Jeon JungKook era demasiado puro y tentador como para que JiMin no quisiera probar un bocado de él.
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➵Mini-Fic
➵Relación Boy&Boy.
➵Contenido Homosexual.
➵Contenido Sexual Explícito.
➵ Mención del BDSM.
[Bondage; Disciplina y D omin...
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JiMin era conocido por todo el mundo como el mejor estudiante de la Universidad Yonsei, elegante, educado, buen amigo, estudiante ejemplar y buen hijo.
Ante los ojos de muchos era el chico perfecto. Pero esa era solo una máscara, la cual le gusta usar demasiado, porque así las personas no lograban conocer al verdadero Park JiMin.
Ellos conocían el chico perfecto, cuando en realidad era un gran hijo de puta con 24 años que deseaba follarse a su estudiante de 20 años.
Debido al bajo rendimiento de JungKook en la escuela, durante su tercer año de universidad no le quedó de otra más que aceptar un tutor para poder corregir sus terribles notas. La verdad es que odiaba tener que recibir ayuda de un tutor, pero no había nada que el pudiera hacer. Al final de cuentas resultó que su querido ayudante sería Park JiMin era.
¿Qué si lo conocía?
Por supuesto que lo hacía, todos en aquélla universidad, los mil doscientos setenta y cinco alumnos conocían a Park JiMin. Porque era guapo, era amigable, sobresalía en los eventos de la escuela, formaba parte del club estudiantil como el presidente desde luego. Y siempre que tenías un problema él podía ayudarte.
El problema para JungKook era que, estaba secretamente enamorado de aquel chico y que ahora le daba pena ir a su tutoría con él.
No es como si fuera a decirle que le gustaba, porque JungKook sabía que JiMin podía estar enamorado de alguien más, siendo tan alabado y proclamado por la gente, se podía imaginar que aquel pelinegro estaría más interesado en alguna linda chica de alguna de las facultades de la universidad.
Le agradaba porque podía tener un poco de su atención durante las clases extras por las tardes, cuando se reunían en la biblioteca y estudiaban por tres horas seguidas.
JungKook trataba de prestarle siempre atención, JiMin trataba de hacer que JungKook se mantuviera concentrado en lo que le enseñaba para terminar a tiempo. Porque cuando la tutoría terminaba el sol comenzaba a ocultarse poco a poco, a veces JiMin lo acompañaba a tomar el autobús, otras veces subían juntos y se sentaban uno al lado de otro.
En el segundo mes de tutoría, JiMin entendió que JungKook era tentador, porque aquella vez cuando subieron al autobús y no encontraron lugar para sentarse, y se agarró de los tubos para no caerse, JiMin se quedó a su lado y odio tanto hacerlo, porque vio con sus propios ojos como unos chicos de otra universidad le tocaban el trasero a JungKook.
Ese día JiMin recibió dos golpes en su rostro por haber peleado con ellos, sin embargo, aquellos chicos también salieron lastimados. JungKook se lo agradeció llevándolo a su casa y atendiendo sus pequeñas heridas con un poco de alcohol y gasas.
JungKook se sintió feliz cuando JiMin lo defendió y JiMin se sintió tan furioso por haber visto como ellos tocaban a JungKook tan descaradamente, pero sobre todo, le enfureció mucho más por el hecho de que no quería que nadie más lo tocara, porque se podía ver así mismo haciéndole lo mismo al menor.
