Y así fue, viajaron a la Ciudad de México llegando a casa de Julián donde se quedarían los días que les tomara organizar las cosas del niño, solo llevarían lo esencial como ropa, artículos personales, algunos juguetes y por supuesto su colección de edificios y puentes los cuales tendría que volver a armar, sonrió cuando Christopher le prometió ayudarlo a armarlos de nuevo.Erick se quedó dormido en la habitación de su padre, y estaba bien, ya que sería la última noche que estaría con él, le dolía en el alma dejarlo, pero la decisión estaba tomada, estaba haciendo lo correcto, lo cubrió con una manta y bajó a la sala donde lo esperaban Christopher y Dulce tomando una taza de café.
−Se quedó dormido−suspiró sentándose frente a ellos−, mañana, después de que me entregue, vendrán a catear la casa y no me gustaría que Erick estuviera aquí…
−No te preocupes−interrumpió Christopher−, nos lo podemos llevar a algún lado.
−Gracias−asintió.Pasaron la mayor parte del día en la ciudad, Julián se había encargado de todo trámite relacionado a la escuela, así que todo eso estaba listo, el vuelo era al siguiente día por la tarde, se dedicaron a mantener distraído al niño el mayor tiempo posible. El abogado de Julián los vio en un restaurante para entregarles las llaves de la casa y pudieran sacar las cosas de Erick, también para avisarles que Julián ya estaba rindiendo su declaración.
No querían que Erick fuera a la casa y se acordara o se pusiera mal, así que Christopher fue en compañía del abogado quedando de verse en el hotel donde se hospedarían esa noche.− ¿Y Christopher?−preguntó Erick cuando iban en camino hacia el hotel.
−Fue por tus cosas cielo−respondió saliendo de sus pensamientos.Se registraron y subieron a la habitación que les correspondía, puso un canal infantil en la televisión y se recostó junto a él para esperar a Christopher, estaba a punto de quedarse dormida cuando escuchó que tocaban a la puerta, era él.
Su hermano supo que estaban en la ciudad por lo que se reunieron a cenar en el restaurante del hotel, los pusieron en contexto dejándolos sorprendidos al saber lo que Julián había hecho, fuera de eso, fue una noche tranquila, no pudo evitar sonreír cuando su hijo se acercó a Christopher pidiéndole que lo acompañara al baño a lo que él por supuesto accedió.
Fue cuando se dirigían de regreso a su mesa que sintió una mirada fija que lo seguía, era Constanza quien no dejaba de verlo llevando al niño de la mano.
− ¿Christopher?−lo llamó situándose frente a él.
−Hola Constanza−saludó sin muchas ganas− ¿Cómo estás?
−Bien, todo va bien, ya sabes−se acarició el vientre apenas abultado−, esperando que todo siga así y llegue el día.
−Claro−suspiró.
− ¿Y este pequeño?
−Es el hijo de mi novia.
−Oh vaya−lo vio rápido−, entonces volviste con ella.
−Por supuesto−asintió−, qué bueno que estés bien, hasta luego.
−Adiós−respondió viéndolo alejarse hacia una de las mesas, ahí estaba la violinista, su novia, bufó regresando a su mesa para después salir de ahí lo más rápido que pudo.Subieron a la habitación a descansar, lo había visto un poco pensativo después de que acompañó a Erick al baño y eso se le hacía raro, pero decidió esperar hasta que el niño se durmiera para preguntarle. Se recostaron en la cama viendo una película, se recargó en su pecho mientras pensaba cómo preguntar.
−Mi amor−lo llamó a lo que volteó a verla.
−Dime.
− ¿Estás bien?
−Sí mi amor, ¿Por qué?
−Estás muy pensativo desde hace rato.
−Constanza estaba en el restaurante−suspiró−, ya se le empieza a notar el embarazo.
− ¿Y cómo te sentiste?
−No lo sé, no me puedo ilusionar, pero tampoco puedo no darle importancia, quisiera que ya pasaran estos meses y salir de dudas de una vez.
−Lo sé−acarició su mejilla−, pero no queda más que esperar.
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Notas de Amor (Vdy) ©
RomanceDicen que el pasado se debe quedar atrás, seguir adelante y olvidarte de ello, pero, a veces nos persigue y es imposible huir, otras veces, nosotros mismos buscamos recuperar un pedacito de él, sobre todo si es algo que queremos en nuestro presente...