Segunda Temporada de "Hijo de la Luna"
Después de la muerte de ______ Basteri las cosas cambiaron demasiado.
Tal vez el destino le tenia preparada una sorpresa a Aidan, una sorpresa que nadie esperaba.
¿Sera posible que ahora Aidan tenga su final fe...
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Aidan me miraba con furia y con asombro, y yo solo lo miraba con miedo y confusión, todo lo que me dijo parecía imposible, algo que jamás creí que fuera a suceder
-Yo...- comencé a decir- No sé- finalice.
Aidan apretó las manos y se acerco a mi, invadiendo mi espacio persona, poniéndome de nervios.
-Tiene que existir una explicación- comento con voz ronca mientras examinaba cada centímetro de mi rostro, Aidan tomo un mechón de mi cabello y lo detrás de mi oreja con delicadeza. Esa pequeña acción hizo que se me erizara la piel. Aidan esbozo una sonrisa- Lamento haber sembrado tantas dudas en ti- comento serio mientras daba unos pasos lejos de mi.
Se comenzaron a escuchar pasos afuera de mi habitación, lo que hizo que mis nervios aumentaran mas.
-Debes irte- susurré, sus ojos verdes brillaron en la oscuridad y pude ver como curvaba la comisura de sus labios.
-Hasta pronto ______... Canela- Aidan había pronunciado mi apellido con mucha dificultad y cuando termino de hablar desapareció junto enfrente de mi.
Apreté los parpados y solté un suspiro liberando la tensión que ese chico había dejado en mi. Tenía tantas cosas que preguntarle a papá.
Una semana después.
Las vacaciones de fin de curso habían llegado, caminaba a la puerta de la Universidad sola, como siempre, mi amiga Lucy seguro había ido con uno de sus tantos novios que no me sorprendía el hecho de que me haya dejado sola.
Cuando salí de la Universidad me uní a la sociedad, la gente caminaba sumamente rápido y el trafico era insoportable.
Aun le seguía dando vueltas al asunto de Aidan, mi papá y Basteri. Se lo había contado a Carlos, mi primo estaba al tanto de todo, sabia todo lo que me había pasado la semana pasado, así como también sabia de la visita de Aidan a mi habitación el me dijo que hablaría con mi tía Fernanda tal vez ella supiera algo que nosotros desconocíamos.
Hoy por la noche quedamos de ir al cine, bueno básicamente mi primo me estuvo rogando ya que según él había estado muy estresada y distraída estos últimos días, por lo tanto "necesitaba desestresarme" la película que había escogido para ver era una de terror llamada "Eso"
La tarde era soleada, y había una leve brisa, un clima perfecto, las calles de Tlaxcala estaban repletas de gentes y yo solo trataba de esquivarlas con mi mochila al hombro y mi mirada en el suelo.
Iba tan metida en mis pensamientos que no me di cuenta de que había alguien frente a mi y creo que esa persona también iba distraída por que chocamos mi mochila callo de mi hombro iba a recogerla pero la persona con lo que había chocado fue mas rápida que yo.
-¡Lo siento mucho¡- dijo aquel chico mientras me daba mi mochila.
-No importa- lo mire al rostro y el pareció impresionado del mío.
-¿Como te llamas?- cuestiono frunciendo el ceño.
Obviamente no le diría mi nombre a un chico extraño.
-Clarisse- respondí, aquel chico levanto un ceja y me miro de pies a cabeza, algo que no me agrado del todo- ¿Y tu?
-Ale... xis- dijo como si hubiera dudado en responder.
-Un placer Alexis, pero debo retirarme- dije puniendo mi mochila en el hombro y comenzando a caminar.
-¡Espera, Clarisse!- dijo tomándome del brazo y yo gire a verlo.
-¿Puedo ayudarte en algo?- pregunte algo molesta, ya que no me gustaba la forma en que me miraba.
-Solo quería saber... Si puedo volver a verte.
Esboce una sonrisa y quite mi mano de su brazo.
-Eso depende- hable.
-¿De que?- pregunto confundido.
-Del destino- comencé a correr lejos de aquel chico, gire mi cabeza para poder verlo y me sorprendí ya que no estaba.
Tal vez se perdió entre la gente, ¡si! seguramente fue eso, decidí ignorar el hecho de que ese tal Alexis se había esfumado y me apresure a llegar a mi casa.
