Episodio 8: Brindis de balas

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20:44 de la tarde, Carlsbad, Jason condujo el coche hasta llegar a la mansión donde estaba Viktor, en ese momento uno de los empleados de seguridad le detuvo diciendo

-Invitación- casi de inmediato Jason sacó la invitación del bolsillo de su la chaqueta del esmoquin, era una tarjeta con un código que debía pasarse por una máquina

-Aquí tiene- cuando el segurata la tomó y la pasó, Jason sintió gran alivio al ver que había pasado con éxito

-Todo en orden. Gire a la derecha en el parking y de ahí a la entrada principal

-Bien gracias- contestó Jason cuando el segurata le devolvió la tarjeta y tras llegar al parking pudo ver todos los vehículos que había allí, desde elegantes limusinas hasta gigantescas camionetas-Vaya, estos pijeras si que saben darse lujos- una vez en el ala principal y escabullirse hasta el baño evitando mezclarse con aquellos caballeros tan adinerados, entró en uno de los cubículos y sacó su móvil para informar a Blitzø y a los demás, quienes tenían la furgoneta acercándose poco a poco, estos al responder la llamada, Jason susurró para evitar ser descubierto- Estoy dentro

-{Bien, ya tenemos los explosivos instalados, cuando nos des la señal, los denotaremos}

-De acuerdo, por cierto ¿donde estáis?

-{A 5 kilómetros de la fiesta, si la cosa se complica te sacamos de allí. Obtén la información y acaba con él}

-No te impacientes, Blitzø, cuando me diga quién mató a mis padres será todo vuestro. Os informaré ante cualquier novedad- tras cortar la comunicación, Jason fue a la fiesta en busca de Viktor, por suerte pudo pasar desapercibido entre ellos, en esas vio una multitud congregada entorno a Viktor, riendo y divirtiéndose, por lo que para evitar que le viese, Jason se aproximo a una mesa con comida, pero al no mirar que se estaba llevando a la boca, acabó probando un queso que escupió por su horrible sabor, de forma que al ver a un camarero preguntó- Disculpe, ¿qué es esto?

-Es queso Casu marzu, un queso italiano famoso por poseer larvas de mosca vivas, coma poco si no quiere enfermar- tras retirarse el camarero, Jason se fue a un balcón cercano a escupir mientras decía

-Gusanos en un queso, que puto asco. Podrían haber puesto otra cosa yo que se, jamón ibérico o un queso suizo, que al menos sabe mejor y resulta más económico- en ese momento, Jason vio a lo lejos los faros de la furgoneta de Blitzø, pero en ese momento Viktor se acercó a él y le dijo

-Hace una buena noche, ¿no crees "Sakai"?- Jason se hizo un manojo de nervios en ese momento pero decidió controlarse, no había llegado hasta allí para irse sin la información que necesitaba, por lo que respondió

-Pues si, hace una buena noche

-Dime, ¿a qué se debe tu presencia en esta fiesta?

-Tu ya sabes porque estoy aquí- contestó Jason mirando con una furia serena a quien hasta hace 3 semanas fue su jefe, de forma que pregunto-¿A quien contrataste para matarme?

-Jajajaja, ¿sabes Jason? Hoy me has pillado generoso, así que compartiré la información sobre el asesino de tus padres brindando contigo, el mejor de mis hombres- en ese momento, Viktor entró a Jason nuevamente al interior de la mansión y pido a un camarero dos copas de vino, para darle a Jason una de ellas y decir- A tu salud, "Sakai"- sin embargo, al acercarse la copa a la nariz, Jason noto un olor raro en su vino, cosa que extraño a Viktor, quien le dijo- ¿Qué pasa? Se ve que nunca has bebido un vino de esta calidad- lo que Viktor no se imaginó fue que después de que este bebiera de su copa, Jason le arrojase el contenido de la suya en el traje dijera

-¿Debo recordarte que tu me enseñaste ese truco?- en un rápido movimiento, Jason cogió a Viktor por el brazo y tras remangarle la chaqueta de su esmoquin, descubrió un frasco atado a su muñeca- GHB, una droga de diseño usada como depresor del sistema nervioso ¿Qué pensabas hacer conmigo una vez estuviese dormido?

Helluva Boss: El sicario y la loba infernalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora