(꒪˙꒳˙꒪ ) 𓍢ִ໋ ໒ ☆ hyunjin harem
୨ ★ ୧: en donde hyunjin por error
olvidó cubrir su web cam y ahora
ha sido comprado por el mejor
postor en la red oscura sin
saberlo ....
𖣠 suspenso, terror psicológico
𖣠 hyunjin bottom ★ harem
𖣠 adaptación per...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
❝ Nunca creí que volvería a ver tu horrenda cara de nuevo, Lee Minho.❞
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¡Devuélveme a mi mocoso, Lee Minho!
Lee Felix y Yang Jeongin estaban a tan sólo unos metros de atraparlos.
—Mierda. Yuta, rápido. —Se dirigió al rubio empujándolo para sacarlo del pequeño trance que había tenido, el castaño comenzó a correr entre la gente con Hyunjin.
El japonés obedeció siguiéndolos por detrás, la gente tapaba la vista de ambos hombres.
—¡¿Qué mierda esperan, eh?! ¡Vayan a perseguirlos!—Ordenó Yongbok de manera tensa a sus dos hombres, Yang también comenzó a correr detrás de ellos. El australiano sabía que nada saldría bien así que con pesadez decidió emprender marcha también.
El castaño siguió caminando con rapidez perdiéndose entre la gente, Hwang apretaba su mano con fuerza, no quería irse.
—¡Detente ahí, Minho! La manzanita es nuestra. —Jeongin seguía corriendo detrás de ellos, sus gafas de sol habían caído al suelo.
El mercenario gruñó ignorando los gritos del escandaloso de Yang, soltó una gran maldición cuando se vieron interceptados por los dos hombres de Felix en una esquina solitaria. Estaban acabados.
—Minnie... no otra vez. —Susurró el rubiecito aferrándose al cuerpo del tatuado, Minho le correspondió de la misma forma. Nadie le arrebataría a su pequeño ángel de nuevo, primero se los lleva al infierno antes de que lo toquen.
—Eres mío para la eternidad, Hwang Hyunjin. No te dejaré ir.
—Vaya, vaya. —El empresario llegó al lugar seguido de Jeongin quien tenía una encantadora sonrisa en su rostro, cínicamente saludó al rubio. —Nunca creí que volvería a ver tu horrenda cara de nuevo, Lee Minho.
—Oh, Felix. Me vale verga si querías verme o no, ni siquiera te recordaba hasta hoy. —Soltó duramente ganándose la risa de Yang Jeongin, el de rasgos gatunos apretó la cintura del menor cuando notó que se acercaba.
