Mark, un modelo de Canadá, va a tener un trabajo en Seúl. Johnny, un influencer de Instagram, tiene la misma oportunidad.
El único problema es que Johnny habla coreano con fluidez, pero Mark no. Y la gente de Seúl tampoco puede hablar inglés.
↳ NCT...
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Buena pregunta. Tal vez porque mi manager lo olvidó y me inscribió, sin preguntarme sobre mis habilidades coreanas.
--Porque quiero experimentar algo nuevo y luego mi gerente me inscribió para esta semana.
Inclina la cabeza y arruga la frente. --¿Sin comprobar tus habilidades coreanas? No muy bien pensado.
Solo asiento con la cabeza y saco mi libro de estudio de coreano. Quizás debería empezar a aprender más. "Hola" y "¿Cómo estás?" No son suficientes para un trabajo en Seúl.
Mientras lo hacía, la camarera regresó con mi bebida de jugo de sandía. La sandía es, con mucho, mi fruta favorita en la tierra. Tan buena, incluso como jugo. Le doy las gracias en coreano y ella se marcha sonriendo e inclinándose hacia nosotros.
--Puedes hablar lo básico, ¿verdad? --Sí... pero solo un poco. El coreano es demasiado difícil.
Él se ríe y asiente. --Es verdad. Estoy muy agradecido de que mis padres me hayan enseñado coreano desde que era pequeño. No es perfecto, pero... --se inclina hacia mi oído y susurra --Mi inglés si lo es.
Me río y casi me ahogo con mi bebida. Por eso también se ríe de mí. --Dios mío. No mueras con tu bebida.
--No no. No lo haré. Es demasiado bueno para morir. --¿Te gusta mucho la sandía?
Asiento con la cabeza mientras bebo mi jugo de la pajita.
--¿Y a ti te gusta el café, supongo? --Correcto, Shorty.
Mientras bebo, le doy una mirada de muerte. Mucha gente me llama bajito, ¡aunque ya no soy tan pequeño!
--¡Mido 1,75! Ya no soy tan pequeño.
Empieza a reír de nuevo. Probablemente vio mi expresión facial confusa y solo sonríe. --Yo mido 1,85. Así que, en mi opinión, eres bajito.
Entrecierro los ojos y niego con la cabeza. --Soy promedio. Eres solo un gigante.
Asiente como si estuviera de acuerdo con eso. --Lo entiendo y no puedo quejarme. Es bueno ser alto. Puedes llamar a todos bajitos para molestar a todos.
Le doy una mirada de muerte de nuevo y comienza a reír de nuevo. --Está bien si quieres que me detenga. ¡Voy a hacerlo!
Levanta las manos en señal de "Estoy derrotado". Por eso me río de nuevo y empiezo a toser porque me hizo reír mientras vuelvo a beber. Siento que voy a morir por este tipo. MIENTRAS BEBO.
Él también se ríe conmigo y me da palmaditas en la espalda para ayudarme a calmarme con la tos. Cuando termino, bebe un poco de su café y me mira de nuevo.
--Entonces. ¿Cómo fue tu entrevista, con este coreano no tan bueno?
--Erm... ¿Tenemos que hablar de eso? --Sí. Dime qué pasó.
