Hate It (KookMin)

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Finalmente ambos habian podido tomar una taza de té, sin que alguno de los dos se lanzará hacia los pantalones o los labios del otro. Entonces después de cruzar algunas palabras, Jimin sin muchas ganas le pidió que se marchará, porque tenía que hacer compras para sobrevivir el resto de la semana.

Fue vergonzoso como casi le pide a jungkook que le acompañará, pero en el último segundo se arrepintió y le dejó marchar con ropa que prometió devolverle apenas llegara a casa a cambiarse y lavarla. Jimin no le tomó mucha importancia si le devolvía o no la ropa, pues a él le quedaba demasiado suelta y ya no iba con su estilo actual, pero al menor parecía quedarle muy bien, incluso algo ceñida a todo su fornido cuerpo.

Ambos se separaron con una lentitud igual o peor que la de una tortuga. Cuando dejaron de verse a la lejanía, sin ningún tipo de discreción, pudieron apresurar el paso hacia sus respectivos destinos.

Jungkook no sabía el como una noche le había hecho ver el mundo con otros ojos. No se sentía la misma persona y mentiría si dijera que no le gustaba.

Poco más de quince minutos duro su buen humor y ganas de sonreír por todo lo que se cruzaba en su camino, todo se vio interrumpido al ver a Jiwoo, quien era la razón por la que no quería volver a casa y había pasado una noche con otro hombre.

Oh Jiminnie.

Su mente le pedía gritar, más solo soltó un suspiro y trató de no abrumarse por todos esos sentimientos que lo llenaban con una felicidad extraña, como después de una noche fría, tomará un baño caliente y todo ese vapor le relajara hasta el más tenso musculo de su cuerpo. Una sensación familiar, pero no tan explorada.

Planeo acercarse  sin ser visto hacia Jiwoo. Abrió la puerta del pintoresco café, parecía tener una temática naturista, pero con precios del mundo actual. Antes de que se le pudiera acercar a su ex novia, otro sujeto alto, de cabellera rubia grisasea y extraña sonrisa geométrica tomará asiento a su lado e inmediatamente después de dejar dos cafés en la mesita central, tomará las manos de la fémina entre las suyas.

Aquello aunque fuera un simple roce, le hizo volver a sus más infantiles y antiguos arranques de ira. Se puso detrás del chico enfrentando a Jiwoo con una mirada que hace algún tiempo la hubiera hecho temblar de miedo, pero ahora sólo le parecía ridícula y molesta.

–Qué es lo que significa esto– Salió de su "escondite" para encararlos frente a frente  con su más intimidante voz y pose– Terminas conmigo hace apenas unas horas y ya te estás viendo con un perro asqueroso desconocido.

Aquello había sonado más ridículo de lo que había planeado en su mente, pero ya lo había dicho con el suficiente volumen como para que la gente de los alrededores volteara a su mesa y empezará a cuchichear. Cabe recalcar que hasta la persona que seguramente trabajaba en la cocina salió para ver el "espectáculo" que sería montado por la parejita.

Jiwoo con notable confusión, le tomó algunos segundos para levantarse y no dejarse intimidad por su ex–No le digas así a Taehyung, y por si no lo recuerdas te di suficientes razones como para que no te me volvieras a acercar Jungkook.

Antes de que le replicara, escucho al acompañante de Jiwoo susurrarle "así que este es el Jungkook del que hablabas?" cosa que hizo al menor obligarlo a levantarse y amenazalo con más que su mirada, un puño que amenazaba caerle en su nariz.

–¿Se les dio el tiempo de hablar de mi? Todo este tiempo tuviste un amante Jung Jiwoo? No te da vergüenza haberme estado engañando con este gato.

Le señaló ofendido al platinado desconocido. Algo dentro de Jungkook estaba destrozado, no dolía tanto como creía que pasaría hace algún tiempo, pero aún así le lastimaba que Jiwoo tuviera a ese alguien especial cuando su relación iba "bien".