My Favourite Flower (Chaelisa)

5

Lisa's POV.

Tiene un nombre hermoso. 

Fue el primer pensamiento que cruzo por mi mente cuando la sorpresa inundo cada centímetro de mi cuerpo. Park Chaeyoung, calzaba perfectamente en ella. ¿Estaba en algún tipo de sueño donde podía ver esa sonrisa de cerca? Si, debería ser eso, porque era incomprensible para mi oír su risa debido a algo que había dicho Jisoo. Mi cerebro se negaba a procesar la idea de que mi inspiración se encontraba enfrente de mi. Tan cerca pero a la vez tan lejos.

No pude evitar recorrer su perfil con lentitud; su belleza era mas impresionante de cerca. Parecía irreal y aprovechando la oportunidad de la cercanía, guarde cada detalle en mi memoria. Desde cada linea de expresión en su rostro hasta ese imperceptible lunar abajo de su labio inferior. Estaba segura que mis próximos dibujos serian mas acertados, pero sin llegar a plasmar lo precioso que era su rostro.

"¿Cuantos años tienes, Lisa?"

Sali de mi ensoñación al momento en que Jennie me hizo esa pregunta y, ahora, los tres pares de ojos me miraban con atención. Me aclare la garganta antes de contestar.

"Cumpliré 21 el mes que viene" murmure tímidamente.

"¡Vaya! Pensé que eras mas joven." admitió sorprendida. "La juventud es diferente ahora" contuve una sonrisa cuando Chaeyoung rodo los ojos.

"Nos haces parecer ancianas" musito la pelirosa. "Solo es cuatro años menor que nosotras"

"Eso es irrelevante." Jennie hizo se encogió de hombros. "¿Ya viste su rostro? Cuando la vi pensé que era una muñeca de porcelana" sentí como mi rostro y parte de mis orejas se colorearon de un rojo intenso.

"Ah, no hermano" Jisoo tomo la mano de Jennie. "Consíguete la tuya" 

"¿De donde eres? " pregunto Chaeyoung cuando logre recomponerme y en su mirada podía percibir la curiosidad. Jennie y Jisoo se habían vuelto a perder en su mundo de enamoradas para este punto. "Por tus rasgos puedo asumir que no eres coreana"

"N-Nací en Tailandia pero me mude a Seúl cuando era pequeña." 

Solo éramos una pequeña familia humilde que buscaba su supervivencia en un mundo en el que no importaban la nobleza de tus acciones, siempre te jugaban por la apariencia que portabas y que tan caras eran tus pertenencias. Una familia feliz que deseaba salir adelante en sus metas; manteniendo la esperanza a cada momento. Sin embargo, eso no evitaba que las desgracias cayeran y termináramos consumidos por los sentimientos negativos. Especialmente por la tristeza y la ira.

Y todo por ser la causante de la muerte de mi madre.

Tenia que dejar de pensar en eso si no quería llorar enfrente de las chicas. Por eso reuniendo mi fuerza de voluntad, aleje esos pensamientos en lo mas profundo de mi mente; cuando estuviera sola, podría desahogarme a mi manera. Si es que mi padre no lo arruinaba.

"Debió ser duro" No sabes cuanto. "Pero puedo comprender como te sientes. Yo también tuve que abandonar mi hogar para mudarme a Australia" suspiro. "Solo era una niña cuando a mi padre lo ascendieron en su trabajo y tuve que dejar a mis abuelos." sus ojos se cristalizaron y contuve el impulso de estirar mi mano e impedir que las lagrima bajaran por sus mejillas. "Ese día me prometí que volvería y me haría cargo de su florería. Algo que con mucho esfuerzo lograron que se conservara."

"¿Siempre has amado las flores?" pregunte y sus ojos parecieron iluminarse como dos estrellas en una galaxia. 

"Como no tienes idea." mi corazón latió con fuerza cuando divise una hermosa sonrisa nacer en esos dulces labios. Era mas hermosa verla de cerca. "La variedad que existen; cada una siendo única en su forma y olor es indescriptible. Siendo muy gratificante como las flores pueden trasformar la vida de las personas al momento en que son apreciadas." exclamo." Mi vida cambio cuando me di cuenta de lo mucho que amaba las flores"

"Yo opino lo mismo" su mirada me penetro y trague saliva antes de continuar. "Las flores forman parte de las pequeñas cosas gratificantes de la vida..." suspire. No podía creer que estaba teniendo una conversación decente desde que entramos "Sin embargo, eso no evita que puedan ser relevantes. Incluso, llegan a servir de inspiración para aquellas almas que buscan liberar su creatividad"

"Exacto." asintió sorprendida. "No sabia que podía haber alguien que compartiera esos pensamientos."

