II

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Le conté a Seokjin como si se tratara de un cuento de hadas, un sueño o una simple fantasía que tuve, pero fue real... Supongo ¿No? No creo que esté tan mal como para imaginar eso, duermo bien, como bien, no tenía fiebre, no consumo alucinógenos, así que no, no fue algo irreal, aunque lo pareciera.

Está vez me enfoque en contarle a detalle la apariencia del chico del bus. Y al parecer continuaba creyendo que se trataba de su primo, así que para nada desesperado, claro, le apresuré a que buscara una foto de su primo.

— ¡Aquí está!— dijo él, con su celular en la mano. Por alguna razón me puse nervioso, con las esperanzas altas. Pero en cuanto giró su dispositivo me di cuenta de que no era quien esperaba.— se llama Namjoon ¿Es él?— negué rotundamente y me eché a morir en mi asiento, mientras el profe entraba al salón.

Mi amigo solo me miró un segundo con pena y risa, para luego prestar atención a la clase. Pero yo no podía dejar de pensar en él. Me parece imposible que alguien así exista, y también me parece interesante la manera en que el universo nos unía... Sí, ya sé, yo no soy un chico supersticioso, jamás le he atribuido nada al destino o a dios, pero tan solo su presencia al lado de la mía se sintió como si todas las decisiones de mi vida me hubieran guiado a ese momento mágico. ¿Y si yo no hubiera quitado mi vista del chófer? ¿Y si el chófer no paraba la primera vez? Pero lo hizo. Lo hizo y pude ver al del bus.

Nuevamente me hallaba ahí sentado como todos los días en el paradero. Seokjin me fue a dejar está vez y esperó conmigo, pues dijo que quería asegurarse de que el chico del bus fuera tan bueno como se lo describí. Pero pasó su bus y el no estaba allí, así que asumí que vendría en el mío, lo que en efecto, ocurrió. Pero Seokjin...

Me miró e hizo una seña, como preguntando si era ese chico que venía parado, el único parado en realidad. Asentí y el de hombros anchos sonrió con malicia para luego dejar un beso en mi mejilla. Obviamente le pateé en la pierna por lo que hizo y subí rápidamente a mi bus con una mueca de disgusto, pero él no se detuvo allí.

— ADIÓS, AMOR ¡¡CUIDATE!!— gritó, lanzando un beso. Más de una mirada pesada y fea me gané por los pasajeros, pero no me dolieron las miradas, sino que me dolió la persona que no me miró.

Tenía el semblante serio y observaba el movimiento del bus a través de la ventana. Caminé lentamente y como un perro con la cola entre las patas, con vergüenza, me puse al lado de él, sosteniendome en uno de los pasamanos de arriba, o bueno, eso intenté, pero tenía que mantener el equilibrio en las puntas de mis pies por mi baja estatura, y en una de las vueltas de bus, casi caigo hacia atrás, de no ser por el brazo que me sujeto.

Sonreí como un tonto, pero el moreno se mantenía serio. Intenté tomarme del pasamanos de nuevo pero el puso su mano en el que yo estaba usando, y luego tomó mi mano para ponerla sobre su brazo, y así yo poder sostenerme adecuadamente de él. Ustedes me leen todo normal explicándolo pero por dentro soy una cascada de emociones que no tienen ni pies ni cabeza. De inmediato el rubor subió a mi rostro, algo característico de mi cuando me pongo nervioso o estoy avergonzado, como en situaciones como estás, aunque el sentimiento que me define más en este momento es : enamorado. Me siento enamorado, feliz, alegre, vivaz, sonrojado, pero aún así... Triste porque el sigue sin mirarme.

Pero el viaje aún no terminaba, así que en otra vuelta del bus, como soy debilucho, terminé abrazándolo sin querer para no caerme. Me costó reaccionar, y cuando lo hice miré hacia arriba y al fin, ¡AL FIN! Me estaba mirando, a mi, solo a mí. Y le sonreí con vergüenza. El no sonrió de vuelta, solo quitó su vista de mi, pero agarró mi cintura, sí, mi cintura, y me apretó a él, susurrando.

"No te caigas..." Con una voz tremendamente grave, pero suave a la vez, y un puchero que lo hacía ver menos enojado de lo que se veía antes.

A todo esto... ¿ESTABA CELOSO?  O quizás solo tuvo un mal día... ¿Habrá escuchado a Jin? Probablemente sí, pero no puedo asegurar que su mal humor sea por eso.

Bueno, por el momento solo me dedicaré a disfrutar de su cercanía. Mis brazos rodeando su torso y mis ojos fijos en su perfíl (si.... Capaz luzca como una psicópata). Su brazos sosteniendome por la cintura mientras el otro estaba en el pasamanos que evitaba que cayeramos cada vez que el bus se movía brusco. La gente nos miraba feo, la mayoría, pero poco a poco ser fueron bajando. Los otros simplemente nos ignoraban y nos dejaba ser.

El chico se percató de que no había apartado mi mirada de él, y me la devolvió, fría y penetrante en mi alma. Comencé a temblar de nervios, y el se dió cuenta. De inmediato me sonrió para calmarme, y funcionó realmente rápido.

— soy Kim Taehyung.... — murmuró.

— soy Min Yoongi... — le respondí en el mismo tono, con un calor en mis mejillas.

Kim Taehyung, Kim Taehyung, Kim Taehyung, Kim Taehyung, Kim Taehyung, Kim Taehyung.

No te olvides Min, es el nombre más importante del jodido mundo así que no te olvides, cabeza de chorlito.

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Holi uwu
Está es la parte dos, y si notan que avanza muy rápido, es porque es una historia corta (creo que ya especifique eso pero weno)

Gracias por el apoyo de todas maneras, porque a pesar de ser corta, igual toma parte de mi tiempo y creatividad 💜😼

I luv U bye

El del Bus //Taegi//Historia CortaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora