La primera vez que mi corazón casi salta de mi pecho no lo poder olvidar jamás, tenía alrededor de unos seis o siete años cuando descubrí como se siente el vivir y la felicidad que te llena toda el alma.

No entiendo cómo es que ni siquiera tuve miedo, no me temblaban las manos y no sentía que iba a fracasar, yo sentía que realmente podía, no entiendo cómo es que ahora es diferente porque cambie en ese aspecto.

Recuerdo que subí esas pequeñas escaleras, y cuando alce la mirada estaba un micrófono y al frente mis padres, y un montón de personas no me moví y no dije absolutamente nada, solo me quedé viendo a mi alrededor dándome cuenta que este era mi destino y si con seis o siete años de edad, subí yo sola a un escenario repleto de luces he instrumentos en el lugar más caro de mi ciudad sin miedo y con gente gritándome que podía cantar pero me quedé quieta no porque estuve asustada  sino porque en ese poco tiempo que estuve ahí parada pude ver mi futuro pasar por mis ojos con la imaginación y el amor de una niña por ese sueño.

No deje de pensar en eso pero parece que hoy recordando, olvide lo que sentí porque mi mente no es de una niña pero creo que muy muy en el fondo mi corazón si, después de eso entre al coro de mi liceo y fui la favorita, muy pronto a eso cante al frente de todo mi colegio y de ahí todos me recuerdan por eso. Después cante para Iglesias y reuniones.

Y podía pasar día y noche cantando, y juro por dios que no podía cansarme o parar si quiera.

Pero no todo es color rosa, ya no soy una niña y mi tiempo está contado y jamás será suficiente solo la pasión.

Cada amanecer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora