FAVORES

PRIMER ENCUENTRO

Phoenix sujetaba una shorty firmemente mientras caminaba con pasos de gato. Ni siquiera se escuchaba la nieve siendo aplastada bajo sus pies.

Ya llevaba un par de horas en icebox. Había recibido un comunicado de sus superiores de Valorant, diciendo que tenían sospechas de que kingdom planeaba destruir ese lugar para deshacerse de algo, usando una bomba de radianita y no podían permitirlo. Phoenix mismo se había ofrecido a encargarse de esta misión cuando escuchó que era muy posible que una radiante con poderes de viento sea al menos una de las encargadas de hacer estallar ese lugar.

El chico de fuego tenía un asuntillo pendiente con ella, después de lo que ocurrió en Venecia.

Se escondió detrás de un contenedor de mercancía y esperó a ver si algo pasaba. Estaba seguro de haber escuchado pasos hace un rato a pesar de que todo el lugar había sido evacuando.

Se quedó ahí en silencio unos cuantos minutos, hasta que los pasos volvían a escucharse. Venían desde atrás, y conforme se acercaban, fue capaz diferenciar más personas. Eran por lo menos tres.

La primera persona ya casi llegaba. Venía por su derecha. Cuando estaba lo bastante cerca, Phoenix salió del escondite listo para disparar. Se quedó plasmado cuando vio que no había nadie, pero los pasos se seguían escuchando. Cuando miró al suelo vio huellas que aparecían en la nieve.

-¿What the... un fantasma?

No entendía nada, pero los otros pasos se escuchaban por su izquierda esta vez. No tenía tiempo de dudar, se giró y puso en guardia otra vez esperando que la siguiente persona asomara, en cambio volvió a pasar lo mismo.

Pensó que se estaba volviendo loco, pero ahora se escuchó un ruido detrás de él, parecido a un sonido metálico o eléctrico... algo extraño, y antes de que tuviera tiempo de girarse para ver que era, el ruido desapareció y un brazo le rodeó el cuello con tanta fuerza que apenas podía respirar.

-¿Quién eres? - se escuchó una voz grave y bastante imponente detrás de él.

-Eso debería preguntarlo yo. - contestó Phoenix sin mostrar miedo. Aunque estaba en un aprieto, todavía podía renacer de sus cenizas y salvarse de este lío, pero al menos sacaría información antes.

-No vaciles. - contestó el otro apretando más su brazo.

-Quieres hacer volar este sitio, ¿no? Pues estoy aquí para impedirlo. - dijo Phoenix con el poco aire que el otro le dejaba, dando por hecho que era uno de los atacantes, no había más razón para estar en ese lugar.

-¿Volar este sitio? Ni hablar, necesito encontrar algo antes. - habló el de voz grave, soltando a su rehén pero apuntándolo ahora con un revolver a la cabeza. - Dame más información.

Phoenix levantó las manos y se giró a verle. Un chico de origen asiático, algo más bajo que él y con un peinado bastante cool.

Tuvo tiempo de esconder la shorty antes de que le atrapara. La guardó en la espalda, debajo de su chaqueta. No estaba realmente en peligro por lo que seguiría hablando mientras el otro se lo permitiera.

-¿Encontrar algo? ¿El qué? - preguntó, tal vez era verdad que no es uno de los atacantes. Era raro que viniera él solo. No iba a dispararle antes de estar seguro.

-Algo que pertenece a mi familia y kingdom me ha robado. ¿Trabajas para ellos, no?

-Eh... más o menos.

-Entonces dime donde esconden lo que me han quitado.

-Oye bruv... yo solo me encargo de que no exploten este sitio con radianita. No sé nada de lo que kingdom trama aquí.

-Joder... - se quejó el chico de la mecha azul bajando el arma. - ¿Te puedo pedir un favor?

-¿Pretendes que te conceda un favor después de casi asfixiarme y haberme apuntado a la cabeza? - se sorprendió Phoenix por el cambio de actitud del asiático.

