Dolor (Daisuga)

Cerezos

Saltándose el entrenamiento esperaba en un lugar detrás del colegio, una banqueta sencilla. Viendo el único cerezo en el jardín de la escuela, un poco marchito, no tan alto ni tan bajo, no tan ancho o delgado, sin estar seco pero si dar vibras de vivacidad, a pesar de la temporada, pero sin perder su característico color rosa y su elegancia. 2 jóvenes yacían a su sombra.

-Se ve algo solitario ¿no lo crees?
-D-Daichi-san? Qué haces aquí?
-Te seguí - sonríe
-El capitán te gritará cuando descubra que te saltaste el entrenamiento- lo aleja un poco
-Lo hará contigo de todas formas; además, este es un cerezo muy hermoso- mientras sostiene una hoja que se movía suavemente gracias al viento

No podía evitar sentir el corazón saliendo de su pecho, y el rubor invadiendo sus mejillas.

-Suga, estamos a finales de la temporada de cerezos, quizá este sea el último día en que lo podamos ver este año, se ve muy bien solo entre los demás árboles, que este allí, lo vuelve único entre este triste jardín ¿no es así?
-Eso piensas? Yo solo veo un cerezo, bonito, pero creo que si los demás estuvieran aquí, probablemente ni lo notaríamos, solo lo hacemos porque no tiene a ninguna otra planta para compararlo- con algo de seriedad volviendo él
-De todas formas, no siempre es lo mejor que esté alejado, es un cerezo ante todo, y destacaría solo o junto a los demas, no quita lo hermoso que es
-Mmm se perdería en el paisaje, olvidando así su elegancia estando solo
-Pero no crees que se ve triste?
-Triste?
-Gg, perdón, esa fue una suposición algo rara, pero, dan de no dejarlo solo...
-Es porque eres una buena person Daichi, te preocupas por los demás
- Es probable, pero mira tengo un cuchillo en mi mochila, tallamos algo?
-Por que llevas un cuchillo en tu mochila? - rie
-Era para pelar una manzana de mi almuerzo- rie igual y saca el cuchillo
Ambos se acercan en lados opuestos del cerezo
-Escribiré mi nombre y fecha, quizá lo podamos ver aquí de nuevo el próximo año
-Quiza...- le quita el cuchillo a Daichi y comienza a tallar-Acabé
-Wao Suga quedó muy bien, pásame el cuchillo, tallare el mío en el otro lado del árbol
-Ou, toma- se lo alcanza- Podrías hacerlo a mi lado...- piensa algo triste
-Esto durará muchos años aquí, me pregunto qué pensarán lo que lo vean
-Que éramos muy buenos "amigos", no?
-Si, y lo seguiremos siendo- sonrie

Pasaron un rato allí, el capitán los regañó después. Y al día siguiente Suga llegó al salón
- Asahi-san, qué haces aquí tan temprano?
- Mi madre me botó de mi casa, dice que tendrá visita y que los asustaré :(
-Suga rie-
-Y tú? Ayer Asahi y tú faltaron al club, tú... se lo dijiste?
-N-No, yo solo... -nervioso es interrumpido por unas risas entrando al salón

