Desde Que Llegaste

Part 68: The Golden Boy

NARRA SOFÍA

-... estuvo increíble.-dijo Villa mientras me platicaba cómo estuvo la gira con los chicos, tomó mi mano mientras caminábamos hacia el estacionamiento de la universidad

-Te ves tan precioso cuando estás emocionado.-se me salió decir sin pensarlo, él rió y me abrazó

-¿Qué cosas dices?-negó con la cabeza y yo le quité la alarma a mi auto

Pasamos la tarde juntos: fuimos a comer algo y visitamos una librería.

-Este cuento está bueno.-dijo mientras veía la contraportada del libro que compró- ¿Me dejas leértelo?-preguntó mientras caminábamos por un parque, asentí y nos sentamos en el pasto

-¿Nos acaban de tomar una foto?-le pregunté escuchando el sonido de un flash, él dejó de leer y me miró frunciendo un poco el ceño

-¿Crees que nos acaban de tomar una foto?-preguntó de vuelta y volví a escuchar el mismo sonido, creo que él también lo escuchó; suspiró y sonrió- Sí, hay alguien detrás del arbusto.-dije en voz baja sin dejar de verme

-Es como si tuvieras un sentido arácnido para las cámaras.-solté y él rió

-Sólo no te des la vuelta.-dijo y besó mi cabeza antes de ponerse de pie- ¿Quieres un helado?-preguntó teniéndome la mano, sonreí y tomé su mano para ponerme de pie- Sé que no eres fan de las cámaras.-agregó mientras cruzábamos la calle, yo negué haciendo una ligera mueca

-Y agradezco que lo entiendas.-respondí con un poco de humor- No me molesta si se trata de una fan, pero cuando es alguien más...-lo miré por un segundo- Ya hemos hablado de esto.-suspiré y él sonrió

-Ya, tu teoría sobre Rodolfo. Debo admitir que está muy bien desarrollada.-dijo con una pizca de orgullo

-Amigo o enemigo, las cámaras y yo no nos llevamos bien.-concluí y él pasó su brazo por mis hombros

Para cuando estaba anocheciendo, ambos ya estábamos en el aeropuerto con destino a Bogotá. En el vuelo, él aprovechó para trabajar un poco mientras yo leía un libro.

-¿Estás cansada?-me preguntó cuando estábamos recogiendo nuestro equipaje, negué suavemente

-Tú sí que te ves cansado.-hice una ligera mueca pero él sonrió tranquilamente, tomó mi mano mientras caminábamos hacia la salida del aeropuerto

Pedimos un taxi que nos llevar hasta el departamento de Villa, noté que él estaba quedándose dormido, sonreí un poco. Ni bien llegamos al departamento, Villa cayó rendido en la cama después de poner su celular en silencio. Yo ordené algo de comida para cenar y salí a la terraza a cenar mientras escuchaba música y veía las luces de la ciudad.

-Sofi, ¿Qué haces despierta a esta hora?, ¿Por qué no vienes a la cama?-me preguntó Pablo mientras tallaba sus ojos, comenzó a llover

-No puedo dormir.-solté y él se sentó junto a mí

-¿Te sientes bien?-preguntó suavemente y yo asentí- Entonces, ¿Algo te preocupa?-sugirió y yo suspiré un poco

-Sí, muchas cosas me preocupan.-dije suavemente sin dejar de ver las luces de la ciudad- Amo esta ciudad, pero...-torcí un poco los labios- Sólo acabo de entender que en ningún lugar me siento a salvo, y no sé cómo decirlo sin que suene loco.-reí un poco y pasé una mano por mi cabello- No puedo confiar en mi propia familia, no subestimo ni por un momento que son capaces de hacer daño a alguien bueno, porque por alguna razón mi padre terminó siendo un desastre...-me puse de pie al sentir que mis ojos se cristalizaban- Y tengo miedo porque no quiero terminar igual... No quiero ser como ellos.