- Culpa de marcas. [TordTom] [MattEdd]-omegaverce-

cap.11: Asistente.

"Hey Tom, buen día. ¿Qué tal la noche?"

- Se acerco casualmente sereno, a pasos medio rápidos; a pesar que al Beta no le agradaba en sus primeros días de trabajo, como asistente de el presidente de la compañía, debía de admitir que este se las ingenio bien para encajar, pues muchos envidiaban el hecho de que un puberto Omega consiguiera un puesto tan bueno solo por ser tan solo un poco cercano al presidente. Chisme, que no tardo demasiado en llegar a oídos del joven trabajador.

"Buen día Hellucard, qué puedo decir, extraño mis diez horas de sueño, sinceramente"

- El Beta aún recuerda claramente como el de azul gritaba a pulmón entero en medio de una oficina superior, maldiciendo a todos los que rumoreaban a sus espaldas, amenazando con una paliza, sin vergüenza alguna frente a tanta multitud de trabajadores. (Así es, ya habían pasado unos cuantos días desde que ingresó a trabajar en el edificio Larsson).

- Eso sin lugar a duda era cuestionable, además de poco profesional, mientras otros simplemente ignorarían los rumores y se dejarían pisotear de otros al punto de pedir la renuncia, él simplemente hizo lo que consideró más pertinente, claro, no de la mejor manera.

- Él había sido uno de esas tediosas personas que sufría internamente de envidia por el nuevo chico, pues había luchado por dos largos años ese puesto, ya que seguía siendo un veterano de la oficina de llamadas, realmente deseaba conseguir un ascenso donde recibiría un aumento y beneficios laborales mas cómodos, pero desgraciadamente el cupo había sido puesto en bandeja a un primerizo de baja casta. Le enfurecía.

- Esto causo varios colapsos mentales al de mirada gentil ya cansado de su trabajo, podía renunciar, pero las deudas no se pagan solas y no es precisamente fácil conseguir un buen trabajo. Aún así, después de esos pocos días en la oficina y todo lo ocurrido, empezó a tenerle respeto, pues hacia bien su trabajo responsablemente, aun siendo novato, además de que era peculiarmente poco tierno o sumiso, pues bien, todos sabemos que los Omegas tienden a tener una actitud nada defensiva u agresiva, pero sin duda alguna, este omega rompía con las etiquetas, por lo cual simplemente era difícil para el Beta no tener su atención e interés en él, al punto de decir que tal vez, se había cautivado de la forma más extraña posible. De la forma más absurda para él.

- Llegando al presente, en donde ahora eran algo así como amigos. Algo así, por que muchos notarías que el de azul no lo quería cerca, aunque no tenía de otra pues nadie más en ese lugar se le acercaba y era buena compañía.

"jaja, tienes razón, es molesto, pero te acostumbraras pronto".

-Decía mientras lo ayudaba a cargar una pila de carpetas hacia su oficina mientras compartían el ascensor directo a las oficinas, al parecer tendría que revisar todo eso en un día.

*suspira* "eso espero y gracias por la ayuda Hellucard, ahora si me disculpas, tengo trabajo que hacer"

- Dijo para salir del ascensor a paso firme junto con la pila de carpetas, siendo perseguido con la mirada del más alto que se quedó en el ascensor para dirigirse a su respectivo piso.

"Seguro, entonces ¿nos vemos al almuerzo?".

"suena bien".

"genial, adiós entonces".

"adiós".

- Llegado ya a su destino se estiro, haciendo tronar sus huesos, evidenciando su cansancio con un bostezo. Tendría que darse prisa a terminar todo eso, definitivamente hoy quería irse de la oficina lo mas pronto posible; el teléfono de cable sonó.

"Buen día, ¿en qué puedo ayudarlo?"

"Buen día para usted también, Ridgewell".

"Señor. Parece ser que hoy decidió venir a la oficina por voluntad propia, ¿debería preocuparme de algo?"