✎3

1 0 0
                                    

Enserio era como una niña pequeña, veía como se pegaba a mi viendo todo lo que hacia y yo obviamente empezaba a enseñarle, aunque era algo difícil, se entretenía tan fácil. En ocasiones corría detrás de mi gato, a veces se desaparecía y cuando me daba cuenta estaba revisando mi refrigerador. 

Me reía mientras la veía, era muy adorable. Cuando notaba que intentaba comer algo que no debía, la detenía mejor dándole un pequeño dulce, gracias a aquellos dulces empezó a prestarme mas atención.

-H-hola... S-soy... A-Amadís...- Me decía mientras empezaba a leer lentamente, con algo de dificultad. 

-Muy bien pequeña- Comente feliz mientras le entregaba un chocolate, el cual rápidamente se comería a lo que yo reía. 

De poco en poco fui enseñándole algunas cosas, pero seguía dificultándose la mayor parte de todo. Sin darme cuenta por fin era de noche; Al terminar con todo, veía como ella se pegaba a la ventana admirando las estrellas, tan solo la miraba, me parecía tan bella a la luz de la luna. 

No podía pensar en nada mas, solo la miraba, sin apartar la mirada un solo minuto. Escuchaba un poco su estomago rugir ella se sorprendería mirando su estomago para luego alarmarse pegándose a mi rápidamente en un abrazo. 

-Jajajaja, eres una ternura, eso que escuchas, es por que tienes hambre linda- Decía mientras acariciaba su cabello lentamente, enserio no parecía una humana por momentos, parecía de algún otro lugar- 

-¿H-hambre?- Preguntaba mientras me miraba, se notaba que estaba realmente confundida por lo que había mencionado. 

La separaba de mi lentamente, mientras empezaba a caminar hacia la cocina. Sacaba un pedazo de pizza que estaba dentro de mi congelador, para luego meterlo dentro de mi microondas empezando a calentarlo. 

Mientras aquel pedazo se terminaba yo me sentaba encendiendo mi televisor, buscando una película, alguna que notara que llamara su atención, pasaba variedad de películas hasta encontrar una llamada "Violet Evergarden" Era un anime, se notaba interesante por lo que la elegía. 

Escuchaba el sonido de el microondas, por lo que me levantaba mientras ella se quedaba viendo la película sorprendida por la animación. Sacaba las rebanadas para después sentarme a su lado soplando un poco, haciendo que esta quede algo tibia por lo que agarraba un pedazo empezando a comerlo. 

Notaba como ella me miraba. 

-¿Que pasa linda? -Decía dando una mordida a mi rebanada, comiendo tranquilamente 

No decía nada por lo que decidí tomar una rebanada y acercarla un poco a sus labios, esta daba una mordida algo rápido sonriendo demasiado por aquel sabor, al parecer enserio le gusto. 

Enamorada de cupidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora