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Joshua relajó cada músculo de su cuerpo. Logrando hacer que su respiración se calme –No iba a admitir que el abrazo de Yoon ayudo en eso–, suspiro mientras elevaba su vista para divisar el perfecto perfil del contrario.

Hasta ese momento se dio cuenta del pequeño rasguño, que estaba recién hecho, sobre la cara de este. ¿En qué momento se lo hizo? Todo pasó tan rápido que ni siquiera él sabe cuando.

— ¡Idiota! —elevo su voz pegandole al contrario una y otra vez en el pecho buscando alejarse al mismo tiempo. Jeonghan mantenía esa expresión sería, el mayor no podía deducir que era lo que estaba pensando hacer el menor.

— Perdóname. —fue lo único que salió de la boca del menor, quien se aferró nuevamente al mayor.

Joshua negó, alejándose , mejor dicho, intentando alejarse de Jeonghan.

— No tengo nada que perdonarte ¿Sabes? —murmuró con tristeza mientras bajaba su mirada. Jeonghan tomo el mentón de Jisoo suavemente, elevandolo, haciendo que le mirara directamente a los ojos.

Fue entonces cuando el mayor se dio cuenta, la chispa de lujuria y tristeza combinada en los ojos del menor. Sentimientos que no podían ser combinados se encontraban reflejados en Jeonghan.

Joshua abrió sus labios levemente,intentado argumentar algo para que la situación no se saliera de control. Qué era hacia la dirección en donde parecía avanzar, mordió su labio inconscientemente.

Genial. Parecía que su cuerpo estaba en contra de su mente.

Jeonghan se acercó a escasos centímetros del contrario. Sus labios se rozaron levemente, mientras sus alientos se confunden el uno con el otro, Joshua se estremeció en los brazos del menor. La mirada penetrante que este tenía le recordaba a un tigre acechando su presa. Tenía miedo, no lo iba a negar, pero también estaba interesado en saber qué era lo que tenía Yoon en mente.

Como a su vez, el sentimiento de que lo besara lo atacaba una y otra vez. A ambos.

— Una oportunidad —habló por fin, desconcertando a Joshua—. Dame una oportunidad para amarte, para demostrarte que te amo.

El contrario reaccionó, negando rápidamente. Oculto su rostro, no quería dejarse llevar por las dulces palabras de su —bueno, ahora ex— novio, pero exactamente lo que estaba haciendo.

Quería creer en él nuevamente, quería llevar la relación más allá del límite que ambos tenían permitido. Quería sentir su cuerpo unido al del menor, probar su sabor, tener una pizca de ese desconocido placer.

Incluso, gemir el nombre de Jeonghan no sonaba tan mal.

Unas pequeñas lágrimas salieron de sus ojos. Él quería todo junto a Yoon, pero no sabía si el deseo era recíproco. Jeonghan esperaba una respuesta por parte del mayor, quien no le dejaba ver su rostro. Una pequeña gota cayó sobre su brazo, dándose cuenta hasta entonces de lo que pasaba.

— No creo que desees estar con alguien que tiene tantos defectos como yo. —un hilo de voz salió de la boca del contrario.

Jeonghan sonrió con indulgencia, obligando al contrario a mirarle. Deposito un suave beso en los labios de este, uno que poco a poco comenzó a tomar intensidad. Sus labios se movieron uno junto al otro, combinando de una forma inexplicable.

Joshua pasó sus manos por encima de los hombros de Jeonghan, mientras esté apretó la cintura del mayor haciéndole soltar un leve quejido debido a la fuerza empleada.

Cuando se separaron, sus respiraciones agitadas no hicieron ausencia. Juntaron sus frentes, cerraron sus ojos, el calor de sus cuerpos era una tortura para ambos, pero el menor pensó que no era el lugar ni el momento adecuado.

Joshua se merecía lo mejor del mundo, por eso no le importaba aguantar un poco más. Por su parte Hong, no podía estar más de acuerdo con ello.

— ¿Considero eso como un "hemos vuelto"? —sonrió el menor acariciando la mejilla del contrario.

— ¿Quieres que te bese para comprobarlo? —sonrió, Yoon elevó sus cejas.

— No estaría mal.

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