-Y eso pasó? - sonriendo Michimiya
-Sí, y cuando me di cuenta era solo un gato perdido- ríe Daichi
Ambos carcajeando, llegan
-Hola chicos!- se sienta junto a ellos y Michimiya también lo hace a lado de Daichi
Todos los presentes los miran como si esperasen que revelaran alguna relación amorosa oculta hasta el momento.
Sugawara voltea el rostro acostado en su pupitre
-Daichi-san buenos días! - Asahi dice mientras pasa su mano gentilmente en la espalda de Suga, en señal que salude
Suga voltea de nuevo su cabeza viéndolos, aún recargado en sus brazos 
-Como verte así? Con una sonrisa brillante, tierno nerviosismo, y color rojo en las mejillas que tanto quisiera que me dediques- mirándole el rostro
-Escuche que las chicas del club de voleyball tendrán un intercambio a una ciudad cercana por 6 meses, es verdad?- Asahi
-Sí Asahi-san, es una oportunidad increíble que no podríamos desaprovechar, es una academia femenina muy conocida por su excelencia en los deportes, la capitana dice que como quiere que la supla el próximo año, quizá me quede algo más de tiempo- sonriente y algo orgullosa de ella misma
-Suga voltea la cabeza-Solo ya váyanse... - resopla triste y en voz baja
-Creo que olvidé mi lápiz en el club, iré por el antes que comience la clase - Yui
-Te acompaño
-Espera-te presto el mio Koushi queriendo evitar que sigan juntos
-No te preocupes Sugawara, no nos demoraremos mucho- Daichi, seguido por Yui asintiendo con la cabeza, se van del salón.
-Pero déjala responder a ella...-resopla de nuevo en voz baja
-De seguro están saliendo-Son una bonita pareja-Totalmente compatibles-Ya deberían anunciarlo- Sii! Son muy monos- No existe pareja más echa para el otro- Entrando al salon con esas sonrisa no cabe duda que es un tipo de indicio- Dicen los presentes en el salón
-Suga, no respondiste-Azumane
-No lo hice...
-Ya va más de un año así verdad?
-De que serviría? Sabes que él solo me ve como un amigo
-Vale la pena intentarlo, vamos!
-Ignoremos esto, soy fuerte, aguántare hasta el final del proximo año y graduarnos, bueno, cómo te va con el pequeño de primer año que te persigue a todos lados? Es un excelente líbero
- Lo es... aún no se como reaccionar bien a toda su energía, pero Suga no cambies el tema-
De pronto llega un profesor diciendo que la clase se cancelará porque el profesor está enfermo
-Yo, me tengo que ir
Koushi escapa de la clase y dirigiéndose a las escaleras, ve entre una puerta entrecerrada
-Pero no me quiero ir sin ti Daichi-san- lo pega más a sí misma
-Sabes que es una oportunidad única- la abraza
-Ya que lo dices... no quieres decirme algo antes que me vaya? Y-Yo te extrañaré muchísimo
-Y-yo emmm- nervioso - también te extrañaré, amiga mía
-Si... amigos, pero ya no podemos seguir así, digo aquí, vayamos al salón - Michimiya se aleja un poco y se limpia los ojos llorosos, retirándose hacia el salón
Sugawara perplejo por la escena se retira rápidamente
-"amigos" ella obviamente estaba incomoda con eso - se dice a sí mismo mientras bebe un café que se compró en la máquina expendedora - debería hacerle caso a Asahi? Es difícil de admitir, pero duele tenerte cerca tanto como lo hace que estés lejos, pero debo decidir donde me arriesgo a que te vayas- se echa en la escalera- waa no lo sé, solo, no quiero que te alejes, y si eliges irte quiero tener la fuerza para retenerte hasta que elijas quedarte a mi lado, es un deseo algo egoísta, pero si siendo una mala persona te quedarás junto a mí, me basta- aprieta su camiza- solo estate conmigo... - sujetando su cabello y forzando una sonrisa

Nunca supe si conocerte fue una bendición o una maldición, pero ya que entraste a mi vida no te pude soltar. Aferrado a ti, yo mismo ardí por dentro, pero soltarte nunca fue una opción. Sin ti soy nada, o mejor dicho, eres el único que me hace sentir ser algo. El torpe lío de sentimientos añorando el mayor premio...  creer que estoy destinado a llevármelo, pero eso también es exactamente lo que creen otras personas. ¿Qué me asegura que no es diferente conmigo? Qué me asegura que soy especial? Te esperaré, o al menos eso intento, mientras permanezco aquí, con cada parte de mi ser, gritando por dejar de atrás la necesidad de tenerte a mi lado.