Change my mind (Matt Espinosa y tú)

Maratón 4/6

Son las 3 am más o menos, todavía no he conseguido dormirme. Tengo la sensación de que es culpa de la habitación de Ali, es complicado pero no es un lugar donde me sienta segura (y encerrada). Lo que es raro Es que en la de Matt no me he sentido así cuando he dormido con él.

Me levanto para ir a la cocina o a donde sea para despejarme.

Bajo las escaleras y siento que piso "algo" y él grita. Abro la luz de al lado llevándome el mayor susto de mi vida.

-Matthew!!! Que haces aquí en el suelo?

Él responde alguna palabra arrastrada. Está borracho

-Madre mía ¿donde has estado?- lo intento levantar y lo llevo a la cocina donde se sienta obedeciendo.

Comienzo a preparar un líquido especial y se lo sirvo para que lo tome.

-Puajjj- dice escupiendo- ¿que es esto?

-de verdad-río- tómalo. Ian me enseñó a hacerlo, es la mejor forma de despejar la resaca en un momento.

Él hace caso y lo bebe, unos minutos después le hace efecto.

-No debería fiarme de algo que te haya enseñado Ian y que sepa tan mal- habla medio sonriendo- ______, no recuerdo absolutamente nada de esta noche. -Y parece preocupado.

-Tranquilo, lo mismo me pasa a mi muchas noches,es normal...

-Ya lo se pero... Oye y tu? No podías dormir? Es muy tarde

-no, me cuesta dormir en la habitación de Ali... Ya sabes porqué

-Es por la claustrofobia? Es eso también te afecta?-dice impresionado.

-pues... Sí, no se explicarlo pero me siento agobiada en su habitación.

Él piensa un poco mi inexperta explicación. Nunca hablo de estas cosas con nadie, ¿porque con él si?

-Pero en la mía sí has dormido bien- asiento- ¿porqué no duermes en la mía si has estado bien?

-Cómo

-Lo has entendido, a mi no me importa. Mañana le diré a mi madre ¿no?

-De acuerdo... Voy a ver la tele un rato ¿te vas a la cama?

-Después de lo que me has dado? Ja -se levanta y va al sofá, encendemos la TV para ver cualquier cosa.

Luego subimos arriba, Matt me dice que duerma con él en su habitación. Inexplicablemente me duermo abrazada a él.
Créeme, su pecho es la mejor almohada que existe.