Su voz fue volviéndose mas suave conforme las palabras abandonaban sus labios. Parecía que mis palabras la afectaron de alguna manera por la forma en que su mirada cambio cuando nuestros ojos se encontraron. No supe cuanto tiempo estuvimos viéndonos a los ojos y solo aterrizamos de nuestra luna cuando escuche un carraspeo a nuestro lado. Chaeyoung pareció darse cuenta de algo y aparto la mirada rápidamente mientras yo regañaba a mi corazón acelerado.

"Lamento interrumpir su concurso de miradas, pero creo que ya es momento de irnos" musito Jennie mirando el reloj en la pared de la pintoresca cafetería. 

Imite su acción y temblé en mi lugar al comprobar la hora. Oh, no. Me levante de mi asiento de tirón provocando que las chicas me miraron preocupadas; no necesitaba verme en un espejo para saber que mi rostro se había vuelto pálido. Mi corazón empezó a latir pero no de una buena manera y el miedo se instalo en mi cuerpo. Recogí mis cosas con prisa cuando sentí la mano de mi mejor amiga posarse sobre mi brazo

"¿Estas bien, Lisa?"

La preocupación era evidente en su tono de voz y mire a las otras dos chicas que me miraban de la misma manera. Tenia que calmarme, si no quería que sospecharan; por ningún motivo podían enterarse. Así que tragándome el nudo de mi garganta, esboce la mejor sonrisa que podía tener y negué con la cabeza, tomando la mano de Jisoo y dándole un ligero apretón.

"Si, lo siento."

¡Mentirosa!

"Solo recordé que tenia que ir al supermercado y tengo que correr porque están a punto de cerrar" me encogí de hombros. 

"¿No quieres ayuda?" pregunto Jennie. Negue con la cabeza.

"Podemos ayudar" agrego Chaeyoung.

"No, gracias. Solo voy por cosas básicas, nada del otro mundo" recogí mi bolso. "Me alegro haberlas conocido, espero que podamos seguir en contacto" les dedique una sonrisa.

Sera mejor que no lo hagas si no quieres que las lastimes.

"También me alegro conocerte, Lisa" dijo la castaña. "Eres muy agradable y me alegraría que pudiéramos hacer una amistad" asentí y le dedique una sonrisa

"Nos vemos, Limario." Jisoo se levanto de su asiento y me dio un corto abrazo. "No se te olvide que mañana tienes que ser puntual con el jefe si no quieres que te patee el trasero." me señalo y me miro con los ojos entrecerrados.

"Descuida, Unnie. Lo tengo anotado" 

Con eso la pelinegra me sonrió y volvió a tomar lugar. Mis ojos fueron hacia Chaeyoung que me miraba fijamente y le dedique una sonrisa haciendo que ella también sonriera. 

"Cuídate, Lisa." musito suavemente. "Fue un placer conocerte."

"Para mi también, Chaeyoung"

Mire a las chicas e hice una reverencia antes de abandonar el lugar. Conforme mis pasos avanzaban mi mente solo pudo enfocarse en una cosa y esa era en la sonrisa que me había dedicado la bonita chica de cabello rosado en el momento exacto en que había dicho su nombre. Fue algo que hizo que mi corazón saltara sobre mi pecho y ni siquiera la paliza que recibí cuando llegue a mi hogar pudo hacerme olvidar de ello. 

Mis odios únicamente podían escuchar su voz sobre los gritos y mis ojos solo podían ver los suyos. Los golpes y palabras hirientes ya no tenían efecto porque estaba consciente de que había encontrado una forma de desviar mi dolor y sufrimiento de una manera que mi mundo volvía a tener colores brillantes.  Un mundo completamente diferente que había olvidado por completo.

Porque Chaeyoung, sin siquiera intentarlo, se había convertido en mi medicina pero existía el miedo de lo que eso podía significar mas adelante.