capitulo 10

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Narra TN:

El perro soltó un ladrido de miedo he inmediatamente Evie despertó, no sabía lo que estaba pasando pero lo presentía y no era bueno

Evie: mierda

Me levanté y fui corriendo al baño, al mirar mi reflejo mis ojos comenzaron a tornarse de un azul intenso y pequeñas llamas de fuego comenzaron a expandirse por mis manos

Me moje la cara esperando volver a la normalidad pero no lo conseguí, ver ese reflejo me estaba matando y de un puñetazo rompí el espejo, Evie vino corriendo asustada e intentó acercarse

TN: alejate, puedo hacerte daño

Me miró dudosa pero aún así continuó acercándose

TN: ¡Dije que te alejes Evie! No quiero lastimarte

Sentía impotencia y eso solo hacía que el fuego en mis manos incrementara

Evie: okey Tranquila, respira hondo y cierra los ojos

Asentí algo asustada no era la primera vez que me pasaba pero como en la isla no hay magia solo era el cambio de color en mis ojos cuando me enojaba demasiado, Uma dijo que esto tenía algo que ver con mi madre pero nunca me interesó saberlo

Aún con los ojos cerrados no sentía como si el fuego desapareciera es más se hacía cada vez más intenso hasta que sentí unos brazos rodearme y abrí los ojos de golpe

TN: ¿Que ...que ha.. haces Grimhilde?... Quítate te vas a quemar..

Evie: tranquila todo está bien

Sus brazos fueron demasiado reconfortantes y en cuanto comenzó a acariciar mi cabello me tranquilice totalmente y el fuego desapareció

Evie: ¿te sientes mejor?

Asentí y mire su ropa algo quemada

TN: siento lo de tu ropa... Gracias Grimhilde

Evie: ¿Que fue eso?

TN: no tengo idea, en la isla mis ojos solo cambiaban de color por la falta de magia pero Uma dijo que tengo poderes y que tenía que ver con mi madre

Evie: ¿Tu madre es?

TN: si lo supiera entendería que me pasa

Recordé mi enojo con ella y salí del baño por unas cosas para recoger los vidrios del espejo, mire mi mano y tenía algunos vidrios clavados en la mano pero no le tome importancia

Al acabar de recoger ví a Evie en su cama mirándome fijamente, la ignore y me senté en mi cama para comenzar a quitar los vidrios, con un algodón y alcohol empecé a curarme

Al momento de intentar pasar la venda por mi mano fue cuando comencé a sentir dolor, hice unas muecas pues se me estaba complicando demasiado poner la venda

Evie: ¿te ayudo?

TN: No

Al final logré ponermela yo sola y sonreí triunfante, todo iba bien de nuevo me acosté en mi cama aunque el cachorro ya no quiso acercarse a mi y ahora estaba con Evie

Evie: ¿Que tal te fue con Audrey?

TN: bien supongo

¿Desde cuándo le interesa?, Agh que idiota eres Grimhilde y yo más por haber llegado a sentir algo aunque fuera lo más mínimo en ese beso

Mire al perro en sus brazos y en realidad se ve tierna así

Mierda debo dejar de pensar tonterías

Mi Tesoro (Evie y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora