Capitulo 5.

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La puta alarma sonó a las 06:00 am, quería partirla al medio. Tenía una resaca de la mierda, sabía que no teníamos que mezclar bebidas, cuando me dispuse a apagar la alarma y seguir durmiendo, sentí un gran peso caer sobre mí y gritarme.

-Levántate perezosa, es tu tercer día y ya quieres faltar, además si faltas te sancionaran, y las sanciones nunca son muy buenas, asique levanta tu maldito trasero y ve a ducharte, hueles terrible.

Al término de estas palabras, me di cuenta que tenía razón, no podía faltar, iba a crear una mala fama y me sancionarían, me dispuse a levantarme a bañarme.

Con una cara, que decía que había tenido una gran noche, me fui a bañar, pero no alcanzo para que se me pasase el dolor de cabeza, todavía tenía una resaca de mierda.

Hoy sí que no tenía ni ganas de pensar en que ponerme, agarre un short verde, un poco corto, un buzo con la cara de Homero, el de los Simpson, era como la mayoría de mis remeras, muy holgada, salvo que esta dejaba mi trasero al descubierto, unas Vans verdes, como mis shorts, y me puse un poco de maquillaje, cosa que no hacía muy a menudo, pero esta era una ocasión especial, no podía salir con las ojeras y la cara que traía.

Desayune muy rápido porque no me dio el tiempo para más, salí hacia mi primera clase, genial hoy si tenía Historia, eso significaba una cosa.

Dylan.

En estos momentos me importaba una mierda Dylan y el resto de las personas, no tenía ganas de nada, creo que se veía en mi rostro, cuando iba yendo hacia mi clase, algunas miradas(bastantes) se posaron en mí, era de esperarse con la pinta que traía.

Llegue a mi clase, y por supuesto me senté a lo último, tenía un sueño de la mierda, no me acuerdo a qué hora habíamos llegado anoche pero sabía que había sido tan solo una, o unas horas antes de que sonara la puta alarma.

Hoy iba a ser el día en el que me dormiría sentada, además la materia en la que estaba no ayudaba mucho, Historia, no era la cosa más interesante que podía existir, pero me ponía contenta saber que la profesora, era una vieja, que nos dejaba hacer cualquier cosa asique si me dormía, creo que no tendría muchos problemas.

Sonó el timbre -Puta madre- resople que ruido más chillón y espeluznante, de seguro era por la resaca.

Comenzaron a entrar todos, desde la puta de Victoria, hasta el apuesto de Dylan, cuando iba entrando chocamos miradas, pero no tenía ni ganas ni fuerzas para mirarlo asique corrí la mirada.

Sin darme cuenta de lo que paso en la clase volvió a sonar el timbre.

Y por supuesto como la muy mensa que soy no lo escuche y seguí durmiendo.

-Hey despierta....despierta Julie..... Despierta. -Escuche una voz que me llamaba pero no tenía ganas de despertarme.

-Déjame de joder, un ratito más. - Escuche una risita, no podía creer que haya dicho eso, quería matarme y enterrar mi cuerpo en un lugar muy alejado.

-Si no te despiertas quedaras en ridículo, además tendré que despertarte a la fuerza.

Que molesta que empezaba a sonar aquella voz.

-Que cojones, por favor déjame en paz, no entiendes que quiero seguir durmiendo idiota....

Cuando quise terminar de decir lo que estaba diciendo, siento unos labios posarse en los míos.

Me despierto extremadamente rápido y lo quito de encima.

Me sorprendo al ver al chico que me acababa de besar.

Dylan.

Pero.

Que.

Cojones.

No, no soy la tipica chica. :)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora