Capitulo 3

217 10 3
                                    

Ahí estaba el con un Whisky con hielo en la mano mientras que el estaba hablando con un grupo de hombres que iban igual que el, en un traje que se veía que era caro, estaban en una zona VIP que no se podía acceder sin autorización o sin reserva, los demás estaban riéndose de algún comentario que hizo un rubio bastante guapo, pero el para la edad que tendría estaba serio, impasible sin una pizca de gracia en su expresión. Me había des concentrado ya y había perdido el hilo del baile, no podía concentrarme en hacer ningún paso bien desde que lo había visto, no pareciera que llevara 5 años bailando. Por suerte la canción se termino,el chico me cogió por la cintura para que nos fuéramos a algún lugar pero yo le sonreí al chico y le di un beso en la mejilla y me fui a buscar a mis amigos para seguir pasándomelo bien y olvidarme que lo había visto, me dije a mi misma que tendría que haber sido una imaginación que habría sido por tanto estrés que he tendió esta semana que ya veo cosas que no son. Cuando les encontré nos pusimos los tres a bailar y a beber unas cuantas copas más.

Alice ya estaba bailando muy pegada a un chico muy mono, se estaban susurrando cosas y mi amiga solo asentía y sonreía, ya me imaginaba lo que le estaría diciendo. Y por otro lado estaba Marcos con una rubia muy plástica y vestida como toda una guarra bailándole como si no hubiera un mañana. Yo no paraba de reírme de las situaciones que estaba viendo. Yo ya me encontraba cansada y me dirigí a mis amigos a decirles que me iba a mi casa.

Chicos yo me voy a casa ya, estoy cansada y un poco mareada.-Les dije sonriendo. Marcos me miro mal y se separo un poco de la rubia.

No puedes irte sola espera un poco y te llevo a casa-dijo serio. Le acaricie la mejilla y le sonreí

No me va a pasar nada voy a coger un taxi y cuando este en casa os mando un mensaje de que e llegado sana y salva.-Les dije y les sonreí a los dos mientras que le acariciaba la mejilla a Marcos y la rubia me miraba con mala cara y Alice se reí porque sabia que solo lo estaba haciendo para picar a la nueva amiguita de nuestro amigo.

No te puede ir Eva, como te vallas sin nosotros me voy a enfadar, no quiero que te pase nada.-dijo Marcos enfadado.

Marcos no me va a pasar nada, pásalo bien y mañana por la mañana os veo en mi casa para nuestra tarde juntos vale?-le dije sonriendo con ternura mientras que le daba un beso en la mejida y le daba otro a Alice que ella estaba sonriendo como tonta y no se enteraba de nuestras pequeña discusión, porque estaba muy entretenido con el moreno que la tenia agarrada por la cintura y por la borrachera que lleva no se enteraba de nada.

Vigila la y que no la pase nada a Alice- le dije a Marcos que me cogió del brazo y me dijo- Claro que la voy a vigilar, no dejaría que la pasara nada nunca y lo sabes y a ti tampoco por eso no quiero que te vallas- me dice en un susurro. Le beso en la mejilla y le aprieto la mano en señal de que no me va a pasar nada.

Adiós chicos, encantada de conoceros-dije a los acompañantes de mis amigos. La rubia dijo adiós sin ánimos mientras que el moreno me dijo:

No te nos apuntas a un trio? preciosa, te podría hacer muchas cosas- me dijo el moreno yo le sonreí mientras que mi amiga le miraba mal y le pegaba un codazo, y eso ya significaba que había perdido todos los puntos ganados, al menos que haga algún milagro el chico no creo que consiga ya nada con mi amiga y Marcos le miro con enfado y irritación.

Tu no podrías complacerme, pero gracias por acordarte de mi- Le dije lo ultimo con sarcasmo.

Estaba intentando salir de entre tanta gente y tanto agobio, que cuando salí del local, tome una gran bocanada de aire y me dirigí al frente para coger un taxi. Me metí dentro de un taxi que había visto libre, cuando iba a arrancar el conductor, dos hombres entraron con mucha prisa. Cuando me gire al único de los dos que vi fue al rubio que había visto antes reírse dentro del local con el Dios Griego y otros hombres. El rubio me miro con cara de pervertido y me sonrió de lado mientras que dijo:

A la Clínica Santa Elena rápido- dijo autoritaria una voz que provenía de al lado del rubio que me miraba con una sonrisa, que no le preste mucha atención. Yo estaba enfadada, indignada estaba de todo menos tranquila solo me quería ir a casa a acostarme porque estaba cansada y mareada y ahora me roban el taxi en el que voy.

