Espósame. {Larry Stylinson}

Capítulo 6.

- Esta mejor?- Preguntó Harry a la enfermera nueva que estaba cuidando del recluso al que apuñalaron.

-Si, ten paciencia, solo a pasado un día desde que ingresó a la enfermería. Ya le pusimos los puntos y hoy mismo le damos el alta para que repose en su celda.-

Harry miró a la enfermera, suspiró y salió de la enfermería. Se quedó en la puerta del patio pensando, absorbido por las miles de cosas que pasaban por su cabeza. No podía culparse siempre de todo lo que pasaba en su turno o acabaría mal, pensó. Por otro lado, se puso a pensar en lo ocurrido con Louis, en aquel leve cabezazo que le dio, Harry esperaba que Louis no se hubiera dado cuenta que ese pequeño gesto fue algo que no pensó y una muestra de cariño que había hecho hacía Louis. 

No sabía por qué lo hizo, pero le salió sin mas, Harry esperaba de verdad que Louis no le diera tanta importancia a eso como se la estaba dando él mismo. De igual manera sabía que aquel paticorto le estaba llegando de alguna forma a su corazón y aunque Harry se empeñaba en decir que era solo por amistad, tanto Louis como Harry sabían que algo estaba pasando en el corazón de Harry. 

Negando con la cabeza intentó salir de sus pensamientos y se metió hacía la sala donde se encontraban los reclusos casi siempre que no hacían algún taller o actividad, miró hacía las mesas, concretamente la del grupito con la smiley y buscó a Louis con la mirada.

-No te molestes casco, no esta con nosotros.- Escuchó una voz aguda e irritante que le molestó.

-Perdón?- dijo confuso Harry.

-Perdonado, Louis está en otro lado, no con nuestro grupo.- concretó el recluso con voz de pito.

-No buscaba al recluso Tomlinson, así qu- 

-Ya, claro, venga casco, todos los del grupo sabemos que Louis y tú os traéis algo.-

-Recluso, le recomiendo que no me hable así o-

-O?- le cortó el recluso.- me vas a amenazar por decir algo obvio?.-

-Nombre y apellido- exigió Harry para identificar al recluso que le estaba inflando los testículos.

-Noah Stone, el favorito del señor Tomlinson, y no follo con él desde que tú apareciste así que, aléjate de él Styles. Yo si puedo joderte de verdad.-

Harry sacó las esposas del bolsillo- te vienes a aislamiento conmigo, ahora.- ordenó mientras cogía los brazos de Noah.

-Por qué a ver?- se intentó resistir Noah.

-Por desacato a la autoridad, amenazas verbales y por que me sale de los cojones- 

Esposó a Noah, con las manos detrás de la espalda y las esposas apretadas. Lo llevó a una celda de aislamiento, le quitó las esposas ya dentro, Noah en el trayecto solo había hecho que gritar con esa voz chillona y horrible, amenazando a Harry y moviendo con el intento de soltarse cosa que no logró.

-Lou vendrá a por mi, y a ti te matará. Soy su favorito y acabas de encerrarme en aislamiento por que sí.- dijo Noah riendo se.

Harry cerró la puerta tras de sí asegurando se que estaba todo cerrado y miró por última vez a Noah por la pequeña ventana que estaba incrustada en la celda. Noah relamió sus labios y sonrió victorioso como si hubiera ganado algo. Harry levantó una ceja y tensó la mandíbula, acto seguido se fue a la sala donde estaban los reclusos.

Se fue a la habitación cerca de la sala, un cuarto acomodado para que los guardias se relajen y descansen, se quitó la camisa y el pantalón del uniforme, y se puso a hacer dominadas en una barra puesta entre dos palos estables en el suelo de madera. Hacer ejercicio relajaba mucho a Harry.

Al rato de estar haciendo dominadas y sudar como un cerdo, un Louis cabreado y con ganas de pelear entró a la habitación y cerró de un portazo. Harry bajó de la barra, se giró para ver quien había entrado a la sala y cuando vio a Louis se empezó a secar el sudor de la frente con la toalla.

-Puedes explicarme por qué uno de mis marcados esta en aislamiento?-bufó Louis cabreado.

-No debería darte explicaciones pero lo haré, desacato a la autorid-

-No me vengas con esas Harry.- interrumpió Louis a Harry- Noah nunca abriría la boca para hablar con un casco, lo tiene prohibido.-

-Tomlinson, tu querido Noah, me dijo que no me acercara a ti, que te dejara en paz por qué no follaba.- tiró Harry la toalla hacía un lado.

-Que?- dijo Louis, las mejillas de este se pusieron rojas.

-Lo que oyes, comenzó a ridiculizarme así que lo esposé y lo llevé a aislamiento, estará solo la noche ahí, no creo que se muera.-rodó los ojos.

-Por que no me esposas a mi?- preguntó Louis juguetón mientras se acercaba lentamente a Harry.

-Tomlinson... no te acerques así y menos diciendo eso.- dijo Harry mientras miraba como Louis se acercaba.

-Que pasa? te pone cachondo o que Styles?- dijo a poco ya de Harry, cuando ya estuvo cerca de él.

-No, claro que no- aclaró Harry- ya no estas cabreado?- Dijo Harry sentando se en el sofá que había detrás de él. 

-Solo pasara una noche y además, no puedo cabrearme viendo te en calzoncillos Styles.- sonrió de lado Louis.

-venga, sienta te, charlemos un rato- dijo Harry con su buena fé.

Lo que Harry no esperaba es que Louis se sentara abriendo se de piernas sobre Harry, a horcajadas. Casi se le salen los ojos de las cuencas a lo que Louis respondió con una risa leve y empezó a acariciar sus hombros. Harry tragó saliva, un escalofrío de placer recorrió su cuerpo y por instinto cerró los ojos.

-Estas muy tenso- masajeo los hombros de Harry- deberías de relajarte- 

Louis no podía estar mas encantado con aquella imagen, Harry con los ojos cerrados y relajando se bajo sus manos, en calzoncillos. Mordiendo su labio inferior Louis puso sus manos en la cabellera de Harry y comenzó a masajear el cabello de este. De los labios de Harry, salió un accidental gemido leve flojo que sonrojó a este e hizo que abriera lentamente los ojos.

-Lo siento Louis, es que estoy en continuo estrés y jamás me habían masajeado.- exhaló Harry cogiendo a el paticorto por la cintura- deberías quitarte, debo vestirme y seguir de guardia.

Las mejillas de Louis se tornaron rojas carmesí cuando notó las manos rudas de Harry en su cintura- ya claro, cierto- se levanta- si quieres un masaje de verdad, pásate algún día por mi celda de noche.- dijo Louis marchando se deprisa de la sala.