Alien Boy (Mikitaka Hazekura x Reader)

Capitulo 6: Pájaros, sándwiches y kimonos

Eran las 6 de la mañana, no había podido dormir toda la noche anterior tratando de ayudar a Mei a empacar sus cosas, porque se iría con sus padres por un tiempo y me dejaría sola en la casa.

- ¿Segura que estarás bien?

-Claro, ya le dije a los profesores acerca de tu visita, les dije que estabas enferma.

-Oh vaya

-Espero que te vaya bien, nos vemos en unas semanas.

-Cuídate (T/N), tratare de escribirte cuando pueda.

Después de que Mei se fuera en el autobús, me subi a mi bicicleta para ir a comprar un sándwich y comer en el parque, hacía tiempo que no me quedaba sola en la casa sin ella, sabía que ella iba a estar segura afuera de Morioh, no me sentía sola, tenía otros amigos con quienes me podía juntar, pero no se sentía lo mismo sin que Mei estuviera conmigo.

Saque el sándwich de la bolsa y me puse a leer una revista de adolescentes, oía a los pájaros volar del árbol y ver como las hojas se caían, el árbol se tambaleaba mucho, mire hacia arriba y vi a alguien colgado de una de las ramas con binoculares, me levante y era aquel chico rubio, Mikitaka.

-Oye, ¿Qué haces colgado de esas ramas?

- ¿Me hablaste? -Pregunto Mikitaka volteando a verme con los ojos en forma de binoculares.

-Obvio, eres el único que está colgado de esas ramas.

-Pero, hay pájaros aquí también.

-Si, pero me refiero a humanos.

-No hay nadie, es decir, es cierto, yo soy humano, obviamente soy yo, es cierto.

Alce una ceja y él bajo del árbol, sus cabellos estaban llenos de hojas y ramas, trate de ayudarlo a quitarse todas las que tenía, no parecía dolerle para nada.

-Estaba viendo pájaros.

- ¿En serio?

-Si, pero se iban volando al verme.

-Creo que las espantaste.

- ¿En serio soy horrible?

-No, así son todos los pájaros, vuelan cuando te les acercas, es como su naturaleza.

¿También seria de nosotros los humanos si alguien se nos acerca?

-No, no creo que sería divertido eso.

- ¿Dónde está tu amiga?

-Mei, ella se fue de viaje, fue a visitar a sus padres, fuera de la ciudad.

Mikitaka vio la revista que estaba leyendo y la tomo para leerla, en una de las paginas estaba un artículo de una banda que me gustaba: Backstreet Boys, y en la otra NSYNC, me sonroje un poco y le pedí que me regresara la revista.

- ¿Por qué los peinados de esos chicos se ven tan raros?

-Así se peinan los cantantes de Estados Unidos.

-Se ven demasiado raros.

-Lo dice el que tiene el cabello largo como Legolas.

-¿Legolas?

-Es un personaje del señor de los anillos, ¿lo conoces?

-Ehmm, no, lo siento.

-Debes leerlo, no se describe demasiado ese personaje, pero yo me lo imagino así.

-Entiendo, tengo una pregunta, ¿por qué lees ese libro tan curioso?

-Pareces un alíen al decir eso, es algo que me gusta, es una revista para adolescentes, más para chicas como yo, tu lees comics o algo así?

-No, leo libros de Historia humana y Biología.

-Oh, ya veo. Tengo que irme ya, pienso limpiar toda mi casa, antes de que quede peor.

-Te acompaño, si quieres.

-No tienes tus cosas que hacer además de ver pájaros arriba de un árbol?-Pregunte riendo mientras recogía todas mis cosas, guarde todo en mi mochila y le pregunte si quería mi sándwich que no había comido él tomo y se comió la bolsa de plástico en la que estaba envuelta el sándwich, no sabía si era mi imaginación o en serio lo había visto comer eso. Mikitaka se cubrió la boca y me dijo que no iba a hacer nada, así que deje que me acompañara a casa.

Al llegar a casa, Mikitaka se quedaba viendo a los cuadros que había en las paredes y en algunos muebles, se veía muy sorprendido, se sentó en el sofá y se comió el sándwich, yo me fui a lavar algunos platos que estaban sucios de la noche pasada.

Mientras Mikitaka se comía el sándwich, él vio que en otro sofá estaba un kimono con gancho que yo había sacado de la tintorería, era de color rojo con negro y con decoraciones de flores en él, al terminar de lavar todos los platos, me acerque a él y me pregunto:

- ¿Qué es eso?

-Es mi kimono para mañana.

- ¿A dónde iras?

-Al festival Gion Matsuri, iré con mi familia en la tarde mañana, ellos me pidieron que fuera con ellos, van todos los años, ellos viven en Kioto. Yo estoy aquí porque aquí vivíamos antes, pero por el trabajo de ellos, decidieron vivir allá, pero me dejaron vivir aquí en Morioh, a veces los extraño.

Guardé el kimono en el armario de la sala y vi por la ventana a un muchacho de piel aperlada con cabello blanco pasar por la casa, por un momento pensé que era una mujer, cerré las cortinas y me senté con Mikitaka dejando un juego de té en la mesa.

Ambos nos servimos y el rubio me pregunto de que trataba el festival al que iría mañana, le dije que era un festival famoso por sus carrozas, usan treinta carrozas, e incluso más, y cada una representa una comunidad o asociación de Kioto diferente. Sus ruedas son tan altas como una persona, y durante los días de fiesta se inhabilita el tráfico para permitir que los puestos de yatai que contienen comida y juegos puedan desplegarse. Además de que los barrios tradicionales están decorados con flores, banderas y pancartas, e iluminados con farolillos. El famoso desfile comienza en el Santuario de Yasaka en el distrito Gion de Kioto. Algo muy hermoso, pero que no me gustaba ir, desde pequeña.

-Oye, lamento preguntarte, pero ¿has visto algo raro en la torre eléctrica afuera de la ciudad?

- ¿Cuál de todas? -Pregunte riéndome un poco.

-Una que está abandonada, desde hace varios días, vi que había alguien habitándola, sé que suena a algo imposible, pero es cierto, y se me hace algo raro que no baje al suelo, no me quise acercar, pero desde lejos lo estaba viendo.

¿No será que le da miedo o algo así?

-No lo sé, quieres ir mañana, ¿por la mañana?

-Está bien, solo que no quiero ensuciarme antes de irme a Kioto.

-Tranquila, solo iremos a ver, si quieres, vienes con el kimono ya puesto, solo lo vemos y después nos vamos, no nos meteremos en problemas, lo prometo.

-Confió en ti Mikitaka, si algo le pasa al kimono, mis padres me mataran.

Al día siguiente, antes de que Mikitaka fuera por mí, me puse el kimono y me arregle, estaba rezándole a los espíritus que no le pasara nada al kimono, no quería llegar toda sucia o algo así; cuando Mikitaka llegó, nos fuimos en el autobús más cercano hasta llegar a la pradera donde estaba la supuesta torre eléctrica abandonada con alguien habitando en ella. 

De alguna manera, la torre no me inspiraba confianza, sentía que algo malo iba a pasar al llegar a ella, ahí iba el kimono que saque de la tintorería.

Continuara...