Todo cambió

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#Narrador Omnisciente#

El día más triste de su vida lo recuerda como si fuera ayer, aunque habían pasado 15 años, la muerte de su padre había marcado un antes y un después en la vida de Zee.

Desde que él era muy pequeño, su padre había presentado síntomas de un padecimiento cardíaco, por lo general se quejaba de tener molestias e incluso dolor en el pecho, sin embargo no había hecho mas que tomar calmantes y no se hacia ver por un profesional.

Los señores Pruk tenían un matrimonio normal con altas y bajas, pero no había duda de lo mucho que amaban a su hijo; Zee no tenía hermanos así que desde que llegó a la capital siempre jugaba y compartía todo con sus dos mejores amigos Mew Y Boun.

Pero de la nada todo en la vida de este chico, que en ese momento tenía unos 12 años, cambia de manera brusca cuando estando en la escuela recibe una llamada que traía consigo una muy mala noticia.

#Narra Zee#

Recuerdo claramente aquella tarde, estaba con Mew y Boun jugando a pasarnos la pelota, habían terminado las clases y salimos afuera a esperar a que viniera a buscarnos el chofer de Mew.

Sentí mi celular vibrar en el bolsillo de mi pantalón, lo saqué para ver quién era y resultó ser mi mamá, tal vez vendría a buscarme ella, aunque era raro ya que siempre iba con mis amigos; algo en mí me decía que algo malo estaba pasando y tenía razón.

- Hola.. mamá?- contesté el celular algo extrañado- pasó algo?, voy con Mew y con Boun el chofer me llevará a casa.

-Hijo... será mejor que vayas con ellos a su casa- dijo y pude escuchar su voz quebrarse poco a poco- estoy en el hospital ahora.

- Qué?? pero porqué... qué pasó?- en ese momento me asustó la idea de no tenerla cerca.

- Es tu padre... Él está muy mal- su voz se quebró por completo y la escuché llorar- tiene un problema en su corazón.

Nunca sabré de dónde quité la fuerza en ese momento, pero en cuanto vi el auto de Mew llegar le supliqué al chofer que nos llevara al hospital. Por nada del mundo dejaría a mi mamá sola en esto.

Cuando llegué vi a mi madre sentada al final de un largo pasillo, ella estaba con los ojos rojos y el rostro lleno de lagrimas, parecía que su mirada estaba perdida. en cuanto se percató de mi presencia solo me abrazó y lloró mucho.

la frase que salió de su boca cuando logró articular palabras, preferiría nunca haberla escuchado.

Zee mi amor...tu padre se ha ido de nuestro lado...

Sentí como si en mi interior algo se hubiera roto, sentía los pedacitos caerse y hacerse nada como si fueran cristales... las lagrimas comenzaron a salirse solas... no tenía voz... y no podía moverme...

Lo último que recuerdo antes de perder el conocimiento es el rostro de desesperación de mi madre y a lo lejos mis dos amigos corriendo por el pasillo para pedir ayuda. Quedé inconsciente por varios minutos, pero cuando volví en sí empecé a llorar y gritar como loco, así que me tuvieron que poner un tranquilizante.

Algo me pesaba en la mano cuando desperté, mi madre se quedó dormida al lado de mi cama tenía mi mano entre las suyas. Cuando me vio no dijo absolutamente nada, y solo me miró e intentó sonreír pero solo se notaba aún más lo triste que estaba.

Después todo pasó muy rápido, el funeral de mi papá había sido puro silencio para mí, sabía que si decía una sola palabra rompería en llanto y no quería que mi mamá se pusiera mal otra vez. Cuando salí de ahí no quería a nadie más que a mis amigos a mi lado.

Mew y Boun se han convertido en dos pilares emocionales para mí, no me han dejado solo y me  conocen muy bien. con ayuda de ellos y ayuda psicológica pude sobrellevar la perdida que sufrí. 

La relación con mi mamá cambió, en los años posteriores a la muerte de mi padre ella se mantuvo distante conmigo, solo hablábamos para lo justo y necesario, incluso había veces que podía quedarme semanas en la casa de Mew y ella no decía nada.

Me voy a casar... es todo lo que dijo esa tarde mientras comíamos, habían pasado 7 años y ella parecía estar ajena al dolor, como casi no hablábamos no sabía que tan lejos llegaría lo que yo pensé que era una relación con un hombre que conoció hacía muy poco; sabía que buscaba rehacer su vida pero para mí era muy pronto para seguir adelante con su idea de una nueva familia.

Cumplí los 19 años y me mudé al mismo edificio que Boun, eramos vecinos y compartíamos mucho tiempo juntos, el saber que él también perdió a sus padres y lo había aprendido a superar hacía que encuentre en él un consuelo. Mew cada tanto venía y tomábamos un par de cervezas o veíamos alguna serie los tres juntos, somos como hermanos y vamos hasta a la misma universidad.

#Narrador Omnisciente#

Gracias a todo el apoyo que recibía de sus amigos Zee pudo salir adelante, concluyeron la escuela juntos y decidieron ir a la misma universidad, desarrolló un carácter muy alegre y se abrió a nuevas experiencias, se convirtió en un chico muy atento y era quien le sacaba un montón de risas a los demás.

 Toda la tristeza pasó a un segundo plano en su vida y aunque siempre había veces en las que se sentía decaído, Mew y Boun siempre estaban ahí para apoyarlo en todo.

#Narra Zee#

Mi celular comenzó a sonar por toda la habitación, era el sonido predeterminado de Mew así  que tomé la llamada.

- Bueno Mew?... tanto extrañas a este bombón?- le dije con un tono de burla.

- sii claro, ya quisieras- contestó- estás ocupado?

- depende de quien me quiera ocupar- reí- no.. no estoy ocupado...ya dime que pasó?

-te acuerdas de lo que nos contaste? lo que te dijo Max acerca de las becas- hice algo de memoria.

- ahh sii, qué con eso?- le dije restándole importancia

- pues tenemos que hacer algo no crees?- dijo y escuché la risa de Boun de fondo

- si sabes con quién estás hablando?-dije con orgullo-nos espera el sábado en su oficina.

- espera ...que? ya hablaste con él?- dijo asombrado.

- sii... bueno hablamos más tarde ahora sí tengo que hacer unas cosas- colgué la llamada sin esperar respuesta.

A corazón abiertoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora