18 años ...¿O si?

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