Oigan ustedes dos yo estaba antes que vosotros, cogeros otro taxi porque este es mio, con destino a mi casa.-les dije enfadada mientras que el taxi ya estaba en marcha.- A la dirección que le dije antes señor- le dije al taxista, el me miro como si no supiera que hacer.

No! a la Clínica señor, es urgente, luego si quiere señorita le pagamos el taxi para ir a su dirección- dijo el rubio, mientras que su compañero que todavía no había visto se le escuchaba dar ordenes a alguien con quien estaba hablando por teléfono.

Estúpidos, roba taxis!, respira Eva-dije en voz baja, recapacitado, porque se les veia con urgencia- Acepto solo porque se les ve con urgencia- dije enfadad. Cuando gire a ver al rubio ahí fue cuando lo vi a el, ahí estaba el mirando un la pantalla de un móvil que tenia en la mano mientras que estaba hablando por otro teléfono que tenia en la oreja dando ordenes mientras que el todavía no se había percatado de mi presencia mientras que yo le miraba como hipnotizada como pasaba frustrado una mano por su pelo dejándolo mas desordenado de como lo tenia y por ese movimiento se desprendió un fragancia que al respirar no te que era dulce que no sabia cual era pero me encanto.

Gracias, por tu amabilidad, es urgente, sino no habríamos hecho eso.-me dijo el rubio mirándome profundamente.

No es nada tampoco tenia mucha prisa, solo iba a mi casa-Le sonreí y le dije mirándole a los ojos verdes que tenia.

Y como es que una preciosa joven como tu se va tan pronto a su casa y mas sin ningún chico acompañarte-dijo mirándome con una mirada picara.

Es que estaba cansada y un poco mareada, y me iba sola porque no encontré a nadie interesante- mire de reojo a su compañero mientras que mirando al rubio. Su compañero deja ya los móviles y respira profundo y se pasa la mano entre el pelo y se recuesta en el asiento.

Todo esta bien- Dice el castaño con los ojos cerrados.
El rubio se ríe y dice- Has visto no le a pasado nada al niño solo a sido una brecha y ya nos hemos perdido la inauguración de mi local. Giro mi cabeza como si fuera la niña del exorcista y le digo:

-Era tu local?

-Si, te a gustado?-dice el rubio un poco nervioso- le sonrió y asiento- Pues me alegro de que te haya gustado, porque ese local lo he abierto para jóvenes como ustedes y por cierto soy Dan encantado-me deposita un beso en la mejilla.

Gente de mi edad?, y encantada soy Eva-Digo tímida y con voz dulce.

Jóvenes sin preocupaciones.-dice riéndose, se rasca la barbilla y dice-mmmm como la mujer que comió de la fruta prohibida.

Lleve nos a la dirección de la señorita-dice irritado el castaño con los ojos cerrados todavía sin percatarse de quien son. El conductor asiente y cambia de dirección. Todo en el taxi estaba en completo silencio aunque un poco incomodo. Estaba nerviosa porque estaba en el mismo coche que el dios griego y estaba respirando el mismo aire que el.
Iba tan metida en mis pensamientos que no me di cuenta cuando ya esta amos en la entrada de mi gran casa solitaria.
Bonita mansión, preciosa - dijo Dan con sorna y alegría para intentar cambiar el ambiente del coche.
Yo me bajo aquí adiós y gracias - dije atropelladamente para poder salir de aquel coche rápidamente.
Espera preciosa dame tu número al menos- dijo con una sonrisa de lado mientras que el dios griego miraba el móvil concentrado sin ninguna expresión.
Eso te lo tendrás que ganar, prechiocho- le dije riendo y saliendo del coche para a llamar al telefonillo para que abrieran el gran portón. Mientras que en traga al gran portón pude escuchar decir a Dan.
Eso no lo dudes, preciosa - dijo mientras que se oía un gruñido fuerte y rabioso.
Llegue a la entrada con mis tacones en las manos y pensando en que le abría pasado al hijo del Dios griego para acabar en hospital. Mientras pensaba en todo la noche que e pasado me esta a despojando de mi vestido y medias para coger un pantaloncito corto y una camiseta de tirantes. Mientras que me estaba uniendo a morfeo vi unos ojos marrones oscuros muy intentos que me miraban con un brillo diferente a como me hayan mirado antes algún hombre.

InesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora