4. Los buenos viejos días

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Sé que esto debió ir al principio, pero nunca es tarde para una primera mala impresión. Mi nombre es Raymond Blake White. Soy el segundo hijo de Raymond White y Jennifer Barret-White. Nací el catorce de noviembre de 1993, en el condado de Trinity.

Me quedé sin casa luego de esa noche. Mi padre lo puso muy en claro, no quería verme cerca de Leo, de mi madre o de él. Para él solo era un monstruo sin emociones, diría que no le guardé rencor, pero sería mentir.

Mi madre contactó a su hermana, Elizabeth. Eran la familia más cercana que tenía, la hermana menor de mi madre que apenas y era mayor que mi propio hermano. Para mi comodidad ella me dio alojamiento en una de las casas que rentaba a estudiantes que venían a probar su suerte en las universidades de Trinity.

Era muy simple, una sala/cocina/comedor, un cuarto y un baño, tapiz beige, suelo alfombrado gris, con lo mínimo para estar cómodo. Una cama con cobijas, un sofá, regadera de micro tina, un refrigerador, microondas y una estufa.

Elizabeth hizo su mejor esfuerzo para no darme la espalda como el resto de la familia, venía a visitarme los fines de semana, a veces traía comida china, regularmente quedaba mucha comida debido a mi poco apetito. Estuvo ahí para mi cuando nadie más se molestó en ver como estaba.

Nopuedo hablar de mi historia sin mencionar a Stella Lancaster. Una amiga cercanaque intenté comerme. No es el mejor uso de palabras debido a la jerga, pero esliteral. Conocí a Stella durante el primer año de universidad, tenemos unahistoria un tanto complicada. Con suerte y conocerás un poco de ella.

Mentiras PeligrosasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora