IV

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Any

- Kozume-san debería irme, no quiero causar molestias.

-No causas ninguna molestia, a parte no me vas a negar que esta comida está deliciosa.

Sí, estoy comiendo con el papá de Kenma. Él llegó a casa un poco después de que mi estómago gruñó.

-¿Escuchaste eso Kuroo? Ella está hambrienta.

-No lo- interrumpe Kuroo

-Es cierto- se acerca a mi y me mira fijamente.- tienes ojeras, y tu estómago no deja de gruñir, bajemos a la cocina para darte un poco de cereal.

-No- proseguí- Debo irme a casa, ya es de noche y mamá se preocupará.

-Niña, es cierto es de noche y es peligroso pero no te puedo dejar que te vayas así, a parte como el pequeño Tetsurou dice, te ves mal, es obvio que tus padres te han descuidado, vamos yo te invitaré- dijo un señor que acababa de entrar a la habitación.

-Papá -Al parecer el señor es el papá de Kenma, tienen rasgos muy parecidos, sobre todo esa mirada gatuna que podría hipnotizar a cualquiera.

Por alguna extraña razón me parecía haberlo visto antes y al mirar otra vez a Kenma, se me hacía que a estos dos ya los había visto hasta hace ya tiempo.

-Kenma, Tetsurou y...

-Any, me llamo Any.

-Y Any, bajen les haré la cena.

Bajamos y Kenma, Tetsurou y yo nos limitamos a hablar, sabíamos que se podría convertir en una discusión y no queríamos vernos mal delante a un adulto.

-La cena ya está lista.- Avisó Kozume-san

Nos sentamos en el comedor y probamos la comida.

¡Está delicioso!

Hacía ya tiempo que no probaba el sabor de una comida casera. Es inigualable.

-¿Por qué tus papás no te dan de comer?

El señor Kozume comenzó con sus preguntas, sabía que tarde o temprano llegarían, después de todo una desconocida está consumiendo comida hecha por él en su casa.

-Yo...

-Sé que te debes sentir incómoda al respecto pero creo que deberías contarme, puedes confiar en mi, tenlo por seguro.

-Yo...- comencé a llorar, debía decir algo, se lo iba a contar a alguien tarde o temprano, mamá no está bien, y papá no sé dónde pueda estar. Me sequé las lágrimas y seguí hablando- Mamá. No es porque ella quiera dejarme sin comida, es él quien se lleva todo el dinero.

-Puedes estar tranquila, si no me cuentas exactamente que pasa, no te podría ayudar.

Está bien se lo contaré. Respiré profundamente y continué.

-No tengo idea de cómo está o dónde está Papá ahora, nos dejó después del accidente de mis abuelos. Mamá se casó después con un hombre, ella no es alguien que acepte la Soledad. Ella vive con ese hombre, la pega, la insulta, la maltrata y todo el dinero se lo gasta él, por eso no como ya hace 1 semana.

El señor Kozume me quedó mirando por unos momentos y cuando estaba a punto de hablar el timbre sonó.

Escuchaba algunos pasos dirigidos hacia el comedor.

-Me alegra que llegaras bien, sabes qur te puedes quedar aquí cuando vengas de Visita.- se escuchaba la conversación desde el pasillo.

-No quiero causar muchas molestias- Esa voz, esa voz la reconocería aún si pasaran 1000 años. ¿Es él? Imposible.

-No eres ninguna molestia, siéntete como en casa. Ya quiero volver a ver a la pequeña... ehm...

Se acercaban más hacia el comedor.

-Any, mi hija se llama Any.

-Oh Any, ella- Kozume-san dirigió su mirada hacia mi y a quien estaba a su costado.

El hombre a su lado me miró directamente y yo a él.

-Any. - Dejó las maletas en el suelo sin dejar de mirarme.

Yo, con algunas lágrimas cayendo en mi rostro corrí hacia aquel hombre y en un llanto desesperado grité abrazándolo.

-¡Papá!

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⏰ Última actualización: Apr 27, 2021 ⏰

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Kenma x OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora