Min Yoongi había afrontado varios problemas a lo largo de su vida, pero nunca uno tan pesado como sacar a Jeon Jungkook del edificio de la agencia de un modo tan discreto, literalmente.
A ver, él no se consideraba alguien con poca fuerza, de hecho, incluso va al gimnasio con regularidad; pero jamás en su vida había cargado a un alfa como su amigo con anterioridad, un alfa con tanta musculatura que provocaba que sus trajes se le ajustaran en los lugares perfectos para acentuar su cuerpo, como su pecho o su espalda, y cuando se estiraba mostrando esos fuertes brazos y manos y...
Suspiró un poco agitando la cabeza para regresar sus pensamientos a un rumbo coherente, y a su piel a un tono normal -fuera del fuerte sonrojo que había golpeado sus mejillas- escuchando una diminuta risa proveniente del interior de su mente. La risa de su lobo. La risa del pequeño Labendeo.
Después de varios descansos y dificultades, llegaron al estacionamiento, con un último esfuerzo Yoongi metió en su propio carro a Jungkook, suspirando y relajándose con su suave aroma a lavandas, viendo como el contrario sollozaba, dejando atrás su tensión.
—Por dios Jungkookie... ¿Qué es lo que te sucede? ¿A dónde debería llevarte?
"Llévalo a casa, a nuestra casa, he visto esto antes y no quiero que esté solo..."
—¿Porqué se ha puesto así? -Pregunté al aire mientras acariciaba con una mano el marcado rostro de Jungkook, un rostro que mantenía una expresión triste, haciendo un pequeño puchero —¿Habrá sido aquel omega?
"Muy probablemente...aunque no estoy muy seguro si sea eso lo que le haya pasado, pero sentiste su aroma, su miedo, su rechazo ¿No es así? Llévalo con nosotros, hazlo por él, por nuestro alfa"
Suspiré un poco y me estremecí cuando la palabra "nuestro alfa" volvió a mi memoria, y sonreí porque no se escuchaba nada mal. Pero es Jungkookie, no debería pensar así de él; aunque una pizca de miedo golpeó mi corazón
—Pero si lo llevamos ¿No crees que nos descubra? ¿O pensará que tengo pareja?
"Sabrás que decirle, pero por favor, llévalo, no podemos perderlos"
Suspiré y asentí, acomodándome en el asiento del piloto después de mandar el mensaje que Jin-hyung me pidió que enviara, puse un poco de música ambiental y comencé a manejar hacia mi departamento, con los nervios en el estómago y un Jungkook sudoroso y jadeante que se retorcía incluso recostado. Mordí mi labio y aceleré, más preocupado por él que por mí.
Al final, precisamente es él, así que no creo que pase algo malo.
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Una fina lluvia empezó a caer en el momento en el que llegué a mi hogar, pero incrementó un poco cuando saqué a Jungkook del coche y entraba a la recepción del edificio. Empapado y cansado lo llevé hacia el elevador para presionar el piso del pent-house en el que vivo.
Lo recosté en el sillón, fui a secarme y cambiarme rápido para después traer una toalla y ropa seca para Jungkook.
Quité sus zapatos, la chaqueta y el chaleco; pero mis manos empezaron a temblar cuando vi como la camisa mojada se transparentaba y pegaba a su cuerpo, sonrojándome fuertemente y, sin ser consciente de ello, mi aroma incrementó gracias a que el efecto del inhibidor se había terminado. Tomé valor y, girando la cabeza a un lado, empecé a desabotonar -botón a botón- con lentitud su ropa, tratando de no tocar de más -o ver de más, mejor dicho- al alfa frente a mí.
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R⃤e⃤n⃤a⃤c⃤e⃤r⃤
Fanfiction《Resucitar al corazón de entre las ruinas》 Cuando se rechaza a un destinado, dos almas nuevas pueden enlazarse y buscarse por el resto de la eternidad, siempre y cuando estas hayan sobrevivido. Jungkook y Yoongi fueron rechazados por sus destinos, u...