-Te devolveré el favor ayudándote con lo de la explosión.

Phoenix le miró algo desconfiado antes de decir nada.

-¿Qué quieres? - Ese chico era fuerte y tenía unos trucos bastante interesantes, pensó que tal vez le venía bien tenerlo de su parte para cuando llegaran los atacantes.

-Ayúdame a encontrar lo que te dije. Si pretenden volar este sitio necesito darme más prisa de la que tenía planeada, aunque no me guste el trabajo en equipo, entre dos acabaremos antes. - explicó Yoru para después poner una mano sobre el hombro de Phoenix y le miró a los ojos. - Además, pareces un tío de confianza.

El radiante de fuego se sintió algo incomodo por la repentina cercanía del otro, por lo que apartó esa mano de su hombro a lo pocos segundos.

-¿Qué te hace pensar que soy de fiar? - dudó Phoenix pensando que no le había dado ninguna razón para confiar en él.

-Es sencillo, bakayarou - se encogió Yoru de hombros habiendo soltado una palabra en su idioma natal casi sin darse cuenta. - Seguro pensaste que venían varias personas a por ti. Podrías haber llamado refuerzos en ese rato, pero aún no ha venido nadie. Es evidente que te han mandado aquí a tí solo, así que no tengo que preocuparme por eso.

Phoenix miraba a Yoru acercarse a él con una sonrisa bastante confiada, como si supiera que no le pasaría nada estando cerca de él. El chico japonés caminó hasta quedar detrás de Phoenix, y puso una mano sobre la espalda de este, haciéndole sentir incomodo otra vez.

-Además, te estaba poniendo a prueba. Cuando te tenía agarrado noté esto. - Yoru bajó la mano sobre la espalda de Phoenix, provocándole un escalofrío, y finalmente le quitó la shorty que escondía.

Cuando sintió eso Phoenix se giró de golpe sorprendido y algo molesto.

-¡Oye, no te di permiso para quitármela! Se suponía que te fiabas de mí.

Yoru sonrió algo vacilón y le devolvió el arma.

-Te solté a posta pensando que aprovecharías esa oportunidad para dispararme. Pero no lo hiciste y escuchaste lo que tenía que decir. - continuó hablando sentándose encima de una caja más pequeña para ponerse cómodo. - Eso me inspira bastante confianza, o que al menos tienes alguna razón para no acabar conmigo.

-Wait, quieres decir que si yo hubiera disparado, ¿lo habrías dejado todo a manos de ver quién dispara antes?

Yoru miró a otro lado y sonrió de nuevo.

-Claro.

Al escuchar eso, Phoenix le apuntó con su arma y disparó sin pensarlo.

-¡Oye! ¿A qué ha venido eso? - se escuchó la voz de Yoru justo detrás de él. 

-Yo también quería ponerte a prueba. No tendría de compañero a alguien que no viene con un as bajo la manga - Esta vez Phoenix era el que sonreía. Se giró hacia Yoru de nuevo y levantó su puño. - Ahora sí me caes bien.

El japonés le sonrió de vuelta. Le pareció divertido haber encontrado a alguien con más personalidad de la que esperaba. No lo dudó mucho y chocó su puño con el de Phoenix.

-Entonces voy a dar por hecho que tu también tienes un as bajo la manga la próxima vez que tenga que dispararte.

-Ten por seguro que sí, colega.

-Bueno, en marcha. - dijo Yoru girándose para empezar a caminar, sacando un peine de la nada para arreglar su cabello.

-Te sigo. - dijo Phoenix caminando detrás de él. - Espera, ¡aún ni sé lo que estás buscando! ¡Ni siquiera sé como te llamas!

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Ojalá os haya gustado. Para qué mentir, me empecé a encariñar con este dúo después de ver la cinemática en la que salían juntos. Inspiraban un aire de confianza y amistad enorme, y ya sabéis como es Riot, apenas se sabe nada del lore, lo que da espacio a imaginarse muchas cosas >w<

¡Ya tengo ganas de escribir el siguiente capítulo!