11:30 p.m

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El portero sonó de forma insistente alterando al chico que estaba ordenando el salón del piso. Joder qué pesado, pensó Diego mientras terminaba de poner la botella de whisky en la mesa e iba a abrirle a su amigo. En menos de un minuto este ya estaba dentro de la casa soltando algunas de las cosas que traía en la mochila para preparar la cachimba.

- Illo hermano, ¿por qué coño tardas tanto en abrir? La poli casi me ve entrando a tu portal. - le dijo Javi un poco exasperado. Con las nuevas medidas de seguridad del covid, el toque de queda se había adelantado a las 22:00. Y teniendo en cuenta que el reloj marcaba casi media noche, el chico por poco se lleva una multa por "culpa de su amigo".

No es que Javier no se hubiese saltado el toque de queda antes. Algunas veces incluso había estado toda la noche en la calle haciendo caso omiso de las medidas de seguridad por la pandemia. Pero la zona en la que Diego vivía estaba muy expuesta y los coches patrulla merodeaban por allí con demasiada regularidad. Y por ello nunca solían quedar en su casa. Aunque esta vez había sido la excepción.

Los padres y la hermana del chaval se habían ido el fin de semana al pueblo. Así que como tenían casa sola decidieron aprovechar. Por desgracia, los otros dos amigos que se supone iban a pasar la noche de bros, avisaron de que ya tenían otros planes y no vendrían.

- ¿Te han dicho los otros dos subnormales por qué no han podido venir? - preguntó Diego mientras preparaba la cachimba con ayuda del otro chico.

- Victor dijo que se iba con su novia y Manu ni idea. Creo que está malo o algo nosé.

- Lleva varios días raro, ¿crees que le pasa algo?

Suspirando Javier negó con la cabeza y contestó - Cada vez que le pregunto si le ocurre algo, pasa de mi. Me está empezando a cabrear con las gilipolleces.

- Déjalo, a lo mejor es serio. Nos lo dirá cuando le salga de los huevos.

Asintiendo no muy convencido, cogió la cachimba ya preparada y la llevó al salón de su amigo. Este lo seguía desde atrás mientras miraba el móvil.

Los dos se acomodaron en el sofá y pusieron algo de música en los altavoces. Hablaron durante un buen rato mientras daban algunas caladas a la pipa. En cuestion de una hora o quizá menos la cachimba ya se había acabado y ambos amigos discutían ahora sobre que película poner.

- Bro pon Barbie y los delfines mágicos - dijo Javier mientras le daba un trago a su cubata encima de la mesa.

- Illo que no hermano, ya me la he visto. Voy a poner My little pony y punto.

- Mira que eres pesado tio, me tienes de los ponis hasta la polla. Pa' eso pon Frozen 2 que todavía no me la he terminado.

- Frozen no bro, que con el final lloro.

Después de una gran discusión sobre qué ver y qué no, terminaron viendo la tercera temporada de Ladybug. Ambos eran fanáticos de la heroína (xd). Estaban sacando ya la cuarta pero tenían que repasar las teorías de la serie. Además de que la tercera temporada es una de las mejores.

Terminaron de ver los 3 primeros episodios y los dos chicos ya estaban un poco borrachos y aburridos. La botella de whisky que en un principio estaba llena, ahora iba por la mitad.

- Ostiah, pues creo que mi hermana tenía un muñeco de tikki en su cuarto. - soltó de repente Diego, recordando que su hermana es una gran fan de la serie.

- ¿Qué dices?¡¿Enserio?!

-Como lo oyes, está to' guapo en verdad.

-¡Vamos a buscarlo! - gritó emocionado el otro chico.

Noche de Bros [𝔅𝔵𝔅] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora